El ‘pichón británico de Trump’, el polémico expremier Boris Johnson, deberá testificar ante la Justicia en el marco de la Investigación Covid de carácter pública sobre su pésima gestión de la pandemia, ya que según estadísticas, no habría ejercido políticas estatales para evitar la propagación del virus -que se cobró 150.000 vidas en tal Nación- y hasta festejó en pleno confinamiento, el famoso “PartyGate” que le costó su cargo.
ESCÁNDALO EN UK
Boris Johnson rinde 'cuentas' por PartyGate y el Covid
El exmandatario británico Boris Johnson será interrogado bajo juramento en la 'Investigación Covid' de carácter público a fin de determinar si hubo mal manejo de la Pandemia.
29 de noviembre de 2023 - 13:27
Boris Johnson en problemas
“¿Para qué estamos destrozando la economía por defender a unas personas que se van a morir pronto de todos modos?”, se preguntó Boris en ese entonces, según lo reveló el diario de anotaciones del exasesor científico, Patrick Vallance.
En medio de este escándalo descomunal (con la filtración de los poco empáticos dichos) y en el marco de la investigación judicial, este miércoles acaba de testificar el exasesor de Sanidad, el conservador Sajid Javid, que renunció con el agravamiento de la crisis del Covid. Soltó ante el jurado que Boris había conformado adrede un equipo inexperto de ministros para “centralizar el poder” en manos del principal asesor presidencial, Dominic Cummings.
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El gobierno de Boris fue “disfuncional” incluso en el período previo al estallido de la crisis de Covid, según dijo el excanciller y asesor Javid, quien dirigió el Departamento de Salud y Atención Social entre 2021 y 2022, en un grado que “no había experimentado antes en ningún gobierno”.
“Yo diría que durante mi tiempo como canciller consideré que él [Cummings] buscaba actuar como primer ministro en todo menos en el nombre y trataba de tomar todas las decisiones clave dentro del Número 10, no como primer ministro", sentenció. "Sentí que el primer ministro electo no estaba a cargo de lo que estaba sucediendo en su nombre y estaba en gran medida contento con que el señor Cummings dirigiera el gobierno", añadió.
No obstante, el ex viceprimer ministro Dominic Raab lanzó este miércoles que no estaba de acuerdo con la evaluación de Javid sobre el papel de Cumming. "Simplemente no acepto la caracterización de que hubo algún tipo de régimen títere", dijo.
Boris contra las cuerdas por mala gestión del Covid
Las interrogaciones de varios exfuncionarios bajo juramento se enmarcan en la Investigación Covid que está a cargo de la baronesa Heather Hallett, jueza jubilada que anteriormente dirigió la investigación sobre los atentados del 7 de julio en Londres.
Recordemos que también el Comité de Privilegios de la Cámara de los Comunes publicó un informe lapidario sobre Boris por las fiestas del Covid en Downing Street conocidas como el “Partygate”, que aceleró su renuncia, tal como contó U24. Según el Comité, el exlíder 'Torie' mintió deliberadamente al parlamento sobre la supuesta distancia social en las "reuniones formales".
Dicho esto, es claro que Boris no dio la importancia necesaria al brote del Covid que se llevó varias vidas en su país. A principios de este noviembre, el principal asesor de Boris, Dominic Cummings, también testificó que escuchó a Boris Johnson decir que preferiría “dejar que los cuerpos se amontonen” antes que imponer otro confinamiento por Covid, algo que concuerda con las declaraciones del asesor Lord Lister.
"Aunque se trata de una frase desafortunada, hay que tener en cuenta que a estas alturas el gobierno estaba tratando de evitar un mayor bloqueo dado el ya grave impacto en la economía y la educación”, planteó.
Liser además afirmó ante el jurado que Boris casi que descreía de la letalidad del Covid, por así decirlo, a tal punto que se había ofrecido a que le inyectaran coronavirus en televisión para “demostrar al público que no representaba una amenaza”.
En esta investigación pública sobre la gestión de Boris en torno al Covid, salió entonces a la luz que el exmandatario se mostró incrédulo ante la amenaza a la salud, pese a la clara evidencia de muertes de ancianos e inmunodeprimidos por el virus, y dijo ciertas frases desafortunadas que se filtraron.
Según los testimonios de exfuncionarios, Boris incluso le consultó a un asesor si era cierto que la gente podía prevenir el virus usando un secador de pelo en la nariz, una fakenews que circuló en redes.
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