“Hablar no cuesta nada” podría llamarse a la nueva generación de envíos de A24, TN, LN+ y C5N.
NO HAY PLATA!!!
A24, TN, C5N y LN+ convirtieron a las señales de noticias en pseudo canales de streaming
Las propuestas informativas de televisión en Argentina se rindieron al formato “low cost”. Para poder sobrevivir, recurren a panelistas e invitados.
Las audiencias caen y el contexto tampoco ayuda: los anunciantes emigran hacia internet y la actividad económica no arranca.
La televisión recurre al esquema de Luzu, Olga, Blender, Gelatina o Carajo que consiste en hacer largas notas (para una bajísima audiencia) con la esperancza que algún “minuto de oro” o frase disrruptiva pueda luego del programa viralizarse.
“Cortar y subir a las redes” es la consigna.
Una suerte de outlet comunicacional donde hay que buscar y buscar hasta que aparezca algo que valga la pena.
TN: programas más extensos, mesas más largas
Todo Noticias extendió hasta 90 minutos cada uno los programas de Jonatan Viale y Diego Sehinkman.
Para “llenarlos”, les metieron varios columnistas (Ricardo Canaletti, Liliana Franco, Guadalupe y Luciana Vázquez) y también suman como invitados a legisladores, ministros, empresarios o especialistas.
Una suerte de homenaje a “hablemos sin saber” (Sin Codificar) donde los “todólogos” pueden abarcar los temas más inverosímiles.
Prácticamente, la única excepción fue la brillante cobertura periodística de Dominique Metzger en Israel, mostrando los kibutz devastados por Hamas.
A24: grandes figuras, pocas ideas
La troupe de Juan Cruz Ávila irrumpió con toda la furia en el canal de Palermo Hollywood.
Luis Novaresio, Pablo Rossi, Eduardo Feinmann, Nacho Ortelli, Nicolás Wiñasky, Santiago Fioritti y tantos otros venían con la promesa de “reformular” el periodismo televisivo.
Pero, a poco de andar, se transformaron en esos pilotos que se presentan a los gerentes de noticias bajo el lema “El no ya lo tenemos”.
Laaaaargas mesas y exteeeeeeensos debates sobre los mismos tapes sacados de las redes sociales.
Solamente salva la ropa a las 23 horas Fabian Doman quien le da un plus de profesionalismo a un formato agotado.
LN+: no hace falta crear, alcanza con “editar” lo ajeno
Paulino Rodríguez, Luis Majul, Esteban Trebucq y Cristina Pérez repiten la fórmula del “tres tiros al negro”. Solamente falta un locutor que anuncie al aire “otro que tire y pegue”.
Los “elencos” se conforman con tipos que aportan editoriales ultra oficialistas aunque se dediquen al cine (Diego Recalde).
Un canto a Discepolín: “en el mismo lodo, todos manoseaos”. El Cambalache de hace un siglo pero en formato 3.0.
C5N: lo más caro del canal deben ser sus cuentas de remises
Un productor de televisión de hace 15, 20 ó 25 años debía ser un todo terreno con conocimientos acabados sobre los terrenos donde mandaba a sus cronistas para móviles en vivo o investigaciones.
En 2025, todo es más fácil para ellos. Alcanza con un celular que tenga whatsapp y utilizar una aplicación para conectar con la remisería que contrata el canal.
Se coordina el horario y la dirección donde pasará el Uber o el Cabify a buscar a los invitados y listo.
C5N perdió la chance de hacer valer su rol opositor:
Si tuvieron un mòvil trabajando en Estados Unidos... ¿Por qué no viajaron a Dallas para ver la casa de Hayden Davis y el resto de los integrantes de la banda de las meme coins o a Wall Street para averiguar sobre el mismo escándalo?