Biden dijo que era "cuestionable" que Rusia controlara la ciudad portuaria de Mariúpol. "No hay evidencia aún de que Mariúpol haya caído por completo", afirmó Biden.
El presidente ruso había afirmado que Mariúpol había sido "liberada" y ordenó cancelar el asalto a Azovstal, una fortaleza dentro de un establecimiento siderúrgico en la zona industrial de Mariupol donde aún hay resistencia por parte de soldados ucranianos. También permanecen alrededor de 1000 civiles atrapados en la planta de acero, dijo ayer el presidente ucraniano Volodímir Zelenski.
Putin ordenó en cambio un bloqueo sobre el área para que no pueda pasar ni una mosca.
"Considero inapropiado el asalto propuesto a la zona industrial y ordeno que se cancele", señaló Putin durante un encuentro con su ministro de Defensa, Sergey Shoigu, televisado. "En este caso hay que pensar -siempre hay que pensar-, pero en este caso, con mayor razón, en preservar la vida y la salud de nuestros soldados y oficiales. No hay necesidad de penetrar en estas cavernas y en el subsuelo a través de estas instalaciones industriales. Bloqueen esta zona industrial para que no salga ni una mosca".
Biden dijo también que la batalla por Kiev fue una "victoria histórica" para los ucranianos, una "victoria por la libertad ganada por el pueblo ucraniano con una asistencia sin precedentes" por parte de USA y sus aliados.
Al tiempo que dijo que la guerra se encontraba en un punto crítico, Biden anunció un próximo envío de US$ 800 millones en asistencia militar a Ucrania así como una prohibición de que los barcos rusos atraquen en puertos de Estados Unidos y accedan a las costas del país.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, reconoció que Rusia controla la mayor parte de Mariúpol pero dijo que aún hay tropas ucranianas estacionadas allí. Medios ucranianos señalan lo mismo.
Kiev pide un corredor humanitario para permitir la evacuación de civiles y de combatientes heridos de la planta de Azovstal. Rusia afirmó que "nadie" utilizó el corredor humanitario abierto el miércoles para abandonar la asediada ciudad de Mariúpol, ni los soldados pertrechados en la planta metalúrgica de Azovstal ni los civiles que se encuentran refugiados con ellos en la fábrica. Ucrania acusa a Rusia por el fracaso de la evacuación, asegurando que las tropas de Moscú no respetaron el cese al fuego.
Hay diferentes lecturas de este gesto por parte de Putin de frenar el asalto a Azovstal y optar en cambio por el bloqueo: algunos argumentan que es señal de un triunfo contundente y ya irreversible de Rusia en Mariúpol. Otros no lo ven así.
Por otro lado, el goberandor de Luhansk, Serhiy Haidai, dijo que Rusia controla el 80% de la región, una de las 2 que componen el Donbás.