Cuando uno toma un avión ya sea por negocios o por disfrute, se encarga que el viaje sea lo más placentero posible abordando la "primera clase" o "ejecutiva" donde los asientos se convierten en camas, los pasajeros son recibidos con una copa de champagne, y el menú es más variado. Pero esto no fue posible para Daniel David Becon, un británico que volaba desde Miami a Londres. Becon obligó a que el avión regresara a su punto de partida, justificando, según documentos judiciales, que intentó viajar en "primera clase" ya que su compañero de asiento se tiraba pedos.
El londinense, fue detenido cuando el avión, de la empresa American Airlines, aterrizó en Miami el 10 de enero pasado, aunque momentos más tarde quedó en libertad provisional. A pesar de esto, el hombre está acusado de interferencia con la tripulación de un vuelo y asalto (agresión), enfrentando así, una causa judicial en la ciudad estadounidense.
Según el documento en el que consta la acusación, los hechos se dieron arriba del avión con destino al aeropuerto Heathrow, Londres, Inglaterra, despegando desde el aeropuerto de Miami el 9 de enero cerca a la madrugada del 10. Desafortunadamente para el resto de los pasajeros que no tenían nada que ver, el avión regresó a su destino cuatro horas después de haber comenzado el viaje, debido a lo ocurrido a bordo.
Según un documento redactado por un policía, Becon fue descubierto en la clase ejecutiva tratando de pasar desapercibido, ya que su pasaje era en la clase turista. Un asistente de vuelo se percató de esto y le pidió que se sentara en el lugar que le correspondía, pero respondió que estaba dispuesto a pagar para quedarse en donde estaba. El asistente le dijo que eso ya no se podía hacer, y enojado por no conseguir lo que quería, comenzó a insultar, a escupir e incluso a darle una piña en la cara a quien solo realizaba su trabajo.
Debido al golpe, el asistente de vuelo calló al piso golpeándose la cabeza. Por su parte, Becon terminó sentándose en su respectivo asiento pero camino a hacerlo, insultó a la tripulación. Razón por la que el piloto decidió volver para que la Justicia pudiera actuar sobre el problemático londinense, quien admitió haber insultado y golpeado al asistente de vuelo.
Cuando se le preguntó a Becon por la situación vivida en la que fue protagonista, dijo que se había cambiado de lugar por su propia cuenta a clase ejecutiva porque el pasajero sentado a su lado, se tiraba pedos, además de haber dicho que por parte de la tripulación le hablaron de manera agresiva y descortés.
Según la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA), en 2022 (hasta el 15 de diciembre) se registraron 823 incidentes con pasajeros aéreos conflictivos en EE.UU.
No es la primera pelea por culpa de pedos de un tripulante
Un vuelo que iba desde Dubai a Amsterdam, debió aterrizar en Viena, Austria después de desatarse una pelea porque un pasajero no dejaba de tirarse pedos. Este hecho tuvo lugar el 11 de febrero de 2018 a bordo del vuelo HV6902 de la compañía neerlandesa Transavia Airlines, cuando dos hombres comenzaron a pelear por los reiterativos pedos de uno de ellos.
Después de haberse quejado con la tripulación, no tomaron cartas en el asunto, únicamente el piloto los acusó de comportamiento ruidoso y agresivo. A pesar del llamado de atención, la pelea continuó, por lo que realizaron el aterrizaje de emergencia en Viena donde expulsaron al hombre denunciante junto a otras dos mujeres que se quejaban, pero no al hombre de los pedos.
La empresa en cuestión aseguró que "Nuestra tripulación debe garantizar un vuelo seguro. Si los pasajeros plantean un riesgo, intervenimos de inmediato. Nuestros trabajadores están entrenados para ello. Conocen muy bien dónde están los límites. Por tanto, Transavia respalda por completo a la tripulación de cabina y a los pilotos".