Los explicaba Financial Times, Jensen Huang, el CEO de Nvidia, está celebrando múltiples victorias. La empresa tecnológica que cofundó y lidera ahora, ocupa el sexto puesto entre las compañías más valiosas del mundo, y sus chips y software impulsan la revolución de la inteligencia artificial (IA). En este ejercicio financiero, los ingresos de Nvidia podrían superar a los de toda la industria de los videojuegos en Estados Unidos combinada.
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Nvidia y la transformación que podría llevarla a potencia
Nvidia ocupa el sexto puesto entre las compañías más valiosas del mundo, y sus chips y software impulsan la revolución de la inteligencia artificial (IA).
Este logro parece ser simplemente un dato secundario para una empresa cuyas supercomputadoras de IA entrenan aplicaciones como ChatGPT de OpenAI. Sin embargo, sus inicios estuvieron en el suministro de hardware para videojuegos, fabricando chips gráficos para PCs y Xbox (de Microsoft). Aunque cambiaron su enfoque hace una década, los videojuegos continuaron siendo su principal fuente de ingresos hasta el año pasado.
La transformación de Nvidia es uno de los cambios más notables, coincidiendo con el hito histórico de Nintendo al pasar de los naipes a las consolas, y el de Toyota de los telares a los automóviles.
Sin embargo, este cambio no es tan peculiar como parece: Los videojuegos y la inteligencia artificial comparten varios aspectos, y los juegos tienen una larga historia de liderar la tecnología de las PCs.
Nintendo siguió con juegos como Super Mario Bros y su dispositivo portátil Game Boy. Cuando Huang cofundó Nvidia en 1993, un año antes de que Sony lanzara su primera PlayStation, los videojuegos representaban la forma más espectacular de computación gráfica. Era el mercado natural para las unidades de procesamiento gráfico (GPU) de Nvidia.
Existen dos tipos de giros: uno natural y otro más bien un giro del destino. Netflix comenzó con el alquiler de DVD, por lo que pasar al streaming fue una evolución intuitiva. Los fundadores de Nokia construyeron una fábrica de papel en 1865 y no tenían idea de que eventualmente fabricarían equipos de telecomunicaciones. El cambio de Nvidia de las GPU de juegos a las supercomputadoras con inteligencia artificial se encuentra en algún punto intermedio.
Huang percibió el potencial de la IA en 2012 cuando un grupo, que incluía a Ilya Sutskever, actual científico jefe de OpenAI, utilizó la tecnología de Nvidia para entrenar una red neuronal llamada AlexNet para reconocer imágenes. Cuatro años después, Nvidia entregó su primera supercomputadora de IA a OpenAI, cuyas últimas versiones constan de 35.000 piezas, tienen un precio de US$ 250.000 o más y son la base de su reciente crecimiento.
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