Durante los primeros cinco meses 2024, la planta de Tesla en Grünheide, cerca de Berlín, Alemania, su gigafábrica de en Europa, ha sufrido varios golpes.
GIGAFÁBRICA ALEMANIA
Tesla en guerra con ecoterroristas: Acampes, asaltos y sabotajes
Tesla anunció la paralización de su producción tras días intensos de violentas manifestaciones y ataques perpetrados por ecologistas extremos.
A principio de año debió paralizar su producción de sus autos eléctricos por falta de piezas a raíz de los constantes ataques hutíes en el Mar Rojo que han afectado considerablemente el comercio global. Sin embargo, ahora la amenaza es otra: un grupo de ecologistas radicales.
Este viernes (10/5) se vio obligado a anunciar una nueva paralización y trabajo remoto para sus empleados tras días intensos de violentas manifestaciones de ecologistas extremos.
Desde hace semanas que la planta está rodeada de un grupo ambientalista de extrema izquierda “Vulkangruppe” que se opone a su expansión y la supuesta tendencia “antidemocrática” de Elon Musk.
Solo una valla separa la fábrica de un bosque atestado de tiendas de activistas. Según medios internacionales, centenares de personas se manifestaron en contra de la prevista ampliación de la planta alemana del fabricante estadounidense de coches eléctricos Tesla, después de que ya el miércoles se levantara un nuevo campamento de protesta.
En marzo el mismo grupo saboteó sus líneas eléctricas que proveen de energía a la planta que la compañía tiene en Berlín, lo que provocó la suspensión temporal de la producción. Los agresores luego escribieron: “Con nuestro sabotaje, nos hemos fijado el objetivo de lograr el mayor apagón posible de la Gigafactory".
En redes incluso se difundió un video de legiones de manifestantes anti-Tesla que intentaba asaltar las instalaciones de la fábrica de vehículos eléctricos.
¿Por qué las protestas?
Vecinos y grupos, que rozan el eco terrorismo, denuncian el uso indiscriminado de agua para la producción de estos vehículos eléctricos y la ampliación de la planta que ha sido retrasada cuantiosas veces. Tesla quiere ganar 170 hectáreas al bosque circundante y ampliar la producción de sus coches eléctricos a un millón de automóviles anuales.
Según las propias palabras de lo activistas radicales, protestan “a favor del agua, los bosques y la justicia y por una revolución en el transporte más allá de Tesla”.
Según The Wired, el grupo expresa su postura en pancartas que cuelgan de los árboles: los vehículos eléctricos no son “protección medioambiental”; “el agua es un derecho humano”; “no existe anticolonialismo sin una Palestina libre”.
El medio que habló con un activista expresó que la protesta era también anticapitalista: “La fábrica de 300 hectáreas de Tesla es un subproducto del capitalismo verde, un complot de las compañías para parecer respetuosas con el planeta con el fin de convencer a los consumidores de que sigan comprando más productos. Esto ha sido totalmente ideado por esas empresas para tener más crecimiento, incluso en tiempos de crisis medioambiental".
En marzo, Musk escribió: “Estos son o los ecoterroristas más tontos de la Tierra o son títeres de aquellos que no tienen buenos objetivos ambientales. Detener la producción de vehículos eléctricos, en lugar de vehículos de combustibles fósiles, es una tontería extrema”.
Más contenido de Urgente24
Alerta Roja: Chocaron dos trenes y hay pasajeros heridos y derrame de combustible
Michigan: Una 'homeless' vivió un año dentro del cartel de una tienda
La FIFA se expone a demandas y el duro informe de Signorini
El pueblo en Argentina candidato entre los mejores del mundo
A 62 años del debut de Hulk, el gigante verde que rompió las viñetas de los cómics