¿Por qué se debe esto? En la era victoriana, para lograr este color tan solicitado en las clases altas, era necesario generar el pigmento a partir de arsénico y luego pintar la cara exterior del libro, teniendo por resultado un color que se desgrana al contacto humano y cuya ingestión accidental puede ser fatal para la persona que mantiene contacto con el libro, incluso en dosis bajas.
La descubridora de estas circunstancias fue la Dra. Melissa Tedone, catedrática de la Universidad de Delaware y jefa de laboratorio para la conservación de libros y materiales de biblioteca en el Museo, Jardín y Biblioteca de Winterthur. Ella se encontraba restaurando un libro antiguo cuando se percató de que este metal pesado podría hallarse en la pintura de la portada.
La Dra. Tedone corroboró que un sólo libro verde esmeralda puede matar entre 3 o 4 personas, si se llega a realizar una ingesta accidental. Uno se preguntará de qué forma podría suceder algo así, pero la respuesta es muy sencilla: Pasar las páginas ensalivando un dedo es suficiente para entrar en contacto con el arsénico de forma no letal, pero que generará un vertiginoso deterioro de la salud, y al repetirse continuamente puede ser fatal.
Según la OMS, la exposición prolongada al arsénico puede causar cáncer, lesiones cutáneas, problemas de desarrollo, enfermedades cardiovasculares, neurotoxicidad e incluso diabetes. En casos de intoxicación aguda, los síntomas inmediatos incluyen vómitos, dolor abdominal y diarrea.
Seguidamente, aparecen otros efectos, como entumecimiento u hormigueo en las manos y los pies o calambres musculares y, en casos extremos, la muerte.
Debido a esto, desde la Universidad de Delaware se está creando un protocolo para tratar con libros verde esmeralda, de la misma forma que se creó uno para el tratamiento de los objetos con plomo, y prevenir cualquier problemática en torno a los libros venenosos.
Que hacer si se tiene un libro verde esmeralda
Desde su página llamada The poison book project, recomiendan extender cuidados a los libros que no parezcan verdes a simple vista, porque con el tiempo, el verde esmeralda se destiñe convirtiéndose en marrón:
Otros de los cuidados para aislar esta clase de portadas mortales son las siguientes:
- Use guantes de nitrilo: Evite manipular la supuesta tela verde esmeralda con las manos desnudas. El arsénico inorgánico puede absorberse a través de la piel en pequeñas cantidades. Además, una cantidad significativa de arsénico puede pasar a las manos y ser ingerido o inhalado sin darse cuenta al tocarse la cara o al comer/beber. La manipulación de libros con las manos húmedas o sudorosas puede aumentar el riesgo de que el arsénico se desplace hacia la piel.
- Lavarse las manos: Incluso cuando use guantes, lávese bien las manos con agua y jabón después de manipular un paño para libros de color verde esmeralda.
- Libro aislado para almacenamiento: Si se sospecha que un libro está encuadernado en tela verde esmeralda, séllelo en una bolsa de polietileno con cierre de cremallera (bolsa tipo Ziploc) para limitar la manipulación y contener pigmento potencialmente letal.
- Limpie las superficies: Manipule los libros encuadernados en tela verde esmeralda sobre superficies duras (como una mesa) y evite las superficies tapizadas (como un sillón). Después de manipularlo, limpie las superficies duras que hayan estado en contacto con el libro con un paño desechable húmedo.
Cómo tratarse por una intoxicación con arsénico
En caso de haberse expuesto a una potencial intoxicación por arsénico, es menester asistir a un médico sin demora, que dependiendo de la gravedad ante la ingesta, realizará un reemplazo de líquidos por vía intravenosa, o un lavado gástrico, para evitar la absorción del metaloide por vía digestiva y así poder salvar la vida del paciente.
Más contenido en Urgente24:
El alimento en tu nevera que sirve para ahuyentar cucarachas
Juntos por la Argentina: La idea que entierra al FdT
Clarín permite la resurrección del Lawfare