El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció hoy (1/2) la conclusión de la séptima revisión del acuerdo con Argentina. Esta decisión posibilita un desembolso inmediato de aproximadamente US$ 4.700 millones (o DEG 3.500 millones) con el objetivo de satisfacer las necesidades de balanza de pagos y respaldar las medidas en curso.
MÁS IMPUESTOS
Javier Milei y FMI: Apoyo a cambio de principios
Se terminó la séptima revisión del acuerdo entre Argentina y el FMI y el Gobierno de Javier Milei tuvo que ir en contra de sus principios "por el corto plazo".
Desde que se completaron las últimas revisiones -bajo la administración anterior-, los desequilibrios y distorsiones de Argentina se han agudizado peligrosamente, mientras que el programa se ha desviado significativamente, reflejando políticas altamente expansivas e inconsistentes de la administración anterior. El déficit fiscal aumentó aún más, las reservas internacionales se agotaron y se intensificó la dependencia de medidas intervencionistas, lo que provocó una inflación de tres dígitos, un mayor deterioro del balance del banco central y un fuerte aumento de la deuda comercial de los importadores.
Las palabras del FMI cambian cuando se trata de Javier Milei:
"La nueva administración ha comenzado a tomar medidas audaces para restaurar la estabilidad macroeconómica y abordar muchos de los impedimentos de larga data al crecimiento y la inversión. Estas acciones iniciales están empezando a dar frutos, aunque el camino hacia la estabilidad será desafiante. Se están realizando esfuerzos para generar apoyo social y político para el plan de estabilización, con un Congreso dividido y una situación social frágil que presenta importantes desafíos para su implementación."
Y dentro de esas "medidas audaces" está la suba de una serie de impuestos -algo que iría contra los principios liberales del presidente Javier Milei-
Las palabras de la presidenta del FMI
Al concluir las deliberaciones, la Directora Gerente y Presidenta del Directorio, Kristalina Georgieva, emitió la siguiente declaración:
“Tras la finalización de las últimas revisiones, los grandes desequilibrios y distorsiones de Argentina se agudizaron y el programa se desvió significativamente, lo que refleja las políticas inconsistentes del gobierno anterior. En medio de esta difícil herencia (inflación elevada y creciente, reservas agotadas y altos niveles de pobreza), la nueva administración está tomando medidas audaces para restaurar la estabilidad macroeconómica y comenzar a resolver los impedimentos de larga data al crecimiento. Estas medidas iniciales evitaron una crisis de balanza de pagos, aunque el camino hacia la estabilización será desafiante.
“El ambicioso plan de estabilización acordado se centra en el establecimiento de un ancla fiscal fuerte que ponga fin a todo financiamiento del gobierno por parte del banco central. El logro de un superávit fiscal primario de alrededor del 2 por ciento del PIB este año se sustentará en una combinación de impuestos temporales relacionados con las importaciones y el fortalecimiento de los impuestos a los combustibles, junto con esfuerzos para racionalizar los subsidios a la energía y el transporte, los costos administrativos y las políticas de menor prioridad de gastos discrecionales. También se está reforzando la asistencia social para apoyar a los más vulnerables y salvaguardar el valor real de las pensiones. Con el tiempo, se prevén medidas fiscales de mayor calidad para lograr mejoras estructurales en los ingresos y el gasto y asegurar la consolidación y una distribución más equitativa de la carga.
“Tras el realineamiento del tipo de cambio, la política cambiaria debería continuar asegurando los objetivos de acumulación de reservas. Se están tomando medidas importantes para resolver el desproporcionado saldo de deuda comercial y crear un sistema de importaciones más transparente y basado en reglas. Además, las autoridades se han comprometido a eliminar en el corto plazo las restantes restricciones cambiarias distorsivas y las prácticas monetarias múltiples, y a desarrollar planes para desmantelar gradualmente las medidas de gestión de los flujos de capital, según lo permitan las condiciones.
“La orientación de la política monetaria debería evolucionar para respaldar la demanda de dinero y la desinflación, mientras que el marco y las operaciones de la política monetaria se ajustarán para fortalecer su papel de ancla. Seguir fortaleciendo el balance del banco central sigue siendo una prioridad.
“Se están realizando esfuerzos para corregir grandes y extensos desajustes de precios relativos, reformar el sector energético y crear una economía más simple, basada en reglas y orientada al mercado. Se están abordando las barreras al crecimiento, el empleo formal y el comercio, mientras se prevé un marco regulatorio más predecible para impulsar la inversión y liberar el potencial energético y minero de Argentina.
“Será esencial una formulación de políticas ágil y planificación de contingencias, y es posible que se necesiten medidas adicionales para asegurar los objetivos del programa y restaurar la estabilidad de manera duradera. Sigue siendo imprescindible una comunicación clara y una asistencia social bien orientada, así como esfuerzos continuos para generar apoyo social y político para el programa”.
Metas
Más contenido en Urgente24
El síntoma alarmante de que tu páncreas no está sano
Milei rechaza más cambios ante presión por el impuesto PAIS
50.000 millones de UE a Ucrania, pero sin USA sigue complicada
El 'poroteo' de la maniobra de Martínez y 'Plan Larreta' a gobernadores