OPINIÓN

UN CAMINO CON DEMASIADOS OBSTÁCULOS

Mapa de la crisis: De Bs.As. a Washington, pasando por Estambul y Quito

No sólo por su dependencia del FMI, la Argentina participa de un cuadro complejo, en el que también se dan cita otros actores, en una coyuntura global muy delicada. Aquí algunas consideraciones al respecto:

Con la declaración de Christine Lagarde advirtiendo a los posibles candidatos opositores de 'no sacar las manos del plato', ha quedado inaugurado oficialmente la carrera electoral 2019.

Pero no fueron sus únicas declaraciones porque una semana antes, ella ya había advertido a la aldea global, representada por los mercados optimistas, acerca de una segura desaceleracion consecuencia de la guerra comercial entre China y USA.

Mientras, los pesimistas siguen afirmando que más que una desacelaración, hacia fines de 2019 podria ingresarse a una crisis de vasto impacto, a pesar que Donald Trump le insiste a la Reserva Federal acerca de la necesidad de no subir más la tasa de interés doméstica sino bajarla y así evitar que el precio del dinero debilite su campaña reelectoral 2020.

Esta situación ubica a Madame Lagarde en una posición muy frágil ya que ella fue la responsable, conjuntamente con el gobierno de USA, del apoyo tan vigoroso a la Argentina, aceptando renovar el protagonismo del FMI en el complejo escenario del Río de la Plata, y con un inevitable costo personal al aceptar otorgar más de la mitad del dinero disponible en el organismo multilateral, sin citar las concesiones en los 'waivers'.

Esto ocurre cuando, una importante desaceleración podría llevar a Turquia a golpear la puertas del FMI en cualquier momento, sin descartar a otros postulantes.

Esta amplia coyuntura desfavorable provoca repercusiones muy visibles sobre el malestar social en casi todas las latitudes.

Por ejemplo, en Europa y en USA ha quedado al descubierto que afecta el poder adquisitivo del ciudadano -y no solo a los 'chalecos amarillos' franceses-, no es consecuencia exclusiva del sistema previsional, tal como tratan de insistir todos los voceros del mercado financiero, sino también el impacto en el poder adquisitivo del déficit fiscal consecuencia de la cartelización de la energía en manos de pocos países y fondos de inversión que resultan la nueva aristocracia global.

Estos privilegiados han triplicado el valor del petróleo respecto del promedio histórico, regulando su producción para mantener sus precios cartelizados. Pero de esto no se habla, pese a que es casi un revival de lo acontecido en los años '30 del siglo pasado, cuando las empresas de energía monopolizaban los negocios, superando al feudalismo de siglos anteriores en el sometimiento territorial agrícola-ganadero.

Los nuevos paraísos de edificios de alturas pocas veces vistas construidos en mitad del desierto contrastan con las grandes migraciones por la pobreza de quienes tuvieron que sobrevivir al cambio climático que afectó a sus tierras.

Son 2 caras de una misma moneda, 2 visiones que se verifican en México: mientras Andrés Manuel López Obrador consigue que suba su imagen positiva local, las calificadoras de riesgo externas aumentan su riesgo-país.

El enfrentamiento de los 'mercadistas'con los 'populistas' se hace más nítido, y deberán  acercar posiciones ya que no hay mercados sin consumidores, y no hay desarrollo sin los mercados.

En la fronteriza 'tierra de nadie' están faltando liderazgos y fortalezas de parte de quienes arbitran la equidad socio-económica pero padecen de mediocridad política.

En el escenario local, los responsables de la campaña electoral oficial se encuentran con dificultades que ni la Big Data ni el FMI pueden ayudar.

Por ejemplo, Córdoba es para la alianza Cambiemos un laberinto con resultados inciertos. Y Florencio Randazzo, quien le quitó a CFK los 5 puntos necesarios en Provincia de Buenos Aires para que se impusiera Cambiemos, ya no se encuentra en la política partidaria.

Y, si el PJ decidiera no presentarse en la Ciudad de Buenos Aires, podría resultar el arma que precisa la UCR para que Martin Lousteau ponga definitivamente en jaque la idea de un trípode ganador: Nación, Ciudad Autónoma y Provincia de Bs.As.

Los triunfos provinciales de partidos locales (Neuquén y Río Negro) fueron una muestra más de lo que tuvo que ceder fiscalmente el Ejecutivo Nacional para conseguir las leyes compatibles con el acuerdo Argentina/FMI, instancia imprescindible pero también provocadora de fragilidad para la idea del trípode que ya no puede garantizar el triunfo.

El triunfo del PJ en las PASO de Entre Ríos, también va por ahí.

Hay quienes, y no son pocos, con una visión más audaz, atribuyen a las reuniones con Lousteau -más como economista y ex embajador en USA que como político-, a la hipótesis de que ante las limitaciones que impone el FMI, se estaría negocionando con el Tesoro estadounidense un apoyo extraordinario. Se diría una asistencia eventual ante cualquier complicación internacional que pueda afectar la estabilidad cambiaria local.

Pero esos supuestos negociadores encuentran un condicionamiento discreto de parte de algunos funcionarios de la Casa Blanca a una dolarización de la economía argentina al estilo Ecuador que despeje la incertidumbre cambiaria. Sucede que, detrás de Turquia podría estar en la fila el propio Ecuador (la entrega de Julián Assange en Londres sería una señal del acercamiento a Washington DC en la emergencia).

Tal como se verá, no todas las recetas son lo suficiente amplias y perfectas. Todos los caminos tiene un costo que los políticos no quieren pagar. 

En especial, quienes participan de elecciones en las que no se vota a favor de un candidato sino en contra de otro, provocando el efímero efecto de asumir con un apoyo popular del 55% pero a los 4 meses resulta que sólo queda el 30% ('efecto Bolsonaro'). En parte, esto sucede porque no es sencillo gobernar manteniendo el capital político necesario para cumplir con compromisos estructurales que garanticen el repago de la deuda pública.

La cronologia de los acontecimientos iluminará todas estas incertidumbres propias de un mundo muy inestable en donde todas la versiones tienen asidero.

Mientras los candidatos no confirmen su voluntad de presentarse, la campaña electoral quedará en manos del periodismo y los magistrados y fiscales auxiliados por los llamados 'servicios', afines a las distintas posiciones ideológicas, aunque la mayorías se crean objetivos e imparciales.

Te puede interesar

    Dejá tu comentario