CÓRDOBA. El gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, no frena su maquinaria electoral ni un segundo. Cada movimiento realizado desde hace algunos meses y hasta 2023, tiene un intencionado significado electoral, a pesar que desde el Gobierno provincial aseguran que la concentración es exclusivamente en la gestión.
COMBO
Juan Schiaretti busca a Milei para aplanar a JxC
Juan Schiaretti está en busca de un acercamiento con Javier Milei para poder vencer a Juntos por el Cambio en Córdoba. Contactos extraoficiales.
Ante el cierre de su carrera como gobernador, el ‘Gringo’ ya ganó la suficiente experiencia como para gestionar las dos facetas al mismo tiempo: la del armado político y la de la gobernación. Y lo hace con la misma eficiencia.
Ahora bien, mientras por el lado de la gestión acelera la parte gruesa de la obra pública y de las inversiones, en la faceta del armado político, Juan Schiaretti también pisa el acelerador. A pesar de que falta bastante tiempo para las elecciones 2023, en Córdoba confían en estar entrando en el “año electoral”.
Por las fechas que se manejan (abril o mayo 2023), la ilusión de que se cuenta con mucho tiempo no puede ser un lujo para darse por parte de Juan Schiaretti. Y en ese sentido, el diagrama político en su cabeza está presenta todos los días.
En los últimos días, ese “mapa” que el gobernador de Córdoba tiene en mente incluyó a un fenómeno que viene arrasando en el contexto político: Javier Milei. El libertario parece ser quién más crece de cara al año que viene, y todos lo observan desde cerca, cuando hasta hace poco se mofaban de él y sus formas.
Ahora esa realidad cambió, y el gobernador cordobés lo sabe. En un año de recambio político fuerte en Córdoba, Juan Schiaretti pone en juego todo su capital político para darle continuidad a una gestión de más de 20 años, y el fenómeno de Javier Milei puede serle favorable.
La pulseada del PJ cordobés y Juntos por el Cambio es tan apretada en Córdoba, que un tercer peso como el del economista porteño podría desequilibrar la balanza para un lado o para el otro. Cabe recordar que tanto Juan Schiaretti como todo Juntos por el Cambio comparten electorado en Córdoba: para la provincia, suelen votar al PJ y para las elecciones nacionales, el voto va para la coalición.
Pero con su figura fuera de la pulseada provincial, Juan Schiaretti está en busca de un armado que, no solo sea potente desde lo propio, sino también estratégico en lo ajeno. Por ello, además de buscar sus mejores candidatos, intenta meter la mano en el plato de los otros partidos.
En ese orden, el gobernador envió contactos personales para hablar con Javier Milei y su gente en Buenos Aires. Allí, le hizo llegar un mensaje al economista, con el cual lo alentó a que presente candidatos en las compulsas dentro de Córdoba.
Lo que Juan Schiaretti pretende es “dividir” la potencia de Juntos por el Cambio en el comicio provincial, derivando votos al candidato libertario que se presente. Cabe recordar que en Córdoba, Javier Milei tiene una de las mejores imágenes de todo el país.
El peso del economista podría acercar al PJ provincial a los números de la oposición, que se encuentra algunos escalones arriba según las encuestas actuales. Eso, sumado al fino trabajo de división que busca instalar el mandatario en Juntos por el Cambio, le podrían dar la fórmula del éxito.
Ya lo hizo en 2019, cuando fogueó la división entre Mario Negri y Ramón Mestre, y terminó quedándose con la elección provincial y la municipal. Y ahora quiere repetir, con el nuevo escenario.
Desde el espacio de Javier Milei, el contacto fue tomado con cautela. Si bien la atención de Juan Schiaretti implica otra afirmación de un capital político real, desde el espacio libertario no quieren elegir las batallas incorrectas.
Por expresa disposición del economista, aquellas elecciones en las cuales no presenten competitividad, no serán disputadas por La Libertad Avanza y sus variantes en el interior. Por ahora, Córdoba se encuentra en construcción, con nombres en carpeta pero con pocas señales concretas.
Es por ello, que no es casualidad el “aliento” de Juan Schiaretti. Una actitud que probablemente crezca a medida que se acerquen las fechas, y que pueda evolucionar incluso en ayudas de soporte político (tal vez candidatos) para que la cara de Javier Milei auspicie a un competidor en la provincia.
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