Más de 1.000 personas fueron arrestadas ayer (12/6) en Rusia luego de que cientos de miles de manifestantes protagonizaran protestas anti-corrrupción para mostrar su oposición al Gobierno de Vladimir Putin, según AP. El líder opositor, Alexei Navalny, quien encabezó las manifestaciones, fue arrestado y sentenciado a 30 días de prisión. La revista TIME detalla que muchos de los manifestantes parecían ser muy jóvenes, aquellos que nacieron o crecieron con Putin al poder (desde hace 17 años).
RUSIA
Millennials protestan contra Putin; Oliver Stone es su chapulín colorado
Ayer, cientos de miles de personas protestaron en las calles rusas por el Gobierno de Vladimir Putin. Gran parte de los manifestantes tiene la misma edad que Putin al poder (17 años) o un poquito más. Para algunos analistas, ayer se vio el comienzo de un movimiento jóven de protesta en Rusia. Mientras tanto, se estrenó el documental de Oliver Stone, "The Putin Interviews", calificado por The Daily Beast como una "carta de amor tremendamente irresponsable" al Presidente ruso.
"La participación en las protestas fue notable en tamaño y en alcance geográfico. Los gobiernos locales de Novosibirsk, Kazan, Omsk, Tomsk, Irkutsk y otras partes afuera de Moscú reportaron protestas por algunos miles de personas en sus ciudades. Esas son estimaciones oficiales, que de cualquier manera, que tienden a estar en el mínimo. Las estimaciones en Moscú variaban mucho, entre 5.000 y 100.000 personas. La mayoría de los manifestantes eran adultos jóvenes, marca de un recambio generacional sucediendo en Rusia", explica el portal de la plataforma Stratfor. "Creo que estamos viendo el comienzo de un movimiento jóven de protesta", dijo Anatoly Golubovsky, historiador ruso, según el diario The New York Times.
Las manifestaciones eran en parte un esfuerzo de Navalny por forzar al Kremlin a que lo deje competir en la elección presidencial de marzo 2018, a pesar de que según el NYT tiene cero chances de ganar. Navalny tiene una condena que le impide participar, aunque él asegura que detrás de ella hubo una motivación política.
Según Stratfor, las protestas de ayer en Rusia demuestran un cambio fundamental: la creciente voluntad de los rusos jóvenes de involucrarse en la acción política, así como la voluntad gubernamental de utilizar los arrestos masivos para impedirlo. "Y a pesar de que la conmoción política reciente no es suficiente para sacar a Putin de su puesto, sentará las bases para un cambio en el mapa político ruso más hacia adelante." Las protestas podrían impulsar pequeñas victorias en elecciones regionales que perjudicarían la mayoría del Presidente. Lo que es aún más importante, el sentimiento de los manifestantes está enraizándose y podría terminar obligando al Kremlin a cambiar su comportamiento en algunos aspectos.
A diferencia de las protestas masivas que hubo en Rusia en 2011-2012, explica Stratfor, que habían sido desatadas por una serie de eventos singulares durante la campaña electoral y habían sido en parte apoyadas financiera y técnicamente por Occidente, las protestas de ayer y otra que había habido en marzo, "crecieron orgánicamente de una serie de quejas profundamente arraigadas con respecto a la corrupción gubernamental, la falta de democracia y las condiciones económicas estancadas."
Mientras tanto, el cineasta estadounidense, Oliver Stone, estrenó su documental con entrevistas a Putin. Stone mantuvo entre julio de 2015 y febrero de 2017 un contacto único con el Presidente ruso del que nació el documental de cuatro horas "The Putin Interviews", que se comenzó a emitir ayer (y seguirá hasta el jueves) por el canal estadounidense Showtime. Stone ha sido acusado de ser demasiado condescendiente con el líder ruso. Según The Daily Beast, el documental es una "carta de amor tremdamente irresponsable" al Presidente ruso. "Dice tanto de Oliver Stone como de Vladimir Putin", escribió la CNN.
"Stone le da a Putin una plataforma para versiones halagadoras de la agresión de su Gobierno a Ucrania; el trato que le brinda a los partidos de la oposición; la protección a Edward J. Snowden, el soplón de la Agencia de Seguridad Nacional (en 2016, Stone había dirigido una película biográfica sobre él)", escribió James Poniewozik de The New York Times.
El punto que quiere mostrar Stone, acusado de humanizar al Presidente ruso, es que el mundo está lleno de cosas preocupantes, ambos lados tienen malas intenciones, y demonizar a Putin -y por extensión, a Rusia- es peligroso y equivocado. Así defendió Stone al sistema del Kremlin en entrevista con The Guardian: "Tienen libertad de culto, hacen lo que quieren. Viajan, el pueblo ruso nunca ha estado mejor. Pero por supuesto que en Estados Unidos, ellos (los rusos) son miserables, están bajo dictadura, en campos de concentración, en gulags, están siendo todos decapitados por este monstruo. Es muy loco", dijo Stone, en relación al estereotipo que plantearían los medios occidentales de una realidad alternativa en Rusia.
En ocasión de la presentación del documental, Stone se presentó en el Late Show de Stephen Colbert. Allí, Stone planteó en relación a Putin: "Es un jefe de Estado. Tiene sus propios intereses rusos. Lo respeto por eso, y entiendo por qué lo hace. Es un nacionalista fuerte." Por otro lado, agregó: "Creo que está dedicado a su país, y admiro su calma, y como dije, su cortesía. Nunca dijo nada malo sobre nadie. Y realmente ha pasado por muchas cosas, ha sido insultado y abusado..."
El conductor del programa le preguntó entonces irónico: "¿Hay algo negativo de él? ¿O es que tiene a tu perro encerrado en una jaula en algún lado?" Es que para algunos, Stone está como hechizado con Putin y le está siendo funcional a un líder extremadamente cuestionado por sus acciones expansionistas hacia afuera y su represión hacia adentro. Para otros, en cambio, consiguió mostrar otra cara del jefe de Estado más demonizado por Occidente.