Ya se anticipa un suministro deficiente de semiconductores para una variedad de electrodomésticos y equipos industriales que incluyen los teléfonos móviles.
FALTAN CHIPS
Cuiden mucho sus teléfonos móviles porque no tienen recambio
La escasez global de semiconductores podría durar hasta 2022 y afectar la producción de teléfonos móviles, tal como ya sucede con la industria automotriz.
Los chips informáticos más solicitados no son especialmente sofisticados ni caros. Pero son componentes indispensables que se utilizan en todo, desde aparatos de cocina hasta las lavadoras y los aparatos electrónicos.
Los fabricantes de automóviles han ido cerrando sus líneas de montaje y despidiendo a sus trabajadores porque no pueden conseguir suficientes chips al precio de US$ 1 (0,85 euro) por unidad.
Las fábricas han recurrido a la construcción de vehículos sin los chips necesarios para los sistemas de navegación, espejos retrovisores digitales, pantallas táctiles y sistemas de gestión de combustible.
En total, la industria automotriz mundial podría perder en 2021 más de US$ 110.000 millones (93.141 millones de euros) por este déficit.
Pero también la producción de teléfonos inteligentes, computadores portátiles, consolas de videojuegos, televisores e incluso de electrodomésticos inteligentes se ha ralentizado por la falta de microchips baratos.
Precio / Cantidad
El investigador de la Universidad Carnegie Mellon, Hassan Khan, que trabaja en Apple, opina: "No tiene sentido poner, por ejemplo, un chip A14 [el de iPhone y iPad] en cada computador del mundo. No lo necesita el termómetro inteligente que usamos en casa, y no hacen falta 15 de ellos en nuestro coche, porque consumen mucha energía y son muy caros".
El problema consiste en que aunque más usuarios confían en las tecnologías de chips más antiguas y más baratas, los gigantes de la industria de los semiconductores se han centrado en construir nuevas fábricas de vanguardia.
TSMC, Samsung e Intel se enfocan en los productos más sofisticados porque son los que tienen mejores tasas de retorno sobre la inversión.
TSMC, el mayor fabricante del mundo, obtuvo casi el 60% de sus ingresos en 2020 de la producción de chips de vanguardia con elementos de 16 nanómetros o menos, incluido el chip M1 de Apple creado con el proceso de fabricación de cinco nanómetros.
Pero nadie está construyendo equipos de fabricación de semiconductores para mantener las tecnologías más antiguas y provoca la amenaza de la interrupción del suministro y el desarrollo de muchas posibles innovaciones.
Además de ser más difíciles de conseguir, los chips básicos más baratos también se están volviendo relativamente más caros, ya que cada generación ha requerido equipos e instalaciones más costosos que las anteriores.
Es poco probable que los fabricantes de dispositivos de consumo, como una máquina de cocina a baja temperatura con wifi, inviertan en desarrollar chips especializados por su cuenta para añadir funciones aún más sofisticadas. En cambio, probablemente recurran a cualquier chip fabricado con tecnologías más antiguas.
La mayoría de los clientes actuales se conforman con los básicos más baratos, que representan una compensación entre el coste y el rendimiento.
La mayoría de los clientes actuales se conforman con chips básicos más baratos que representan una compensación entre el coste y el rendimiento. Y es su suministro lo que parece inadecuado a medida que la demanda mundial de potencia informática crece.
"El uso de semiconductores en vehículos todavía está aumentando, al igual que en hornos tostadores y en todo tipo de cosas. Entonces, la pregunta es, ¿a quién va a afectar esta escasez?", es la pregunta del profesor de práctica de gestión de Harvard Business School, Willy Shih.
Y todos miran hacia productos básicos, no los sofisticados, comenzando por la telefonía inteligente tan extendida.
Telefonía
Iris Pang, de ING Greater China, anticipó que los fabricantes de teléfonos inteligentes serán el próximo segmento en sufrir interrupciones.
También dijo en el Foro de Mercados Globales de Reuters:
La escasez de oferta más amplia podría durar hasta el 2do. trimestre de 2022, dijo Adam Khan, fundador de AKHAN Semiconductor.
Andrew Feldman, CEO de la empresa de semiconductores Cerebras Systems, coincidió: los proveedores estaban citando plazos de entrega de hasta 32 semanas para nuevos chips y componentes.
La industria de los semiconductores podría crecer entre 21% y 25% en 2021, y "la electrónica tendrá su mejor rendimiento desde 2010", dijo Dan Hutcheson, CEO de VLSI Research, especializada en chips.
Hace 20 años, había 25 fabricantes que producían chips de vanguardia.
En 2021 los proveedores de chips avanzados son
- Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC) en Taiwán,
- Intel en Estados Unidos y
- Samsung en Corea del Sur.
En el caso de Intel, intenta mantenerse al día, después de no cumplir en varias ocasiones los plazos para producir sus últimas generaciones de productos.
Construir una instalación para fabricar chips avanzados de nodos de 5 y de 7 nanómetros, cuesta entre US$ 5.000 millones y US$ 20.000 millones (4.234 millones y 16.935 millones de euros).
Las fábricas para crear dichos chips son muy caras y el coste de diseñar circuitos tan tremendamente complejos está fuera del alcance de muchas empresas.
Además de Apple, solo las mayores empresas tecnológicas que requieren el mayor rendimiento informático, como Qualcomm, AMD y Nvidia, están dispuestas a pagar cientos de millones de dólares para diseñar un chip con los nodos de vanguardia.
Pero Apple no es un producto accesible en todos los mercados. La mayoria de los teléfonos inteligentes operativos en el mundo no son Apple.
Muchas más compañías producen computadores portátiles, televisores y coches que utilizan chips fabricados con las tecnologías más antiguas, y un aumento en su demanda ha causado la actual escasez de chips.
La mayoría de los clientes de chips no pueden permitirse, o no quieren pagar, los modelos más recientes.