SOTERRAMIENTO DEL SARMIENTO
Argentina suma un nuevo "elefante blanco" a su larga lista de obras inconclusas
Se suma a las represas santacruceñas, el gasoducto del Noreste, la autopista Perón y Atucha III. Culpas compartidas, para ambos lados de la grieta en Argentina.
Tras de 17 años y US$ 420 millones perdidos, el soterramiento del Sarmiento llegó a su fin: el gobierno nacional y las dos empresas (Sacde y Ghella) que estaban a cargo de la obra resolvieron darla por concluida.
Durante más de tres lustros, tuvo lugar uno de los mayores festivales de despilfarro y corrupción de la patria contratista de la Argentina.
Todo comenzó en 2006, cuando el gobierno de Néstor Kirchner convocó la licitación de la obra.
En 2008, bajo el gobierno de Cristina Fernández, se adjudicó el proyecto.
El principal beneficiario fue Ángelo Calcaterra, dueño de Iecsa y primo de Mauricio Macri, en una movida que incluyó a la empresa italiana Ghella, la brasileña Odebrecht y las españolas Comsa-Emte.
La obra debía terminarse a los 36 meses de firmarse el financiamiento. La tuneladora (máquina que se utiliza para excavar bajo tierra) apareció recién en 2012 y comenzó a funcionar en 2016 al renegociarse el contrato.
Ya se habían desperdiciado una década desde el inicio.
Bajo el gobierno de Alberto Fernández-Cristina Kirchner continuó el impasse y se dio de baja el contrato.
El proceso se vio salpicado por uno de los casos de corrupción más importantes de América Latina: el Lava Jato.
La constructora brasileña Odebrecht pagó coimas para adjudicarse la obra, al igual que Iecsa.
En 2025, las zonas aledañas a las obras inconclusas lucen deterioradas, con menos carriles en las avenidas y circulación limitada.
2-Las represas santacruceñas de nunca acabar
Los complejos hidroeléctricos “Presidente Nestor Kirchner” y “Gobernador Jorge Cepernic” sobre el río Santa Cruz se encuentran detenidas con un avance conjunto inferior al 50 % de la obra.
Desde 2023, los trabajos se encuentran detenidos.
Están a cargo de un consorcio cuyo principal accionista es la empresa china Gezhouba Group Corp.
La Jorge Cepernic (ex Barrancosa) se encuentra más adelantada (46%) y ya se habla de la paralización total de la Néstor Kirchner (ex Cóndor Cliff) que tiene menos del 20% de finalización.
En 2024, hubo 1.800 despidos en las obras de ambas represas cuyas instalaciones semi abandonadas sufrieron deterioro por varias inundaciones.
En el caso de la represa NK, en 2018 se detectaron deslizamientos de suelos en el lugar donde se está emplazando la obra.
El máximo tribunal ordenó que se cumpla con los estudios de impacto ambiental antes de avanzar con la obra para garantizar la protección de los glaciares.
En otras palabras, la mayor obra pública de la Argentina se estaba desarrollando sin haber tenido en cuenta que dos grandes represas iban a afectar al Rio Santa Cruz y, en consecuencia, a los glaciares que le dan lugar en épocas de deshielo.
Los diques contenedores podrían generar un daño permanente e irreversible al ecosistema del último río glaciario de la Patagonia.
Las hipotéticas centrales tendrían una potencia instalada de 1310 megavatios, lo que representa el 5% del máximo consumo nacional.
Sin embargo, su enorme distancia con los grandes centros de consumo suponen una inversión monstruosa para el traslado de la electricidad.
La realización debía estar lista para 2022 y con la generación de energía se iban a obtener los fondos para pagar el crédito a los bancos chinos involucrados.
Tras la reconfiguración de los cálculos iniciales, el presupuesto actual es de US$ 4.714 millones. Ya se han “perdido” cientos de millones de dólares.
