Parece que la serie de Sky Rojo de Netflix se inspiró en su historia. Leudis Isaac Corro Camacho, más conocida como La Diabla, se encargaba de reclutar mujeres y transexuales desde su país para llevarlas a España y explotarlas en la prostitución.
DETENIDA
Prostitución y trata: La Diabla, la venezolana más peligrosa
Se fugó en 2020, pero lograron detenerla en Alemania. La Diabla se dedicaba al proxenetismo en la prostitución de España. La criminal más buscada de Europa.
Esta mujer tras, sometía a sus víctimas a operaciones de cirugía estética como aumentos de pechos y liposucciones, que luego ellas tenían que pagar. Tan solo la deuda inicial oscila los €12.000, igualita a Sky Rojo.
La Diabla tiene 34 años y es oriunda de Venezuela. Su dinámica, junto a sus socios, para prostituir a las chicas era la siguiente: las encerraban en pisos de Barcelona, Madrid y Alemania y cuando dejaban de ser rentables para la prostitución las vendían a un club de alterne en Caspe (Zaragoza), de donde logró huir La Diabla en una intervención policial. Se cree que huyó a Alemania a finales de 2020 con su ex pareja, un policía de nacionalidad germana.
Como menciona el diario español Marca, la Europe´s Most Wanted 2021 es una campaña desarrollada por la agencia de la Unión Europea para la cooperación policial Europol que recoge la relación de los fugitivos más buscados en Europa. Actualmente, hay 54 reclamados por 23 países. La Diabla, junto a Antonio Anglés y Norbert Khöler, formaban parte de los fugitivos más buscados en España incluidos en esta lista.
Antonio Anglés es el responsable por el crimen de Alcácer, donde secuestró, violó, torturó y asesinó a Míriam, Toñi y Desirée, tres adolescentes de catorce y quince años del municipio Alcácer de España. También son responsables, y primeros sospechosos, Enrique Anglés, hermano de Antonio y Miguel Ricart.
¿Por qué ese apodo?
Tal y como publica Luis Rendueles en 'Territorio Negro' de Onda Cero la proxeneta venezolana, que adoptó su sobrenombre de 'La Diabla' de un personaje de la serie 'Sin senos no hay paraíso' (la versión colombiana de 'Sin tetas no hay paraíso'), les decía a las jóvenes y transexuales que a "los españoles no las quieren gordas".
Según el diario El País, fue la colaboración ciudadana, en este caso de un “presunto cliente”, según revelan fuentes policiales, quien puso a los agentes españoles tras una buena pista: un conocido jugador de hockey lituano llamado Robert Licitis. Junto a él la encontraron la madrugada del 1/12 en la ciudad alemana de Hamburgo. Se alojaban en la habitación de un hotel, en el número 8 de la calle Graumannsweg, en Alemania.