El martes pasado (2/11) se celebraron en Virginia, USA, las elecciones para gobernador donde resultó vencedor Glenn Youngkin un candidato del partido republicano. Antes de conocerse los resultados, Joe Biden decía con entusiasmo: “Vamos a ganar. Creo que vamos a ganar en Virginia”. Pero los resultados no fueron a su favor.
OUTSIDER COMO TRUMP
Glenn Youngkin se estrena en política y hace temblar a Biden
El republicano Glenn Youngkin ganó las elecciones para gobernador en Virginia. Su rol en Carlye y por qué su victoria es un golpe al presidente Joe Biden.
Glenn Youngkin, un ex ejecutivo del grupo financiero Carlyle, con gran participación en proveedores del Pentágono, y recién llegado político, derrotó al demócrata McAuliffe, un incondicional del partido, amigo de los Clinton, gobernador de 2014 a 2018.
Su victoria sería una “vuelta al trumpismo”, porque si bien Donald Trump no hizo campaña a su favor, le ha dado su apoyo en reiteradas ocasiones. Algunos apuntan a que esta victoria prepara el escenario para que Trump vuelva al ruedo en 2024, aunque para eso falta mucho tiempo.
Como menciona CNN, Virginia y Nueva Jersey a menudo se ven como referendos sobre una nueva Casa Blanca, ya que votan un año después de las elecciones presidenciales. Y en este caso, parece que el “referéndum” no tiene un balance positivo para Joe Biden, quien desde el 2020 sus índices de aprobación han caído por debajo del 40%.
Ideas radicales
Glenn Youngkin sin dudas es un republicano “pura sangre” y representa el conservadurismo en todas sus formas como por ejemplo su rechazo a temas como la igualdad transgénero o el revisionismo histórico, ya sea a través de la enseñanza de la historia del país en los colegios o el destierro de estatuas de otro tiempo. La figura de McAuliffe, el candidato demócrata al que derrotó, está asociada a Joe Biden y Kamala Harris.
Youngkin se ha manifestado en contra del uso obligatorio del cubrebocas y de imponer la vacunación a niños o a ciertas profesiones. Para los republicanos, McAuliffe es “un izquierdista radical”, aliado del aborto y demasiado blando con la inmigración, según el diario El País.
Glenn Youngkin ya se había visto envuelto en polémicas cuando en julio de 2021 salió a la luz un video que grabaron en secreto, donde admitía que tendría una postura fuertemente anti-aborto pero que no podía decirlo en campaña. Youngkin le dice a Lauren Windsor, una periodista, que él es "incondicional y descaradamente pro-vida", y otra persona le pregunta si "atacará a los abortistas" si era elegido como gobernador. Glenn Youngkin le contestó:
Su paso por Carlye
Glenn Youngkin pasó décadas en Carlyle, con sede en Washington, DC, ascendiendo hasta ser co-director ejecutivo en 2018 antes de irse en 2020 tras anunciar sus planes de competir contra McAuliffe, ex gobernador del estado de Virginia.
The Carlyle Group es una firma de inversión global y está especializada en cuatro áreas de negocio clave: corporate private equity, activos reales, estrategias globales de mercados y soluciones de inversión. Carlyle cuenta con representaciones en los distintos países de Latinoamérica, con mayor presencia en Brasil.
Youngkin ha utilizado su pasado empresarial para posicionarse como un creador de empleos, autodenominándose el "gobernador de empleos". Como parte de eso, aboga por una designación legal conocida como "derecho al trabajo", que permitiría a los empleados de empresas sindicalizadas optar por la distinción.
Sobre el papel, Glenn Youngkin y Kewsong Lee parecían una buena pareja, ambos conducían Carlye juntos, pero tras la salida de Youngkin para dedicarse a la política surgieron diferentes rumores sobre que esta relación no estaba tan aceitada como parecía.
El 4/11 Bloomberg anunció que Carlyle está en conversaciones para comprar la mitad de Resonetics en un acuerdo que valorará a la empresa de fabricación de dispositivos médicos en unos US$2.300 millones, incluida la deuda. Pero el acuerdo no está finalizado y las conversaciones aún podrían fracasar.
Los malos momentos
En una entrevista hecha por Insider, cuando el etrevistador le preguntó a Glenn Youngkin: “Durante su tiempo en Carlyle, la firma llegó a un acuerdo con una empresa brasileña de bienes raíces llamada Scopel, que terminó envuelta en juicios. ¿Qué recuerdas de ese trato?”
Él respondió:
Admitió que pasó un tiempo volando de ida y vuelta a Brasil para ver si se podía arreglar, pero que “fue una circunstancia desafiante y no funcionó muy bien para todos, pero al menos mejoró con esfuerzo”. Veremos como se desempeña en su cargo como gobernador de Virginia.