ANTICIPO DE NUEVAS ACCIONES
Ante La Niña 2012, Mesa del Agua
¿Continuará la sequía o cesará? Gran enigma meteorológico. Por las dudas, en la provincia de Buenos Aires ya se activó una Mesa del Agua.
05 de enero de 2012 - 16:37
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). La campaña agrícola 2011/2012 está desarrollándose bajo la influencia de un 2do. episodio consecutivo de "La Niña”, que prolonga el episodio de signo similar, que afectó a la campaña agrícola precedente, lo cual genera un fuerte temor de que pudiera repetirse una sequía general, como la experimentada durante la campaña 2008/2009.
“La Niña” constituye la fase fría del fenómeno de “El Niño Oscilación del Sur” (ENSO), siendo causada por un incremento en la intensidad de los vientos alisios ecuatoriales que, a su vez, provoca un enfriamiento del Océano Pacífico Ecuatorial. Los episodios vigorosos producen lluvias por debajo de lo normal, desde Noviembre hasta Marzo, en el sur del Brasil, el Uruguay, el este de la Región del Chaco, la Mesopotamia y la Región Pampeana.
Por el contrario, el norte y el centro-oeste de Sudamérica (Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y el norte del Brasil), el NOA y gran parte de Cuyo observan precipitaciones sobre lo normal.
En la mayor parte de los episodios de “La Niña”, a partir de mediados de Enero comienzan a producirse precipitaciones, que reponen las reservas de humedad de los suelos, permitiendo que los lotes de cultivos se recuperen y se arribe a un resultado productivo que, aunque no suele alcanzar una cifra récord, es suficiente para obtener una adecuada rentabilidad. Esto sucedió, por ejemplo, en los episodios de La Niña de 2005/2006, 2007/2008 y 2010/2011, en los que las lluvias llegaron providencialmente durante Enero, revirtiendo la situación en forma dramática.
Contrariamente, durante el episodio de “La Niña” 2008/2009, las lluvias fueron retrasándose, semana tras semana, y recién llegaron en Marzo, cuando el daño ya era irreversible, por lo que se produjo una marcada merma productiva, cuyo recuerdo preocupa en estos momentos a muchos productores y técnicos.
Que esto ocurra es muy raro. Para encontrar un episodio similar, hay que remontarse a la campaña agrícola 1988/1989, que fue afectada por un episodio de “La Niña” particularmente intenso y persistente, que causó una prolongada sequía, provocando una merma productiva de magnitud similar a la experimentada en la campaña 2008/2009.
Los 20 años transcurridos entre los episodios catastróficos de 1988/1989 y 2008/2009 hace pensar que se trata de un tipo de evento que se repite sólo cada 20 años, por lo que, desde el punto de vista estadístico, la probabilidad de que pueda repetirse en la campaña 2011/2012, sólo 3 años después del anterior, parece muy baja.
En cambio, desde el punto de vista físico, los cambios operados en el clima durante el último medio siglo, hacen temer que la fase húmeda, experimentada por el clima sudamericano desde mediados de la década de 1970 hasta finales de la década de 1990, está llegando a su fin, dando paso a un estado climático menos favorable, que recuerda la nutrida sucesión de sequías observadas desde finales de la década de 1920 hasta mediados de la década de 1950.
Paralelamente, parece estarse produciendo una acentuación del régimen térmico, observándose una marcada alternancia entre prolongados lapsos cálidos, con temperaturas máximas muy elevadas, que causan un fuerte consumo de humedad, y cortas pero muy vigorosas irrupciones de aire polar, que producen heladas muy tempranas y muy tardías.
A raíz de la necesidad de reforzar el abastecimiento de agua debido a la temporada estival y a los efectos negativos de la sequía del suelo en algunas zonas de la provincia, el ministro de Infraestructura, Alejandro Arlía, encabezó la denominada “Mesa del Agua”, junto a los responsables de ABSA (Aguas Bonaerenses S.A.), SPAR (Servicio Provincial de Agua Potable y Saneamiento Rural), ADA (Autoridad del Agua) y OCABA (Organismo de Control de Aguas de Buenos Aires), destinada a la búsqueda de nuevas estrategias que eviten problemas puntuales relacionados al suministro del recurso.
Desde este punto de vista, el ministro y las autoridades de los distintos organismos, evaluaron un programa de inversiones y maniobras de contingencia con el objetivo de afrontar la coyuntura.
Para ello, señaló Arlía, “Se pondrán en marcha acciones correctivas en los meses de verano como: refuerzo de las cuadrillas de reparación, trabajos de oficio, fortalecimiento del Call Center de ABSA y una correcta recepción de los reclamos de cada localidad con pronta solución de los inconvenientes”.
En ese marco, Arlía explicó: “A pedido del gobernador Scioli todos nuestros esfuerzos tienen que estar volcados a la provisión de agua
potable y a la concientización de la necesidad del uso racional del agua, porque es un recurso escaso, agravado por la disminución de las reservas acuíferas como consecuencia de la sequía y la temporada estival”.
Ante esta situación, desde el Ministerio de Infraestructura se están llevando a cabo tareas de refuerzo y abastecimiento como por ejemplo en la localidad de Médanos que recibe 7 camiones cisterna por día o Florencio Varela que recibe 2. Además, están resolviendo problemas estructurales en otras localidades como 9 de Julio donde se inauguraron 10 nuevos pozos o el caso de Pehuajó donde se concretó la realización de un acueducto de 6,5 kilómetros.
Participaron de esta mesa, el Subsecretario de Servicios Públicos, Walter Saracco; el Dir. Provincial de Servicios Público de Aguas y Cloacas, Flavio Seliano; el presidente de ABSA, Guillermo Scarcella; el presidente del SPAR, Juan Viñales; la vicepresidente de ADA, Liliana Racovsky; el presidente de OCABA, Horacio Delgado y el vicepresidente de ABSA, Héctor Dottore.