TRAS EL MUNDIAL 2023
El fútbol femenino aún tiene mucho por mejorar
Hay que festejar el éxito de la Copa del Mundo Femenina 2023, pero ocupándose de las pésimas condiciones de las protagonistas.
La continua expansión del fútbol femenino potencia las falencias de la disciplina y aumenta – cada vez más – la diferencia entre las jugadoras mejores y peores posicionadas. El primer planteamiento es ante las federaciones que regulan el deporte. Es que, en muchos casos, no buscan el beneficio de las futbolistas, sino el de los propios dirigentes.
Lo que todavía no entienden es que ellas son protagonistas y fundamentales para que se lleve a cabo. Si se interesasen en su bienestar, los resultados serían mejores y, en consecuencia, la federación se beneficiaría también. Pero parece que no se dan cuenta.
Por otra parte, en base a una encuesta a 260 mundialistas, se plantearon cuatro importantes ejes para mejorar de cara al futuro. Entre ellos se incluye la economía y salud de las jugadoras.
En deuda desde agosto
Según comentó “The Athletic”, alrededor del 20% de jugadoras mundialistas no recibieron los pagos correspondientes por su participación en la competencia internacional. Seis de las 32 federaciones aún no han repartido el dinero enviado por la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA). Por esta problemática, ya intervino la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro), que trabaja en conjunto con el máximo ente regulador.
Sarah Gregorius, directora de políticas y relaciones estratégicas para el fútbol femenino del sindicato, se pronunció sobre el tema. En primer lugar, explicó que la intención es que los pagos se realicen en su totalidad. Por otra parte, estimó que los mismos podrían realizarse “hacia finales de este año”.
Mientras que las jugadoras que gozaron de sus derechos aseguran que la suma de dinero les cambió la vida, otras mundialistas esperan recibir sus correspondientes premios. Las jamaicanas son unas de ellas que, al igual que en la previa a la Copa del Mundo 2023, pelea con su federación por los pagos pendientes.
Las preocupaciones en el fútbol femenino
Al término de Australia-Nueva Zelanda 2023, FIFPro realizó una encuesta a 260 jugadoras internacionales de 26 países distintos. El principal objetivo fue “escuchar sus impresiones sobre la experiencia en la Copa Mundial Femenina y sobre una gama de cuestiones que afrontan las jugadoras, incluyendo compensación, condiciones y carga de trabajo”.
Hay cuatro claves sobre los resultados de la encuesta en cuestión.
Diferencias abismales de ingresos
Mientras la FIFA se beneficia económicamente con su apuesta por el fútbol femenino, las protagonistas de la disciplina viven realidades totalmente distintas. Las mejores posicionadas – que componen el 15% de las encuestadas – recibieron ingresos superiores a 150.000 dólares durante el año pasado.
Por otro lado, el 49% ganó menos de 50.000 dólares – sumando los ingresos por su club y su selección – durante el mismo periodo. Incluso, el 6% de estas últimas consiguió menos de 10.000 dólares y el 8% menos de 5.000 dólares. Una inverosímil desigualdad entre unas y otras.
Necesidad de mejoras en salud
La encuesta de FIFPro también reveló que una de cada diez mundialistas no realizó un examen físico previo a la competencia. A su vez, el 22% tampoco fue sometido a un electrocardiograma (ECG).
Es cierto que estas cifras fueron mejoradas en comparación a la clasificación para la competencia internacional. En aquel entonces, el 54% de las futbolistas no realizó un examen físico y el 70% no fue sometido a un ECG. Aún con este progreso, la problemática es igual de preocupante.
“Toda cifra inferior al 100 por ciento, en lo que respecta al ECG o al examen médico previo al torneo, no es aceptable. Las futbolistas deben completar estos importantes chequeos antes de competir. El reglamento debe aplicarse y respetarse en su totalidad”.
Dra. Alex Culvin, directora de Estrategia e Investigación para el fútbol femenino de FIFPro
Es que más allá del incumplimiento con el reglamento de la FIFA – que contempla como obligatorias las evaluaciones médicas –, el problema recae en la salud de las jugadoras. Una vez más, el fútbol femenino mantiene a sus protagonistas en pésimas condiciones.
Descansos insuficientes
El calendario de las competiciones a nivel clubes no contempla las del internacional. Por este motivo, las futbolistas son sometidas a altas exigencias en cortos periodos de tiempo.
Por ejemplo, la final de la Copa del Mundo 2023 entre España e Inglaterra fue el 20 de agosto de 2023. Un poco más de dos semanas más tarde, el 6 de septiembre, comenzó la etapa clasificatoria de la Women’s Champions League.
Es decir, dos selecciones europeas se medían en la máxima competencia internacional a semanas del inicio de un torneo organizado por la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (UEFA). No existe justificación alguna.
“(La falta de descanso) representa un riesgo desde el punto de vista físico y fisiológico, así como también desde la perspectiva mental“.
Dr. Vincent Gouttebarge, médico jefe de FIFPro
En cuanto a los números, el 75% de las encuestadas tuvo entre 0 y 13 días de descanso en la previa a la Copa Mundial. Por otro lado, el 86% de las jugadoras disfrutó de esa misma cantidad de días libres una vez terminado el torneo.
Con este panorama, es importante destacar que, desde FIFPro, “recomiendan un descanso fuera de temporada de cuatro semanas, con un periodo de reentrenamiento de seis semanas”. Un ideal muy lejano a la realidad.
Pedido por más apoyo
La FIFPro reveló que el 83% de las encuestadas son futbolistas profesionales, mientras que el 21% tiene un segundo empleo por fuera del deporte.
Por otra parte, los pedidos de las jugadoras para que mejore el fútbol femenino son bastantes básicos. Algunos de ellos son el trabajo en la salud mental, la nutrición y la preparación del personal técnico.
Es que hay que entender que las exigencias no son inadecuadas. De hecho, son cuestiones fundamentales que deberían cubrirse con obligatoriedad en todos los niveles y ámbitos del deporte.
Una dura realidad entre tantos festejos
No hay que dejar de lado la increíble competencia que fue la Copa del Mundo 2023. Es que los resultados fueron realmente buenos.
Desde lo deportivo, las futbolistas dieron un increíble espectáculo. Podríamos nombrar las revelaciones que hicieron historia en la competencia, como la Selección de Colombia o la de Marruecos. O, claro, podríamos hacer hincapié directamente en las excelentes actuaciones de España, que fue merecida campeona del mundo.
Por otra parte, desde lo económico, la Copa Mundial también dio sus frutos. Tras una fuerte inversión de la FIFA, la competencia generó más de 570 millones de dólares en ingresos, lo que significó “el segundo ingreso más alto de cualquier deporte “.
“La Copa Mundial Femenina de la FIFA más importante y de mayor calidad de la historia“
Gianni Infantino
Con este panorama, el fútbol femenino parece seguir creciendo, con una base fuerte. Pero esto último no es así. Las problemáticas de la disciplina siguen siendo las necesidades fundamentales de las futbolistas que existieron siempre. Entonces, hay que inflarse el pecho con su crecimiento, pero cuidando a las protagonistas, que son por las que nos emocionamos en el Mundial de este año.