Giuliano Simeone tiene un récord envidiable para cualquier futbolista. Dos goles en dos partidos jugados con la Selección Argentina. Fue una de las figuras en el encuentro que la Sub 23 de Javier Mascherano le ganó este lunes a Paraguay, en un amistoso preliminar de cara a los Juegos Olímpicos de París 2024.
RUMBO A PARÍS 2024
Así juega Giuliano Simeone, el hijo del Cholo que hace dudar a Mascherano
Obstinación, potencia, destreza. Giuliano Simeone le pone las cosas difíciles a Mascherano, que debe decidir si lo lleva a los JJ.OO de París 2024.
10 de junio de 2024 - 22:04
Giuliano Simeone
Para Simeone, el hijo menor de los tres que tiene el Cholo, es una oportunidad única. Se trata de su primer convocatoria a la Albiceleste. Con este llamado, comienza a desandar el mismo camino que siguió su padre y su hermano mayor. Papá Diego es el sexto jugador con más presencias en la Selección Argentina. Fueron 104 partidos y tres Mundiales, todo un emblema. Giovanni también tuvo su recorrido. Fue parte de la delegación nacional en los JJ.OO de Río 2016, y tuvo algunas convocatorias a la Mayor.
Regreso, protagonismo y llamado a la Selección
Para Giuliano, este 2024 no puede ir mejor. A principios de año volvió a jugar tras una grave lesión que lo dejó afuera de las canchas unos cinco meses. Ocurrió en agosto de 2023, en un amistoso que disputaba su equipo, el Deportivo Alavés, ante Real Burgos. Se fracturó la tibia y el peroné y se luxó el tobillo. Debió salir en ambulancia del estadio. "Fue un año donde aprendí muchísimas cosas, crecí tanto en lo personal como futbolista", dijo el chico a su regreso.
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Simeone quería volver a jugar. No solo por sus ganas, no solo por el deseo de un juvenil de 21 años que quería demostrar que podía, no solo por su motivación de volver a compartir con sus compañeros el día a día. También porque su equipo lo necesitaba. El Alavés, club donde está a préstamo, se jugó mucho esta última temporada en la Primera División de La Liga. Coqueteó con el descenso, pero terminó salvándose. Y el argentino fue importante.
"Giuliano Simeone está teniendo un gran impacto en el Alavés. Viene de hacer un partidazo vs. Atlético y hoy vs. Celta ha marcado el 1-0, ha forzado el error de Mingueza en el 2-0 y ha provocado la falta del 3-0. Pelea todas las jugadas y trabaja muchísimo en defensa. Es una piraña", decía el periodista español Adrián Blanco a fines de abril pasado.
VIDEO: Así juega Giuliano Simeone
Un gol y dos asistencias son las estadísticas del argentino esta temporada. Números que, así de sueltos, no parecen significar demasiado. Sin embargo, y tal como lo señala el colega de España, el poderío de Simeone es muy grande y se extiende a distintas fases del juego, que no tienen que ver exclusivamente con la red o con un pase gol. No obstante, esa doble faceta también dice algo: hace goles, pero también sabe encontrar libre a sus compañeros para asistirlos.
Giuliano heredó la obstinación de su padre. Una obstinación de la que se sirve para pelear una pelota dividida, no dar por perdida la posesión, capturar un rebote o reventar el arco si la pelota queda boyando cerca del arco.
Es aguerrido, y tiene mucha potencia física, que utiliza para ser fuerte en los duelos contra los rivales. No es un jugador que se caracterice particularmente por ser vistoso, pero cuando toma la pelota con el arco de frente y en situación de ataque, parece un robot programado con un único objetivo: el arco rival.
Potencia en un cuerpo atlético son características que conforman un Simeone con capacidades llegadoras. ¿O sea? Pisa el área. Suele arrancar fuera de ella, colaborando en la creación del juego colectivo, pero jamás se desentiende de la jugada. Si avanza, el también lo hace. Si se acerca al área, comienza su carrera para estar él ahí también.
Y logra combinar esas cualidades con otra herramienta que cuaja perfecto en el tablero de ajedrez de su cabeza: la lectura. El joven es bueno entendiendo posibles trayectorias de la pelota, ya sea por un pase largo, un centro al área, un pase de un compañero o una segunda jugada. Cuando Giuliano termina por anticiparse, encuentra espacios que explota en velocidad.
Gondou, Beltrán y... ¿Simeone?
Dado que se trata de la primera convocatoria de Mascherano, parecería que el Cholito corre de atrás contra Lucas Beltrán o Luciano Gondou. Tiene características similares a ellos, aunque su versatilidad le permite jugar más cerca del área pero también por las bandas. De hecho, el mapa de calor de la temporada en Alavés lo muestra más como un extremo por izquierda. El elenco español hará todo por intentar retenerlo, ya que a fin de mes se le termina su préstamo y debe volver al Atlético de Madrid, club donde pertenece y donde su padre es leyenda viva.
"Estoy muy feliz y agradecido, pero no es momento de pensar en ello. La decisión la tiene el destino", le dijo a una periodista en mayo sobre su continuidad en el Alavés. Simeone tiene otras cosas que pensar también. París 2024 está a la vuelta de la esquina.
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