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Israel, un desafío para Alberto, bajo la sombra de la desconfianza en Cristina

36 líderes mundiales estarán en Jerusalem, entre el 22 y el 23 de enero por los 75 años de la liberación de Auschwitz. Inquieto por la nueva postura de Alberto Fernández hacia Hezbollah, Israel invitó también al presidente argentino. Antes, le había pedido que no modifique la decisión del gobierno de Mauricio Macri de considerar a Hezbollah como grupo terrorista. Pero luego, llegaron las declaraciones de Frederic, que poco después afirmó que fueron "sacadas de contexto", y la repentina cancelación de la visita de su ministro de Ciencia y Tecnología. No hay definiciones sobre la decisión que tomará Alberto, pero la invitación está tan firme como la desconfianza, sobre todo, respecto de Cristina Kirchner.


El gobierno de Alberto Fernández e Israel se miran de reojo. Es que si bien el vínculo diplomático se mantiene por los canales de la cordialidad, las sospechas sobre una eventual marcha atrás del decreto firmado por Mauricio Macri para la creación del registro de organizaciones terroristas que incluyó a Hezbollah, encendió las alarmas de Tel Aviv. 

Sobre todo, después de la reunión entre Fernández y Galit Ronen, la embajadora de ese país en la Argentina, tras la cual Alberto salió al cruce de los trascendidos, negando tajante que tuviera como prioridad la derogación de ese decreto. 

Pero Sabina Frederic, designada ministra de Seguridad, resaltó en estos días que ese decreto había sido "una exigencia de Estados Unidos". "El terrorismo es un problema de los países de la OTAN, no nuestro", abundó.

Ayer, la sucesora de Patricia Bullrich, sostuvo que sus declaraciones fueron sacadas de contexto. "La frase sobre Hezbollah fue sacada de contexto. El principio es el de de protección de la ciudadanía argentina y la comunidad judía es parte integral de la sociedad y hay que protegerla tanto como al resto", reflexionó Frederic ayer en el primer piso de la Casa Rosada.

Pero la subsecretaría de Formación del Ministerio de Defensa bajo la gestión de Nilda Garré, se refirió a la posibilidad de quitar a la organización palestina del listado de grupos terroristas. "Es una decisión que tendrán que tomar el Presidente y Cancillería y evaluar qué medidas nos brindan más seguridad a todos, incluyendo a la comunidad judía, que sabemos que es muy grande en la Argentina", destacó.

Desde el gobierno de Israel le pidieron a Alberto Fernández que no lo derogue. Lo hizo más precisamente, el director General Adjunto para América Latina y el Caribe de la Cancillería israelí, Modi Ephraim, en la recepción con la que ese país se despidió de Mariano Caucino, embajador político de la gestión saliente.

En el entorno del flamante Presidente negaron que hubiera una decisión tomada al respecto. Sin embargo, a último momento, Israel canceló el envío de una misión política o diplomática a la asunción de Alberto.  

Según publicaba 'Clarín' hace unos días, de "altas fuentes diplomáticas", el primer ministro "Benjamín Netanyahu le mandó un saludo que nadie ha querido hacer público. Y si bien algunas formas se han mantenido al momento, en Tel Aviv y Jerusalem impera una inmensa desconfianza por la presencia de Cristina Kirchner en el próximo eje de poder".

El matutino recuerda que el gobierno de Israel no le perdona a la vicepresidenta el Memorándum de Entendimiento​ sobre la causa de la voladura de la Amia con Irán, el enemigo de Israel. En tanto, Alberto F. ya se había ido del gobierno 5 años antes de ese pacto de 2013.

El temor es que el gobierno de Fernández-Fernández elimine acuerdos firmados y/o de palabra con Israel. Políticas que los involucran y que fueron selladas bajo la administración de Macri, y que son contrarias a la visión de Cristina.

Otra cuestión central, sobre la que Fernández no ha manifestado cómo actuará, es la posición argentina en una votación periódica que se hace en la UNESCO, que promueven los palestinos para condenar la actuación israelí. La Argentina se abstuvo con Macri, y el kirchnerismo había votado a favor de la posición palestina.

El tema más sensible para los israelíes son los contratos para el uso de tecnología israelí que adquirieron los ministerios de Seguridad y de Defensa. Tel Aviv observará detenidamente quiénes serán los aliados argentinos a partir del 10 de diciembre. Como antecedente, hay que recordar que Israel vetó la venta de aviones Pampa de Fadea a Bolivia porque tienen tecnología israelí.

