ROSARIO. El inicio de la cosecha gruesa genera un gran caos en las rutas de Santa Fe -especialmente en el sur, donde faltan obras públicas prometidas hace años, como al autovía en la ruta 33-, por donde circulan hasta 15 mil camiones por día, con destino a los puertos del Cordón Industrial.
SANTA FE
Cosecha gruesa, lado B: accidentes fatales y caos en las rutas
Se estima que aproximadamente 15 mil camiones circulan por día en las rutas santafesinas, que no tienen la infraestructura para soportar semejante tráfico. Esto produce un gran caos y trágicos accidentes. Solo en esta semana, fallecieron 4 personas en accidentes viales donde estuvieron involucrados camiones. Los habitantes de la provincia, cansados de esta problemática, reclaman al gobierno nacional y provincial.
Los habitantes de la provincia conviven con esta problemática desde hace años. De marzo a septiembre circular por las rutas es caótico, debido a las largas colas de camiones que van y vuelven del Gran Rosario, donde descargan la mercadería.
Esta semana, y como consecuencia de la saturación del tránsito pesado, fallecieron 4 personas en 2 accidentes viales. El primero sucedió en la ruta provincial 91, entre Serodino y Totoras, a 70 kilómetros de Rosario aproximadamente. En el siniestro participaron cuatro camiones y una camioneta, y tuvo como saldo 2 camioneros fallecidos por los impactos.
El segundo accidente sucedió en la ruta 14, a la altura de la ciudad de Bigand, a 60 kilómetros de Rosario. Allí se vieron involucrados en un choque dos camiones y una camioneta. "Un camión trató de hacer una maniobra y la caja del camión cayó sobre la Ford EcoSport en la que iban las dos mujeres que fallecieron", indicaron testigos del trágico hecho.
Lo cierto es que en febrero, el Gobierno Provincial había anunciado con bombos y platillos el comienzo del programa "Cosecha Segura 2021", cuyo objetivo es regular la circulación del tránsito pesado por determinadas rutas y/o caminos y evitar posibles de casos de inseguridad en la logística de la cosecha gruesa.
El encargado de comunicar el trabajo a realizar fue el ministro de Gobierno, Justicia, Derechos Humanos y Diversidad de la provincia, Roberto Sukerman. “Es la primera de una serie de reuniones con intendentes, presidentes comunales, y autoridades nacionales del área de agricultura, transporte y seguridad para planificar lo que va a ser en las próximas semanas la cosecha 2021. También, participaron localidades que si bien no tienen puerto se ven muy afectadas por el tránsito de camiones”, había dicho el funcionario a principios de febrero, asegurando que se iban a realizar controles viales en las rutas de la provincia.
“Para este operativo tan complejo y prolongado es imposible lograrlo sin el trabajo en conjunto de todas las fuerzas locales, provinciales y municipales; tenemos un equipo, no es unipersonal, y con la experiencia que han tenido en otros años vamos a lograr que este año la cosecha sea segura como esperamos”, dijo en el mismo momento del anuncio del programa el subsecretario de Prevención y Control del Ministerio de Seguridad santafesino, Alberto Mongia.
“Al tener en suelo santafesino los puertos privados más importantes del país y teniendo en cuenta que por aquí se va el 80% de la cosecha de granos, ello representa un desafío porque por nuestras rutas van a converger más de 14 mil camiones. Esto amerita que haya todo un equipo de trabajo de la Provincia junto a fuerzas federales y referentes de la Nación, porque desde Santa Fe podemos idear y programar, pero necesitamos el aporte de todos los estamentos del Estado”, explicó también el subsecretario de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (Apsv), Osvaldo Aymo.
La realidad es que finalmente, son pocos los controles en las rutas de la provincia. Por este motivo, y para dejar de lamentar muertes, vecinos de la región de Bigand elevaron un pedido al Gobierno Provincial, donde solicitan el realizamiento de las obras pendientes hace muchos años, para que eviten la crisis y los accidentes que genera cada año la cosecha gruesa con la saturación de camiones.
Por su parte, los habitantes las localidades de La Ribera y Pueblo Andino, cercanos a Serodino, se reunieron con el secretario de Transporte provincial, Osvaldo Miatello, para expresar su preocupación por la gran circulación de camiones y la cantidad de accidentes sucedidas en la zona.
La situación de los vecinos de Villa La Ribera -a 43 kilómetros de Rosario y cerca del Cordón Industrial- es desesperante, tal como la describen ellos mismos. Es que por el pueblo, de 700 habitantes, pasan 15 mil camiones por día por la ruta 91, que atraviesa la localidad.
“Vivimos en Villa La Ribera, Santa Fe, sobre la ruta provincial N° 91 y su unión con la ruta nacional N° 11. Aquí se genera el embudo que los 15 mil camiones diarios que llegan desde autopistas y rutas santafesinas generan al ingresar a las empresas portuarias ubicadas en la localidad de Timbúes”, comienza un comunicado que vecinos autoconvocados quieren hacerle llegar al presidente Alberto Fernández.
“El trecho de la ruta 91 es el gran embudo de la cosecha gruesa. Los camiones se reparten previamente en distintas carreteras, como la 34, la A012, la autopista a Santa Fe y la 11, pero en el segmento final del ingreso a los puertos pasan todos juntos por el centro de la localidad. Es cierto que la cosecha gruesa afecta a toda la región, pero aquí lo vivimos especialmente, porque tenemos cinco terminales portuarias a las que llegan los camiones”, explicó a La Capital Gisella Signorelli, referente de los vecinos autoconvocados.
“Desde el año 2005 luchamos para que se genere la infraestructura y organización del tránsito acorde a la importancia económica que tienen los puertos para todo el país. Durante toda la cosecha gruesa, las rutas y accesos a nuestro pueblo quedan colapsadas, poniendo nuestra vida en peligro, ya que debemos conducir en contramano, por banquinas, sin visión, esperando colectivos en mitad de la ruta, sin accesos a ambulancias, bomberos y policía. Y también quedan expuestos los camioneros a largas horas de espera sin lugares adecuados para colmar sus necesidades básicas, estacionados en banquinas y calzadas, siempre en peligro de vuelcos o choques, incluso cuando pagan para que las rutas estén en condiciones”, finaliza el comunicado.
La falta de infraestructura y la desidia de años de promesas de obras de parte de muchos gobiernos ya genera hartazgo en los santafesinos, que tienen que convivir día a día con noticias sobre muertes evitables.
En un año electoral, el presidente Alberto Fernández anunció en Rosario, en el marco del programa Capitales Alternas, que finalmente se destinarán fondos para el inicio de la ejecución de la autovía de la ruta 33, que los habitantes de la zona esperan desde hace más de 20 años. Siempre en espera, siempre postergados, esta vez cruzan los dedos para que por fin un gobierno se decida a hacer lo que prometen.