En Venezuela, el pasado viernes 20 de agosto Nicolás Maduro anunció mediante Twitter cambios en su gabinete, tan solo unos días después de haberse empezado las negociaciones de paz con la oposición en México, con Noruega como mediador.
CAMBIO MINISTERIAL
Venezuela: Los Rodríguez, trinchera de Maduro ante Diosdado
Tras un cambio de gabinete en Venezuela, asume un canciller con fuertes vínculos con los hermanos Rodríguez, posibles sucesores de Maduro.
Maduro removió a Jorge Arreaza quien ocupaba el cargo de canciller y nombró en su lugar a Félix Plasencia.
Arreaza fue el encargado de afianzar los vínculos del régimen con otras dictaduras y países autoritarios como Cuba, Nicaragua, Rusia, China e Irán, y aplicó una política diplomática de extrema tensión con todas aquellas naciones y organismos internacionales críticos de la dictadura, como USA, la Unión Europea (UE), Colombia y la Organización de Estados Americanos (OEA), entre otros.
Félix Plasencia, quien reemplazará a Arreaza en el cargo, es un diplomático de carrera pero sus conexiones con los hermanos Rodríguez fueron las que le permitieron ascender en el poder. El nuevo canciller mantiene una amistad que data de hace varios años con la actual vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez. Por otro lado, fue de la mano de Jorge Rodríguez cuando apareció por primera vez en el “gobierno de la revolución”, como alcalde de Caracas entre 2012 y 2017.
Plasencia tiene una característica que lo destaca: tiene doble pasaporte y está fuera de la lista negra de altos cargos sancionada por Washington y Bruselas. El canciller tiene la nacionalidad española por ser hijo de canarios, y eso lo convierte en alguien que abre puertas a futuras negociaciones con potencias extranjeras.
¿Por qué los hermanos Rodríguez se encuentran en el núcleo del poder?
Delcy Eloina Rodríguez Gómez es una abogada y dirigente política que durante sus primeros años ocupó cargos menores dentro de la administración de Hugo Chávez. Poco a poco, fue ganándose la confianza de Nicolás Maduro y en 2014 fue nombrada canciller, convirtiéndose en una pieza clave para las relaciones de la dictadura con otros regímenes autoritarios. En 2018, fue nombrada vicepresidenta de Venezuela, cargo que ocupa actualmente y al mismo tiempo hace las veces de ministra de Economía y Finanzas.
Jorge Rodríguez Gómez, hermano mayor de Delcy, es un político y médico psiquiatra que apareció en el poder en 2004 como rector y presidente del Consejo Nacional Electoral, cargo que se supone, según las leyes, debería ocupar una persona que no pertenezca a ninguna organización política. Sin embargo, Rodríguez venía de presidir movimientos estudiantiles de extrema izquierda.
El 5 de enero de 2021, Jorge fue designado como el presidente de la Asamblea Nacional, que es el órgano unicameral que ejerce el poder legislativo en Venezuela. Esta institución carece de legitimidad por la irregularidad de las elecciones y el desconocimiento de casi 60 democracias del mundo que siguen apoyando y reconociendo a Juan Guaidó como máximo representante del Parlamento y presidente legítimo de Venezuela.
Estos dos hermanos no solo mantienen una relación de extrema confianza con Maduro, sino que también son los más próximos en la línea sucesoria, en caso de que el actual mandatario tenga que dimitir. ¿En qué circunstancias se daría esta situación?
El artículo 233 de la Constitución de Venezuela dice que en caso de que se produzca la falta absoluta del presidente, por “muerte, renuncia, destitución, incapacidad física o mental”, serán el vicepresidente (Delcy) o el presidente de la Asamblea (Jorge) quienes se harán cargo del poder ejecutivo, dependiendo de la situación.
Además, en el artículo 239 de dicha Carta Magna, donde se expresan las atribuciones de la vicepresidencia, se destaca que debe: “Suplir las faltas temporales del Presidente o Presidenta de la República” y “coordinar las relaciones del Ejecutivo con la Asamblea Nacional”, lo que se traduce en que Delcy debe servir como intermediaria entre Maduro y su hermano Jorge Rodríguez.
Negociaciones de Paz: ¿Hay acuerdo?
En paralelo con el recambio ministerial, se dieron las primeras conversaciones de negociación entre el régimen venezolano y la oposición del mismo en México. Este proceso, es impulsado por Noruega bajo el liderazgo de Dag Nylander, director del Centro noruego para la resolución de conflictos, un diplomático que ya fue una figura clave durante los diálogos de La Habana entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y las FARC, que desembocaron en la desmovilización de la guerrilla más antigua de América.
El 18 de agosto se firmó y aprobó por la Asamblea Nacional de Venezuela, de forma unánime el memorando de entendimiento, firmada por el secretario de Estado de USA, Antony J. Blinken, el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, y el ministro de Relaciones Exteriores canadiense Marc Garneau, quienes exigieron el restablecimiento de las instituciones democráticas del país.
Este documento fija las siguientes prioridades:
- “Derechos políticos para todos;
- garantías electorales para todos y cronograma electoral para elecciones observables;
- levantamiento de sanciones y restauración de derecho a activos;
- respeto al Estado Constitucional de Derecho;
- convivencia política y social,
- renuncia a la violencia y reparación de las víctimas de la violencia;
- protección de la economía nacional y medidas de protección social al pueblo venezolano;
- garantías de implementación, seguimiento y verificación de lo acordado”.
La negociación se llevó a cabo en México. El país anfitrión viene alentando una solución pacífica a la crisis política que ha producido una migración de más de cinco millones de personas, según Naciones Unidas. La oposición exige elecciones “libres, transparentes y justas”, mientras que Maduro pretende que se levanten las sanciones internacionales. Ambas partes acordaron seguir con las negociaciones del 3 al 6 de septiembre.
Alberto Fernández se expresó sobre el asunto mediante Twitter: "Celebro el Acuerdo de Entendimiento entre venezolanos. El diálogo y el respeto en la diversidad es el camino que tiene ese pueblo para construir su futuro. Gracias a México y gracias a Noruega por favorecer este Acuerdo."