La embajadora enviada por Netanyahu a la Argentina, Galit Ronen, ya se reunió con el presidente electo. La diplomática le entregó una carta de felicitación por el triunfo electoral y una invitación a Fernández para que viaje a Jerusalem el 23 de enero, para participar del foro internacional de líderes que recordarán el Holocausto cuando se cumplan 75 años de la Liberación de Auschwitz.

Ese es su primer desafío de política exterior, y a la vez una de las mayores incógnitas. 

Ayer Alberto F. recibió en la Casa de Gobierno el saludo de Ronen, durante un acto junto a los representantes extranjeros que llegaron a presenciar la asunción. Se trató entonces del segundo encuentro que compartieron.

Pero originalmente, Israel había anunciado que enviaría a su ministro de Ciencia y Tecnología, Ofir Akunis, a la asunción. Finalmente canceló su presencia debido a que "en la actualidad el Estado de Israel atraviesa una instancia política compleja, producto de un proceso electoral inconcluso", según afirmó la embajada.

Israel se encuentra atravesando un momento de incertidumbre política, luego de que tanto el primer ministro Benjamín Netanyahu, como el líder de la oposición, Benny Gantz, no lograran formar gobierno. El país se encamina a una tercera elección nacional en menos de un año.

"Lamentablemente el ministro Akunis no podrá llegar a Buenos Aires para asistir a la asunción presidencial del Dr. Alberto Fernández. En la actualidad el Estado de Israel atraviesa una instancia política compleja producto de un proceso electoral inconcluso. Por tal razón pese a haberse realizado los pedidos de excepción pertinentes basados en los excelentes vínculos existentes con la República Argentina aunado al deseo del Sr. Ministro de asistir a un evento de tamaña relevancia, la visita oficial no podrá concretarse", afirma el comunicado.

"En esta coyuntura miembros del gabinete nacional se encuentran en Israel por ser estos momentos claves ante la posibilidad de establecer un nuevo llamado a elecciones", concluyó la embajada.

De todas maneras, participaron de la asunción tanto Ronen, como importantes representantes de las organizaciones de la comunidad judía: el presidente de la DAIA, Jorge Knoblovits, y el vicepresidente de la AMIA Leonardo Chullmirla, dado que el titular de la mutual judía, Ariel Eichbaum se encuentra en Estados Unidos participando en la reunión anual del del American Jewish Committee (AJC).

También, el titular del Congreso Judío Latinoamericano (CJL), Adrián Werthein, y su director Ejecutivo, Claudio Epelman, como así representantes del Centro Simon Wiesenthal, el vicepresidente de la Organización Sionista Argentina (OSA), Demian Stratievsky, y los rabinos Daniel Goldman y Tzvi Grunblatt, director de Jabad Lubavitch.

La invitación a Fernández para que viaje a Jerusalem el 23 de enero, para participar del foro internacional de líderes que recordarán la Shoá cuando se cumplan 75 años de la Liberación de Auschwitz, fue entregada.

Al menos 36 líderes mundiales, entre ellos tres monarcas y el presidente ruso Vladimir Putin, estarán en la capital de Israel los días 22 y 23 de enero.

"Creo que aprovecharé esta invitación, como dije recientemente en una reunión con el primer ministro Benjamín Netanyahu. Espero que durante esta visita, los líderes israelíes y yo podamos develar un memorial a las víctimas del sitio de Leningrado, construido por iniciativa de veteranos israelíes", declaró Putin.

Afirmó que Rusia está prestando "gran atención" al desarrollo de relaciones mutuamente beneficiosas con Israel. "Puedo decir con orgullo que nunca antes ha habido un nivel tan positivo de las relaciones entre Rusia e Israel, excepto durante los primeros años tras su establecimiento, por supuesto. Estas se destacan por su importante diálogo político", explicó.

El mandatario también declaró que considera a Israel "un país de habla rusa". "Hay lazos familiares y de amistad entre los ciudadanos rusos e israelíes. Esta es una verdadera red familiar, hablo sin exageración. Casi dos millones de ciudadanos rusoparlantes viven en Israel",  remarcó.
 
Otras asistencias confirmadas incluyen a los presidentes Emmanuel Macron de Francia, Sergio Mattarella de Italia, y Alexander Van der Bellen de Austria.

Aunque se sabe que habrá delegaciones de Estados Unidos y Polonia, dijo Yuval Rotem, director general del Ministerio de Asuntos Exteriores, los líderes de esas delegaciones aún no han sido revelados.
 

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