La previa a las elecciones 2023 comienzan a levantar temperatura al calor de las internas del Frente de Todos, Juntos por el Cambio y otros espacios de la sociedad que también juegan, como la disputa de territorios narcos en el Gran Buenos Aires y el Gran Rosario, por ejemplo, y amenazan con generar levatamientos sociales.
FDT Y JXC EN CRISIS POR EL CÓMO
Las elecciones 2023 de 3/3 y quién financia la transición
Las elecciones 2023 ponen en aprietos al Frente de Todos y Juntos por el Cambio: la derrota de cualquiera de los dos supone una nueva configuración política.
A su vez, el ajuste en marcha con una fuerte reducción del gasto público, la inflación del 100% y una sequía histórica también forman parte de un escenario muy complejo en el que ambas coaliciones encienden alarmas por la sensación de anomia que genera esta Argentina y la idea de que la crisis del sistema solo perjudica a un precandidato: Javier Milei.
Eduardo Fidanza, analista político de la consultora Poliarquía, graficó: "Vamos a la elección con un dato que es nuevo. El bicoalicionismo que obtuvo el 90% de los votos en 2019 y el 70% en 2021 va a una performance, probablemente, con menor capacidad de concentrar votos".
Al aire de Metro para El Economista TV, el consultor agregó que "estamos en una caída de las expectativas sin recuperación mirando a octubre. Esa falta de esperanza e indiferencia le abre el campo a varios. Incluso, paradójicamente, no le cierra todas las chances al gobierno. Después de todo lo que ocurrió, ¿qué es lo más importante, la desaprobación del 70% o la aprobación del 30%? Creo que tenemos que mirar más el 30% para entender cómo las expectativas están hacia abajo y las preferencias muy fragmentadas", por lo que Juntos por el Cambio debería ir abandonando el Plan Bomba, los comunicados catastróficos sin solución y presentarse ante la sociedad de una forma más constructiva para salir del pozo.
"El principal indicador es que en este gobierno, desde las entrañas del populismo de Cristina Kirchner, están Sergio Massa y su viceministro Gabriel Rubinstein, siendo un hombre ortodoxo y afín a los mercados que comparte la racionalidad económica. Entonces, me parece es que la diferencia es el cómo. La diferencia es si el cómo es drástico como un shock o si es más moderado.
No dude que si ganan Sergio Massa, Horacio Rodríguez Larreta o Patricia Bullrich, vamos a un plan de estabilización en una sociedad que ya está viviendo el ajuste. Cuando se dice 'No al ajuste', el ajuste ya está en curso. Lo que falta es otorgarle sentido político a un ajuste sino es un sufrimiento que ya no tiene sentido", agregó.
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