3-Autopista Presidente Perón, en el olvido
Proyectada como la tercera circunvalación del Área Metropolitana de Buenos Aires, quedó detenida y sin señales de reactivación desde diciembre de 2023. Con obras iniciadas hace quince años y múltiples anuncios en distintas gestiones, apenas se habilitaron medio centenar de los 83 kilómetros previstos.
Hoy, el trazado se encuentra paralizado, y la maquinaria detenida.
El proyecto comenzó como una promesa de conectividad clave: unir desde San Isidro hasta Berazategui por un corredor vial que funcionara como anillo externo a la General Paz y el Camino de Cintura (Ruta Provincial 4).
Por ejemplo, todo el tránsito que fuera desde el Norte del país hasta la Costa Atlántica podría doblar a la altura del Shopping Soleil y terminar pasando Berazategui, en plena ruta a Mar del Plata.
En su recorrido, la autopista debía atravesar doce municipios del conurbano:
-San Isidro,
-General San Martín,
-Tres de Febrero,
-Hurlingham,
-Ituzaingó,
-Merlo,
-La Matanza,
-Ezeiza,
-San Vicente,
-Presidente Perón,
-Florencio Varela
-Berazategui.
Sin embargo, la ejecución fue lenta y discontinua. Desde su lanzamiento pasaron cuatro presidentes pero todo parece haber quedado empantanado.
El último avance se registró en diciembre de 2023, cuando el gobierno de Axel Kicillof logró habilitar un tramo de 10 kilómetros.
Poco después, todo quedó paralizado: no hubo más anuncios, los equipos se retiraron y los trabajos quedaron en pausa.
Existe una creciente inseguridad vial en los tramos abandonados y riesgos de intrusiones masivas en predios que son difíciles de custodiar.
El futuro de la obra es completamente incierto.
4-Gasoducto del Noreste, abandonado y canibalizado
Son 4 las provincias argentinas que carecen por completo de servicio de gas natural: Chaco, Formosa, Misiones y Corrientes. También, está afectado el Norte de la provincia de Santa Fe.
El gasoducto del NE debía llevar fluido desde Bolivia hasta toda esa amplia región de Argentina.
Se prometieron 1.500 kilómetros de caños que deberían unir el gasoducto Juana Azurduy, que llega desde el altiplano, con la provincia de Santa Fe, luego de recorrer buena parte del Noreste del país.
En el medio del monte del chaco salteño existen aún miles de caños que deberían estar colocados.
Cada estructura de 24 pulgadas y casi 13 metros de largo cuesta 8 mil dólares, una tentación demasiado grande para los gobernantes locales.
Se trata de unidades especiales y sin costura que la empresa estatal Enarsa le entregó a las compañías del gasoducto.
En los obradores también quedaron decenas de rollos de fibra óptica: cada uno de ellos cuesta cerca de US$ 5.000.
5-Atucha III costaría US$ 8.300 millones
Se anunció con bombos y platillos: después de más de cuatro décadas se construiría una nueva central nuclear argentina
La cuarta usina nacional de este tipo estaría ubicada en el predio del Complejo Nuclear Atucha, partido de Zárate y tendría una potencia eléctrica bruta de 1.200 MW.
La movida se inició en 2004 cuando Néstor Kirchner vistió China ya que la tecnología y la inversión llegarían desde Pekin.
En 2015, 11 años más tarde, se firmaron los contratos para la construcción de esta central nuclear.
El convenio estipulaba que al menos el 85% de los fondos iban a ser cubiertos por el gigante asiático y hay un acuerdo vigente para continuar las negociaciones.
El ambicioso Plan Nuclear Argentino presentado por el libertario Demian Reidel significa una monto monumental en medio de un ajuste donde el “no hay plata” es la respuesta recurrente ante cada solicitud de dinero para generar desarrollo.
En los trabajos previos a la obra, se llevan invertidos decenas de millones de dólares.