Los opositores y partidarios del aborto legal en USA estarán atentos cuando la Corte Suprema de Justicia estadounidense aborde el caso 'Dobbs v. Jackson Women's Health Organization'. El fallo no pasará desapercibido para los referentes cristianos ni de otras confesiones religiosas ni a los escépticos.
POLÉMICA
Aborto y cristianismo, una historia diferente
El cristianismo y el aborto tienen una historia distinta a lo que se dice en la coyuntura global.
La demanda consiste en que un centro de salud para mujeres de Mississippi ha desafiado la constitucionalidad de una ley estatal de 2018 que prohíbe los abortos después de las primeras 15 semanas de embarazo.
En manos de la Corte Suprema, el caso tiene el potencial de afectar las disposiciones del paradigmático caso 'Roe v. Wade', la decisión que legalizó el aborto en USA.
Hay 3 posibilidades:
- que la Corte Suprema limite el acceso de las mujeres al aborto en muchos estados,
- que la Corte Suprema deje todo tal como se encuentra hoy,
- que la Corte Suprema aumente el acceso (N. de la R.: improbable).
Debate
Luis Josué Salés, profesor asistente de estudios religiosos en Scripps College, afirma que el debate sobre el aborto en USA a menudo es alimentado por la creencia de muchos cristianos de que aborto y cristianismo son incompatibles.
Por ejemplo, el catecismo de la Iglesia Católica Apostólica Romana, una guía autorizada de las creencias y prácticas de los cristianos católicos romanos, declara:
Sin embargo, esta declaración cuenta solo una parte de la historia.
Luis Josué Salés escribió en The Conversation, la web que edita Beth Daley:
Según él, los primeros escritos cristianos -que básicamente son las cartas del apóstol Pablo-, desaconsejaban el matrimonio y la reproducción.
Eran días de gran persecución, en especial del Imperio Romano. Tiempos de exilio y fugas cuando no muerte. Los romanos ensayaron una suerte de genocidio de los cristianos.
Y el objetivo de los cristianos estaba enfocado en evangelizar en todas partes, trasladándose de una localidad a otra, arriesgando su vida una y otra vez.
Thekla, Eugenia y Makrina
Los textos cristianos posteriores apoyaron estas enseñanzas. La reproducción de los creyentes no era un pivote de la fe. El foco estaba aplicado a otra agenda. Algunos cristianos del siglo 21 intentan cambiar la agenda del cristianismo.
Es posible que la opción contemporánea Vida vs. Interrupción del embarazo oculte otras cuestiones en debate en la sociedad, acaso vinculadas a la política.
El texto de The Conversation recuerda que en un escrito del siglo II conocido como 'Los Hechos de Pablo y Thekla', un autor cristiano en Asia Menor elogió a Thekla (en griego, "la fama de Dios") por rechazar a sus pretendientes y evitar el matrimonio a favor de difundir las enseñanzas cristianas.
En el siglo III, la historia de Thekla inspiró a una mujer noble romana llamada Eugenia.
Según otro texto cristiano, titulado 'Los Hechos y el martirio de Eugenia', se afirmó que ella rechazó el matrimonio y hasta dirigió un monasterio masculino durante un tiempo.
Después, disuadió a las mujeres de Alejandría de tener hijos, un consejo que enfureció a sus maridos.
Estos hombres convencieron al emperador Galieno de que las enseñanzas de Eugenia sobre la elección reproductiva de las mujeres ponían en peligro el poder militar de Roma al reducir la provisión de futuros soldados -una mentira de esos alejandrinos ya que por entonces, el Ejército imperial alistaba soldados de fortuna-.
De todos modos, Eugenia fue ejecutada en 258 d.C.
Incluso cuando el Imperio Romano se volvió, en forma progresiva, más tolerante hacia los cristianos, las mujeres recibieron elogios cuando evitaban el matrimonio.
Por ejemplo, el obispo Gregorios de Nyssa -una ciudad cercana a Harmandal, Turquía-, escribió el texto 'Vida de Makrina', para celebrar a su amada hermana y maestra, quien murió en 379 d.C.
