ANÁLISIS Massa > Alberto Fernández > Máximo Kirchner

POSTELECTORAL

Preparando los superministerios para Massa y Kirchner

Oberdán Rocamora continuó en JorgeAsisDigital.com/ lo ya anticipado sobre superministerios para Sergio Massa y Máximo Kirchner desde diciembre 2021.

El presidente Alberto Fernández, Otálora, El Poeta Impopular, encierra al gobierno de La Doctora en una fotografía de la que cuesta escaparse.

Imagen congelada de un teleteatro. Obsequio en bandeja para el oponente.

En el inicio sospechosamente exacto de la campaña para las legislativas de importancia artificial.

Para evadirse de la fotografía, en el oficialismo cometen el desastroso error de atacar a Mauricio Macri, El Ángel Exterminador.

El Ángel, a pesar de Horacio Rodríguez Larreta, Geniol, es el símbolo de la oposición que los desangra. Con la sistemática radicalización de su periodismo militante.

Pero mantener la vigencia de Macri significa reiterar el error del macrismo en los tiempos del rol invertido.

Cuando mantenían la vigencia de La Doctora porque creían vencerla con facilidad.

Lecturas de encuestas fáciles que inducen a la estrategia equivocada. Con dos o tres movimientos La Doctora los iba a desalojar.

Con creencias similares, se procura ahora mantener vivo a Macri. Es quien aguarda el «operativo clamor».

Mientras tanto Macri colabora en la campaña de su principal competidor. El heredero natural. Horacio.

El Ángel acompaña a los baluartes fundamentales de Geniol. Protagonistas de dos desplazamientos.

La señora María Eugenia Vidal, La Chica de Flores de Girondo, desplazada desde la Provincia Inviable hacia el Maxikiosco del Artificio Autónomo.

Y Diego Santilli, El Bermellón, desplazado desde el Maxikiosco hacia La Inviable.

Se dijo que Vidal la tiene más difícil en la diputación de 2021 por el Maxikiosco que en la cruzada por la gobernación en 2015.

Una oposición radicalizada hasta la insensatez debe habituarse, en la capital, con la propuesta racional diseñada por Horacio.

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Si avanza hacia la Presidencia, Horacio sabe que sólo podrá gobernar a partir de acuerdos básicos con quienes hoy confronta.

Vidal es la candidata oficial. La suya. Pero Horacio alienta también la confrontación interna con el radical cultural Ricardo López Murphy, El Bulldog Gato.

Lástima que Horacio no pudo captar, ni enjaular, a Javier Milei, El Libertario Libertino.

Es Milei quien captura los votos del sorpresivo liberalismo juvenil (y de la vieja derecha militar).

La otra gran apuesta de Horacio es Bermellón Santilli en Buenos Aires. Vicejefe del Maxikiosco y ministro de Seguridad.

Pone mucho Horacio para preparar con Santilli un próximo gobernador.

Pero el Bermellón debe confrontar internamente con Facundo Manes, Cisura de Rolando.

Tampoco Horacio pudo captar al radical Manes para su enorme jaula.

Manes supo vigorizar a la Unión Cívica Radical que venía bastante aplastada y con falta de entrenamiento.

Más habituada a cobrar salarios que a luchar por el poder.

Los radicales le brindan a Manes una estructura sólida en el interior de la provincia y una ostensible fragilidad en el conurbano, donde hacen falta, al menos, 20 mil fiscales.

A 2.500 pesos por patriótico fiscal. Bastante costoso para una artesanía política inspirada en la neurociencia.

Tampoco Santilli tiene asegurado el privilegio de la exclusividad.

Hay cuatro potenciales aspirantes a gobernador que compiten desde Juntos con Santilli para 2023.

Dos son minigobernadores. Jorge Boga Macri, El Primo (que era) Pobre, de Vicente López.

Y Diego Valenzuela, El Historiador Televisivo, de Tres de Febrero.

Ambos apoyan a Santilli en este 2021, para diputado.

