Monti con todo: Será primer ministro y ministro de Economía

El tanto, el gabinete del nuevo primer ministro estará formado por tecnócratas, expertos, profesores y académicos. La misión principal de "SuperMario" (como se lo apodó) será salvar a Italia del abismo en el que se encuentra, debido a su colosal deuda pública equivalente al 120% del PBI y su estancamiento económico.

Después de reunirse por más de dos horas en el Palacio del Quirinal -sede de la presidencia- con el jefe de Estado, Giorgio Napolitano, Monti aceptó oficialmente el encargo de primer ministro. Y en medio de gran expectativa mediática, leyó ante las cámaras la lista de ministros de su Ejecutivo, formado no por políticos, sino por tecnócratas.

Formado en tiempos récord, el gobierno de Monti jura esta misma tarde, siempre en el Palacio del Quirinal y entre mañana y pasado deberá someterse a un voto de confianza en el Parlamento, tal como prevé la hoja de ruta constitucional.

Bajo el signo de la austeridad, el gabinete de Monti tendrá solamente 12 ministros, a diferencia del anterior gobierno de Berlusconi que tenía 23. Además, tres mujeres en ministerios clave: Interior, Justicia y Trabajo. No se trata de "velinas" -chicas jóvenes del mundo del espectáculo, como en el gobierno del Cavaliere-, sino nombres de peso: Anna Maria Cancellieri, de 67 años, con gran experiencia en cargos al servicio del Estado, será la nueva ministra del Interior; la abogada penalista Paola Severino será ministra de Jusiticia; y Elsa Fornero tendrá la cartera de Trabajo.

Además, nombró en un cargo clave, como ministro de Desarrollo Económico e Infraestructura, a Corrado Passera, un banquero muy conocido, CEO del Banco Intesa Sanpaolo, uno de los más importantes de Europa. "Quise hacer un único ministerio de Desarrolo Económico para que se puedan hacer iniciativas coordinadas para el crecimiento y el desarrollo", dijo Monti.

"Llegué a la conclusión de que la ausencia de políticos facilitará la acción de mi gobierno", también explicó este economista, presidente de la Universidad Bocconi de Milán, que destacó la existencia de una "dialéctica muy vivaz" entre las fuerzas polítcias, un eufemismo para decir que hay grandes tensiones entre las fuerzas de derecha e izquierda.

Al anunciar su gabinete, Monti tuvo palabras de deferencia hacia el premier saliente, Silvio Berlusconi: "Saludo con respeto y atención a Silvio Berlusconi por el trabajo llevado a cabo", dijo. Monti designó como canciller al embajador en Washington, Giulio Terzi Sant'Agata; ministro de Educación, el académico Francesco Profumo, que fue rector del famoso Politécnico de Turín; titular de Cultura, Lorenzo Ornaghi, rector de la Universidad Católica de Milán; en la cartera de Ambiente, Corrado Clini; en Defensa, el almirante Giampaolo Di Paola; en Salud, a Renato Balduzzi; y en Agricultura, a Mario Catania.

Además, nombró a cinco ministros sin cartera: Enzo Moavero Milanesi, para Asuntos Europeos; Piero Gnudi, en Turismo y Deporte; Fabrizio Barca, para Cohesión territorial; Piero Giarda, para las Relaciones con el Parlamento; y Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de San Egidio -un movimiento católico presente en todo el mundo, incluso en la Argentina-, para Cooperación Internacional.

Monti anunció que propondrá en su primer Consejo de Ministros la designación de Antonio Catricalá, actual presidente del Antitrust, como subsecretario a la presidencia del Consejo.