En su escrito, Gregorios admira a Makrina por rechazar ingeniosamente a los pretendientes al afirmar que le debía fidelidad a su difunto prometido.
Luis Josué Salés:
Más allá del celibato
En el año 211 d.C., los emperadores romanos Septimio Severo y Caracalla (Marco Aurelio Antonino) declararon ilegal el aborto.
Sin embargo, las leyes romanas en torno al aborto se preocupaban por el derecho del padre a tener un heredero, no por las mujeres o los fetos por derecho propio. Los legisladores cristianos romanos posteriores dejaron este concepto casi sin cambios.
Los obispos cristianos condenaron la injusticia de las leyes que regulaban el sexo y la reproducción.
Por ejemplo, el obispo Gregorios de Nazianzos, quien murió en 390 d.C., acusó a los legisladores de hipocresía egoísta por ser indulgentes con los hombres y duros con las mujeres.
De manera similar, el obispo de Constantinopla, Ioannes Chrysostomos, quien murió en el 407 d.C., culpó a los hombres de poner a las mujeres en situaciones difíciles que provocaron a abortos.
Los líderes cristianos a menudo se reunían en eventos llamados "sínodos" para discutir creencias y prácticas religiosas. Y 2 de los sínodos más importantes relacionados con el aborto se llevaron a cabo
- en Ankyra, actualmente Ankara, Turquía, en el 314 d.C. y
- en Chalkedon, el actual Kadiköy, Turquía, en el 451 d.C.
Ambos sínodos redujeron drásticamente las penas por aborto en comparación con siglos anteriores.
Luego, con el tiempo, estas opiniones legales y religiosas no parecieron afectar las opciones reproductivas de las mujeres.
Los métodos de prevención y terminación del embarazo prosperaron en las sociedades cristianas premodernas, especialmente en el Imperio Romano medieval.
Por ejemplo, el historiador Prokopios de Kaisareia afirma que la emperatriz romana Theodora casi perfeccionó la anticoncepción y el aborto durante su tiempo previo como trabajadora sexual y, sin embargo, esta acusación no tuvo ningún impacto en la canonización de Theodora como santa.
Médicos cristianos
Alguna evidencia indica, según el autor, que los cristianos premodernos desarrollaron activamente opciones reproductivas para las mujeres.
Por ejemplo, los médicos cristianos Aetios de Amida -en el siglo VI- y Paulos de Aigina -en el siglo VII-, proporcionaron instrucciones detalladas para realizar abortos y fabricar anticonceptivos.
Sus textos cambiaron y mejoraron deliberadamente los manuscritos de Soranos de Efeso, quien vivió en el siglo II.
Un texto del siglo VI, 'La vida egipcia de Dorotheos', afirma que la hermana de Doroteo, un ermitaño egipcio de Tebas, quedó embarazada mientras estaba poseída por un demonio.
Sin embargo, cuando Dorotheos imploró en oración con éxito para que su hermana sufriera un aborto espontáneo, el texto trata la inusual interrupción del embarazo como un milagro, no como un ultraje moral.
Alrededor de 1.100 años después, ocurrió un evento similar en la vida de Walatta Petros.
Según el escrito, Walatta Petros, una mujer etíope noble luego canonizada como santa, se casó con un general y quedó embarazada en 3 ocasiones.
Sin embargo, cada vez que concebía, rezaba para que su feto muriera pronto si "no agradaba a Dios en la vida". La narradora nos dice que sus 3 hijos murieron días después del nacimiento, ya que " Dios escuchó su oración".
Entonces, los cristianos tienen un historial de métodos para prevenir y terminar embarazos. Pero estos textos premodernos, que abarcan unos 1.500 años, indican que los cristianos también tienen un historial de brindar estos servicios y hacerlos más seguros para las mujeres. O sea que los cristianos perfeccionaron los sistemas para reducir el riesgo de la mujer.
Estas historias son ignoradas, quizás por conveniencia política.
Luis Josué Salés: