Es usual que los suplementos naturales contengan omega-3, ya que este ácido graso genera una variedad de beneficios para la salud. Un nuevo estudio descubrió que también tiene efectos para para longevidad, según la publicación en The American Journal of Clinical Nutrition.
OMEGA-3
El secreto de la longevidad está en la chía y el pescado
Un nuevo estudio confirma que un ácido graso esencial, no solo es clave para la salud general, sino también para lograr la longevidad.
El omega-3 es uno de los dos tipos principales de ácidos grasos poliinsaturados, cuya función es formar las membranas celulares. Se lo denomina “esencial” porque el cuerpo no puede producirlo por sí solo, sino que debe ser ingerido.
Además de suplementos, algunas fuentes de omega-3 son:
- aceite de linaza o lino
- soja
- aceite de canola
- ciertos pescados, incluidos el salmón, el atún y las sardinas
- semillas de chía
- nueces
Algunos estudios previos habían sugerido que las dietas ricas en este ácido graso están relacionadas con tasas más bajas de cáncer, un riesgo reducido de enfermedad de Alzheimer y una reducción de los síntomas de la artritis reumatoide. Ahora también está relacionado a la longevidad.
Omega-3 para la longevidad
Investigadores del Instituto de Investigación Médica del Hospital del Mar (IMIM) en España y del Instituto de Investigación de Ácidos Grasos (FARI) en Estados Unidos buscaron averiguar el rol del omega-3 en la esperanza de vida.
Para el estudio hicieron un seguimiento de 2.240 participantes durante 11 años y analizaron los niveles de omega-3 en la sangre de los participantes, divididos en cuatro grupos:
- nivel alto entre no fumadores
- nivel alto entre fumadores
- nivel bajo entre no fumadores
- nivel bajo entre fumadores
Según su análisis, las personas con niveles altos de omega-3 en la sangre que no fumaban tenían la estimación de supervivencia más alta. Las personas con niveles altos de omega-3 que sí fumaban y aquellas con niveles bajos de omega-3 que no fumaban eran casi idénticas en términos de estimaciones de supervivencia.
Finalmente, las personas con niveles bajos de omega-3 en la sangre que sí fumaban tenían la estimación de supervivencia más baja.
El coautor del estudio, el doctor William Harris, presidente y fundador de FARI explicó a Medical News Today que: