La industria aerocomercial de Rusia vive sus horas más complejas desde la caída de la URSS en 1991. Con las sanciones vigentes por la invasión a Ucrania, el país europeo entró en una delicadeza terminal en materia aeronáutica debido a la imposibilidad de proveer mantenimiento y modernización a las flotas de aviones occidentales acumuladas en las últimas décadas.
SIN ALAS
Rusia: Por sanciones, ofrecen "chatarra" a aerolíneas
En Rusia, la situación de las aerolíneas es límite. Las sanciones impiden el mantenimiento y la modernización de las aeronaves occidentales.
En ese sentido, las alarmas más fuertes se detonaron hace pocos días cuando un avión de Ural Airlines aterrizó de emergencia en un campo en Siberia con más de 200 personas a bordo. El incidente, que marcó una fuerte advertencia de lo que podría terminar en catástrofe, puso en vilo a toda Rusia.
Con compañías como Boeing y Airbus impedidas de prestar servicio en suelo ruso, miles de aviones en ese país se encuentran sin mantenimiento oficial hace más de un año. En el medio, un largo ciclo de desgaste por uso.
Para dar respuesta a la inminente crisis aerocomercial, Rusia activó un plan de regreso a las viejas aeronaves de diseño soviético que supieron dominar el aire ruso en la era de la Guerra Fría. No obstante, los planes de fabricación inmediata son incipientes y apenas proyectan decenas de aviones a estrenarse en 2025.
Mientras tanto, en Rusia plantearon salir del escollo tomando aeronaves antiguas de la flota oficial y proveyendo a las aerolíneas rusas. Así, el país europeo podría volver a depender de su industria en un mediano plazo, aunque con el riesgo que ello conlleva.
Al respecto, el periódico ruso Kommersant informó que la administración de Vladimir Putin ofreció a las compañías rusas aviones del Escuadrón de Vuelo Especial (SLO), servicio a disposición presidencial. Dichas aeronaves cuentan con más de 20 años de antigüedad y, en algunos casos, son más costosas de reparar que de comprar un avión nuevo, según el sitio especializado Aviación Online.
La intención del Gobierno ruso es vender aviones de pasajeros Tu-214 desactivados a aerolíneas comerciales. Algo que, en el escenario actual, se plantea más como una apuesta que como una solución concreta.
En caso de lograr reinsertar dichas aeronaves, Rusia podría volver a tomar algo de seguridad en vuelos locales e internacionales. Con capacidad de producir insumos a nivel local, se volvería así a la lógica de la Cortina de Hierro.