POLÍTICA

SENADO

Vicentín y el debate de la propiedad privada suman tensión en la Ley de Alquileres

Con los tiempos reglamentos cumplidos, nada hace suponer que la Ley de Alquileres pueda sufrir otro tropiezo en el Senado. El Frente de Todos tiene mayoría para imponer sin necesidad de la oposición y se lo hizo saber a través de su jefe de bloque José Mayans. Cristina Fernández acusó el revés de la semana pasada y el retiro de la oposición del recinto y a partir de ahora apelará a la mayoría numérica para imponer la agenda a pesar del acuerdo que existía para tratar en sesiones remotas sólo proyectos vinculados a la pandemia del Coronavirus. A esa tensión se suma el caso Vicentín por el proyecto de expropiación enviado a la Cámara alta.

Este jueves (11/6) el Senado sancionará la nueva Ley de Alquileres. Nada hace suponer que ocurra lo contrario porque el Frente de Todos tiene mayoría y quorum propio para imponer cualquier tema, excepto que requiera los 2/3 de los presentes.

Sin embargo, la principal bancada opositora que es Juntos por el Cambio (JxC) no se opone a la norma y de hecho la apoyó el año pasado cuando tuvo la media sanción en Diputados. Pero no acompañaría su tratamiento en protesta por el temario armado por Cristina. Veamos:

El rechazo al tratamiento de la ley de alquileres la semana pasada fue una cuestión política: JxC quiso demostrarle a Cristina Fernández que están unidos frente al posible intento de imponer a Daniel Rafecas como nuevo Procurador para lo cual el FdT necesita los 2/3 de los presentes y protestar por el incumplimiento de los acuerdos parlamentarios para tratar sólo temas relacionados a la pandemia del coronavirus.

Ante esa actitud que tuvo que vivir Cristina con el retiro de la oposición de la sesión remota de la semana pasada, el titular del bloque oficialista José Mayans dejó en claro cuál será la réplica: “No sabemos el tiempo que va a durar esta emergencia. No tenemos que autolimitarnos en los temas. Antes la preocupación parecía que era que el parlamento no funcionaba y ahora el problema parece que son los temas que tenemos que tratar. Esto está decidido por la mayoría. Esto funciona con mayorías y minorías".

Y subrayó durante una reunión de comisión: "Ya que algunos decidieron que no van a dar los dos tercios, nosotros tenemos que trabajar con la herramienta que tenemos, que es la mayoría. A partir de acá, una vez que haya quórum, el cuerpo puede tratar los temas que se consideren convenientes, sin limitaciones".

Juntos por el Cambio ya había adelantado su voto a favor de la ley de alquileres cuando el cordobés Ernesto Martínez dijo antes de la frustrada sesión de la semana pasada: "Nuestro bloque en Diputados votó a favor, nosotros haríamos lo mismo”. Pero ahora se ausentaría de la votación después de votar a favor en el proyecto de Educación a Distancia, que sí está relacionado a la pandemia.

Sin embargo, desde el Frente de Todos el senador de Chubut Mario Pais, advirtió que el artículo 14 del proyecto no es claro en cuanto al período de indexación: “Como está redactada la norma, se establece que el valor del alquiler debe mantenerse por doce meses y al año se puede actualizar. Se puede interpretar que el primer año se mantendría el valor, pero luego se permitiría establecer una cláusula gatillo mensual”.

Eso abre la posibilidad de que se hagan modificaciones y la ley vuelva a Diputados, demorando los tiempos, sin embargo no habría acuerdo general para hacer retoques y al oficialismo le interesa dar una respuesta a los inquilinos en un tema que lleva años en tratamiento parlamentario.

Otro condimento que suma tensión a la sesión por alquileres es la inclusión en el temario de la iniciativa de Oscar Parrilli (Frente de Todos) para suspender por 180 días la inscripción de las sociedades por acciones simplificadas (SAS), creadas por el machismo y que el PRO siente como un revanchismo político de los K.

A eso se agrega todo el debate alrededor de la propiedad privada que despertó el caso Vicentín y los cacerolazos del miércoles a la noche que sumaron las iniciativas del kirchnerismo para tomar acciones de empresas ayudadas por la pandemia. En cuanto a la Ley de Alquileres, las agrupaciones de propietarios plantearon el tema de los contratos entre privados para rechazar la norma que cambia las reglas del juego en la actividad y las cámaras inmobiliarias se pliegan a esos reclamos advirtiendo sobre el impacto negativo en el mercado.

Recordamos los puntos principales de la Ley de Alquileres:

Punto por punto, cuáles son los cambios en el proyecto de la nueva Ley de Alquileres:

- Los contratos tendrán un plazo mínimo de tres años, en lugar de dos, como sucede actualmente.

- La actualización del precio de todos los contratos (independientemente de su valor) será anual, en lugar de semestral.

- El aumento del precio del alquiler se calculará sobre la base de una fórmula de indexación mixta que combina en partes iguales la evolución mensual de la inflación ( IPC) y de los salarios (RIPTE).

- El depósito de entrada que pagan los inquilinos al iniciar el contrato no podrá representar un monto mayor al valor del primer mes de alquiler.

- Los inquilinos tendrán más opciones a la hora de presentar al propietario en concepto de garantía: ya no sólo se admitirán inmuebles de terceros sino también recibos de sueldos, certificados de ingreso, seguros de caución o avales bancarios.

- Las expensas extraordinarias quedarán a cargo del propietario y no del inquilino. El inquilino sólo deberá pagar las ordinarias, que incluyen los gastos habituales del edificio.

- Los ocupantes de la vivienda podrán interrumpir el contrato y abandonarla en forma anticipada sin pagar indemnización, si cumplen con un mínimo de tres meses de aviso previo.

- Todos los contratos deberán estar inscriptos ante la Afip para evitar la evasión impositiva y posibles abusos por fuera de la formalidad legal. Así, obligaría a los propietarios a "blanquear" el ingreso que perciben por el alquiler, y se evitarán los conflictos por contratos fraudulentos o apócrifos.

Dejá tu comentario