Y Joaquín de la Torre, El Ancho de San Miguel, y Emilio Monzó, El Diseñador.

Dos que apoyan a Manes, quien a su vez le disputa la presidencia a Horacio (y a Macri).

La elección descompensada hoy lo muestra ganador a Santilli y su aparato superior.

Pero para que las otras cuatro proyecciones se mantengan firmes la diferencia debe ser lo más ajustada posible.

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Máximo Kirchner y Sergio Massa.

Máximo Kirchner y Sergio Massa.

Pragmatismos

La fotografía festiva de Alberto, en la noche de las velitas, ahora desordena al Frente de Todos. Y ordena (y fortalece) a Juntos.

Justamente la foto los viene a desordenar cuando avanzaban en la planificación de la post pandemia.

Para los dos últimos años del único mandato de Alberto (con suerte).

Son proyectos que pensaban anunciar después del recuento electoral.

Pero trascienden. A pesar del secretismo irrelevante de La (Agencia de Colocaciones) Cámpora.

Cuentan, en la Agencia, con la gobernación en 2023 para Máximo, En El Nombre del Hijo, líder del PJ bonaerense.

Pero faltan los dos años de post peste y en la Agencia, la organización más armada y aceitada, se discute el eventual apoyo para la presidencia de Axel Kicillof, El Gótico.

Es el preferido de la Doctora (para contener a Máximo). Y en especial para desorientar, con significativa perversidad, a los minigobernadores.

O profundizar el entendimiento de Máximo y Wado, o sea La Agencia Cámpora, con Sergio Massa, El Conductor.

Es la alianza que articula y sostiene lo único que queda firme del gobierno, desde el parlamento.

Pese a la fundamentada desconfianza, La Doctora sabe que Massa es quien puede generarle un «clima de inversiones».

Pero siempre después de firmar el acuerdo de conveniencia recíproca con el Fondo Monetario.

Aunque se le tema, el FMI se muestra interesado en resolver el conflicto que produjo con aquel préstamo político, tan inútil como irresponsable.

Superministerios

Mientras la prisión de la fotografía ocupa la centralidad se diseña la próxima configuración del gobierno post peste. (Al margen de la persistencia de Otálora y de sus tres Otaloritas).

Se estudia la creación de dos superministerios. Uno que concentre la Economía, la Producción, el Crecimiento y la Energía. Se estudia la creación de dos superministerios. Uno que concentre la Economía, la Producción, el Crecimiento y la Energía.

Otro que concentre la creación de Trabajo y resuelva los padecimientos de la Seguridad Social. Otro que concentre la creación de Trabajo y resuelva los padecimientos de la Seguridad Social.

Como si se intentara recrear la Secretaría de Previsión (auspiciosamente relevante en tiempos de un tal Perón).

El superministerio de Economía se planifica a la medida política de Massa y de su batallón de economistas.

Potenciales funcionarios del banco de suplentes. Se reúnen con frecuencia en la presidencia del congreso.

El superministerio de Trabajo y Seguridad Social está diseñado para Máximo. A los efectos de aportar el hervor que le falta.

En general, cuando en el peronismo alguien es sindicado para un cargo superior es porque se lo pretende desplazar del puesto que detenta.

La presidencia de la Cámara, y la titularidad del bloque, son lugares difíciles para abandonar.

Pero se impone contar los votos. Para saber con qué se dispone.

Y esperar que se diluya la mazmorra de la fotografía, por impulso de otro escándalo superador.

La Doctora se muestra tan pragmática que desconcierta hasta a quienes se le distanciaron. O la combatieron.

Como el senador Espínola, El Camau. Al que se notó algo incómodo al reconciliarse.

La Doctora no podía perder un senador por Corrientes. Y El Camau pretendía disculparse por cuestiones del pasado.

No se preocupe, senador, si me dejo llevar por rencores del pasado aquí me quedo sola, con Wado. No se preocupe, senador, si me dejo llevar por rencores del pasado aquí me quedo sola, con Wado.

FUENTE: Jorge Asis Digital

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