CÓRDOBA. Juan Schiaretti, el gobernador de Córdoba, sigue firme en su rumbo de marcar fuertes diferencias con el Gobierno nacional en su construcción nacional de cara a 2023. El cordobés está dispuesto a dejar más que claro que, a pesar de ser peronista, nada tiene que ver con el kirchnerismo.
MEDIO ORIENTE
Juan Schiaretti hace lo que Alberto no: Conseguir dólares
Juan Schiaretti viajará este mes a Kuwait, para cerrar un crédito blando por US$50 millones. Primer acto como presidente de la Región Centro.
Además de la lluvia de críticas que hace detonar periódicamente sobre la gestión de Alberto Fernández, también busca hacer lo que la Casa Rosada no hace. Y uno de sus últimos movimientos en ese orden fue el de conseguir un crédito blando por US$50 millones de dólares desde Kuwait, para la construcción de un acueducto compartido con Santa Fe desde el Paraná.
La “hazaña” cometida por Juan Schiaretti viene siendo trabajada hace tiempo con el emirato kuwaití, con quienes guarda una estrecha relación desde hace algunos años. Y ahora, en medio de la sequía de dólares que le toca sufrir al Gobierno nacional, el hecho de que un gobernador pueda gestionarlos no pasa desapercibido.
Al respecto, en las últimas horas se confirmó el viaje final de Juan Schiaretti a Kuwait para cerrar el préstamo. La visita al país de medio oriente se hará en el marco de su presidencia de la Región Centro, organización estatal que comparte con Santa Fe y Entre Ríos.
El mandatario cordobés estará acompañado de Omar Perotti, el gobernador de Santa Fe que es considerado cercano a Alberto Fernández, pero que se lo ve cada vez más alineado con su par cordobés en una postura alejada de la Casa Rosada. Esto marcará también una tendencia para la Región Centro, la más productiva del país, que se siente cada vez más olvidada por un gobierno que piensa exclusivamente en el AMBA.
La independencia que Juan Schiaretti busca demostrar intenta tirar por lo bajo el modelo de “premios” que el kirchnerismo supo instalar en las últimas décadas, con el que concede a los gobernadores propios y castiga a los ajenos. De hecho, el gobernador de Córdoba parece estar hablando directamente a sus pares con este tipo de viajes, demostrando que cualquier jurisdicción debería ser capaz de no depender exclusivamente del Gobierno nacional para seguir ejecutando sus gestiones.
Así las cosas, el poder de Juan Schiaretti parece ir en aumento, y la foto con las autoridades de Kuwait no hará más que contrastar aún más su imagen de estadista con la de un presidente que parece estar completamente perdido en su cargo y aguantando las embestidas de su propio espacio. Lo único que genera dudas es la decisión sobre su futuro, el cual seguramente lo encuentre en las decisiones nacionales, aunque en un puesto que al día de hoy es desconocido.
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