Las personas comenzaron a informar en las redes sociales que los autotest dan un resultado negativo a pesar de tener síntomas de COVID-19, infección que luego se confirma por PCR.
OLA ÓMICRON
Autotest: Más evidencia advierte que el resultado no es 100% confiable
Tanto organismos de referencia como expertos internacionales, advierten que los test de antígenos (autotest) son menos sensibles frente a Ómicron.
Al respecto, una investigación publicada ayer (aún no revisada por pares) respalda dicha teoría e indica una disminución de la sensibilidad de los test de antígenos frente a Ómicron.
El estudio identificó a 30 personas, todas completamente vacunadas y con dosis de refuerzo, a las que se les realizaron pruebas de PCR y test de antígenos de rutina en cinco lugares de trabajo de Estados Unidos durante diciembre.
Según los resultados de la PCR, 29 de ellos estaban infectados con la variante Ómicron. Pero los dos días después de ese resultado positivo, cada individuo dio negativo en una prueba de antígeno (los autotest de Abbott o Quiddel).
Incluso la mayoría tuvo test de antígenos falsos negativos al tercer día.
Durante esa ventana de tiempo muchas de las personas tenían niveles altos del coronavirus y los investigadores pudieron documentar cuatro transmisiones confirmadas.
El resultado “fue alarmante”, dijo Anne Wyllie, coautora de la investigación.
La población incluida es pequeña, pero encaja con la evidencia emergente que sugiere que las personas deben reconsiderar cómo están usando e interpretando el resultado del autotest.
La semana pasada, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos informó que las pruebas de antígenos son menos sensibles a las infecciones por Ómicron, aunque no publicó más datos de respaldo.
¿En la nariz o en la garganta?
Otra investigación temprana de la Universidad de Ciudad del Cabo encontró que las pruebas de PCR que usaban hisopos bucales eran más sensibles para detectar infecciones por Ómicron que las que usaban hisopos nasales.
Otros estudios no revisados sugieren que Ómicron se mueve a través del cuerpo de manera diferente y podría ser mejor para replicarse en la garganta. Si es cierto, esta evidencia podría ayudar a explicar por qué los test de antígenos estándar no detectaron las primeras infecciones por Ómicron.
Es posible que la variante haya comenzado en otras partes del cuerpo, por lo que esas pruebas, que usaron un hisopo nasal, buscaban el coronavirus en el lugar equivocado.
¿Pero eso significa que debería hisoparse la boca además de la nariz? No necesariamente.
“Hay mucho que no sabemos sobre Ómicron”, adviertió Susan Butler-Wu, experta de la Facultad de Medicina de la Universidad del Sur de California, a Popular Science.
Una posibilidad es mejorar los métodos de muestreo, como por ejemplo en Reino Unido, dónde los test de antígenos administrados por el gobierno requieren un frotis de garganta seguido de un frotis nasal.
Sin embargo, hasta que los datos estén disponibles, la solución es no considerar el resultado negativo de un autotest como definitivo.
Las recomendaciones de los científicos consultados por Popular Science, son:
- En caso de tener síntomas, asuma que tiene COVID-19 hasta que pueda obtener una prueba de PCR.
- Si ha estado expuesto a alguien con coronavirus confirmado, póngase en cuarentena y hágase una PCR, en lugar de un autotest.
- Si se le dificulta debido a la escasez de pruebas, no ponga fin a las medidas de precaución basándose únicamente en un test de antígenos.
En un par de semanas, o días, los resultados más definitivos de las investigaciones ofrecerán indicaciones más certeras.
Fuente: Popular Science