River es el Campeón de la Copa Ciudad de Mar del Plata

Desde el inicio de las acciones River se mostró más rápido y enchufado. Como si no hubiese cortado la temporada porque no se notó la dureza del trabajo de Verano. Fue como que cada uno vivió un mundo diferente en la primera parte, desconociendo exactamente en que etapa de la preparación están los equipos y cual es la prioridad para esta etapa del verano.

A veces unos prefieren estar más veloces y otros buscar mas resistencia, dejando para el final de la pretemporada los ejercicios de soltura. La verdad, lo desconocemos pero lo que reflejaron fue claro. Los movimientos de Racing se vieron muy lentos y los de River, todo lo contrario. Lo bueno del caso para los 'millonarios' fue que esta velocidad pudo ser combinada muchas veces con presición en ataque y con pelota al pie.

En este contexto se destacó Alejandro Domínguez, factotum de todos los avances de River, muy bien acompañados por Funes Mori y Ocampos. Racing en un par de situaciones tomó a River abierto en defensa pero la lentitud de Moreno y Gutierrez hicieron que River reponga de la mala cobertura.

Igualmente a River le bastó para manejar la primera mitad con absoluta comodidad ante un rival que se vio sobrepasado. Racing no hizo pie en la cancha y River lo hizo resaltar aún más debido a su buen desempeño. El tempranero gol de Funes Mori abrió el partido pero River no se conformó. Eso fue lo bueno de la primera mitad del lado de River que dominó absolutamente el juego hasta los 25'.

River se fue al descanso con la ventaja por la mínima aunque Racing pudo empatarlo con una esporádica escapada de Giovanni Moreno que no estuvo certero a la hora del remate final, luego de quitarse de encima al defensor Maidana. A esa altura River había aflojado un poco el ritmo y por eso la 'Academia' se le fue encima, pero en el final de nuevo tomó el control y pudo estirar  cifras en los minutos finales. Fue increíble el gol que se tragó Cavenaghi cuando quedó sólo delante de Saja. El delantero eligió esta vez mal la definición.

En síntesis, defensivamente, River fue un tanto vulnerable en el primer tiempo lo mismo que en el semestre del Nacional B. Algo que deberá seguir mejorando el entrenador Almeyda para no pasar sobresaltos. River puede controlar las acciones, sacar ventajas transitorias en los resultados, aunque su mal posicionamiento defensivo muchas veces suele traerle dolores de cabeza.

El inicio del complemento mostró de nuevo a River muy ambicioso y a Racing timorato. Dio la impresión que River quiere hacerle sentir a todos el rigor por la humillación interna que siente por ser hoy de la B. Esto le duele pero lo potencia para encarar estos partidos ante los Grandes de Primera.  River encaró este juego con una actitud para nada amistosa, como bien podrían tomarlo los demás. Sería lo normal, además.

Cuando se jugaban los 20' del segundo tiempo, River siguió siendo el dominador del juego y la pelota aunque no tuvo profundidad. La verdad es que los ataques sólo se convirtieron en avances, que no es lo mismo. Aca sí que entró a tallar el desgaste, hasta el punto que le pasó la factura al chico Ocampos, que tuvo que dejar el campo por una dolencia muscular. Normal a esta altura del año cuando se empieza a competir y se le adosa una gran carga emocional y física.

Racing siguió en su actitud pasiva y sólo dependió de algunas 'pinceladas' del discontinuo colombiano Giovanni Moreno.  A esta altura del partido Almeyda comenzó a cuidar futbolistas y por eso le dio salida a Cavenaghi y Domínguez y esto le dio lugar a Trezeguet de debutar con la camiseta millonaria.

En el tramo final, la intensidad del juego decayó. Decayó porque River no tuvo la intensidad que mostró a lo largo de casi toda la noche y porque Racing siguió sin cambio de ritmo y sin ideas claras para llegar hasta el arco de Vega.  Pero todavía le quedaba una bala en el cargador a Trezeguet que anotó su primer gol con la casaca de River. El uruguayo Sanchez le abrió el balón al francés y este batió por lo bajo a Saja.

Y el partido se despertó definitivamente en el final porque luego del segundo gol de River llegó un penal que le cometieron a Gutierrez y que este cambió por gol. River pasó a ganar sólo 2-1 y le dio más emoción al cierre de la noche. Cuando todo parecía que caía en un pozo, los goles de Trezeguet y Gutierrez le regalaron a la noche goles y una mejoría respecto de los espectaculos de Verano anteriores que fueron muy pobres.

Finalmente River ganó y se quedó con la Copa Ciudad de Mar del Plata. Nada importante aunque tampoco está tan mal para templar el espírutu, mimarlo un poco, antes de la hora de la verdad...