Un estudio reciente reveló que las 28 ciudades más pobladas de Estados Unidos están experimentando hundimiento del suelo debido principalmente a la extracción de agua subterránea. Este fenómeno afecta tanto a las ciudades costeras como a las del interior, lo que podría generar graves problemas para la infraestructura urbana si no se toman medidas preventivas a tiempo.
USA BAJO TIERRA
Las grandes ciudades de Estados Unidos se están hundiendo y la razón es alarmante
Las 28 ciudades más pobladas de Estados Unidos se están hundiendo, incluso las del interior, a un ritmo preocupante. Un estudio revela detalles inquietantes.
Estados Unidos: cuando el suelo empieza a ceder
Un informe reciente publicado en Nature Cities sorprendió al revelar que las 28 ciudades más pobladas de Estados Unidos están siendo afectadas por el mismo fenómeno: el hundimiento del suelo. Este problema afecta no solo a ciudades costeras como Miami, Nueva Orleans y Los Ángeles, sino también a otras como Chicago, Dallas y Denver, que están más alejadas del mar.
Las principales causas de este hundimiento son la extracción excesiva de agua subterránea para abastecer tanto a las poblaciones como al sector comercial e industrial. Según los autores del estudio, como el investigador Leonard Ohenhen de la Universidad de Columbia, el 80% del hundimiento en las ciudades estudiadas es causado por el uso de agua subterránea. Al extraer agua de los acuíferos, los suelos se compactan y, sin el agua para llenar los espacios vacíos, el terreno empieza a ceder.
De las 28 ciudades analizadas, algunas tienen tasas de hundimiento alarmantes. Houston, por ejemplo, tiene más del 40% de su territorio hundiéndose a más de 5 mm por año, y en algunas zonas locales, como cerca del aeropuerto LaGuardia de Nueva York, se alcanzan hasta 5 cm anuales. Las ciudades de Texas como Fort Worth y Dallas no se quedan atrás, también con tasas de hundimiento que superan los 4 mm por año. Otras ciudades afectadas por este fenómeno son Indianápolis, Filadelfia, Phoenix, San Antonio, Seattle y Detroit. El hundimiento puede parecer poco significante a simple vista, pero las consecuencias serían graves en cuestión de años, y podría generar grandes inconvenientes.
Inundaciones y grietas: el otro lado del hundimiento
El gran problema no es solo que las ciudades se hundan, sino que el hundimiento no es uniforme. En algunas zonas de la ciudad, el terreno baja más rápido que en otras, o incluso hay áreas donde el suelo sube mientras otras partes se hunden. Este fenómeno de movimientos desiguales es preocupante porque puede afectar la infraestructura urbana de manera muy peligrosa. En palabras de Ohenhen: "Si el terreno se mueve de manera uniforme, el riesgo es menor, pero si las variaciones son grandes, los edificios pueden inclinarse o sufrir daños estructurales".
Por ejemplo, en Nueva York, alrededor del aeropuerto LaGuardia, el hundimiento es más rápido que en el resto de la ciudad, y en zonas como San Francisco o Washington, D.C. también se detectaron zonas de hundimiento localizadas. Las consecuencias de estos movimientos desiguales son tilteo de edificios y daños a carreteras y vías de ferrocarriles. Este tipo de deformación del terreno fue uno de los factores que contribuyó al colapso de un edificio en Miami en 2021.
Además, el hundimiento de las tierras puede generar lo que los investigadores llaman un "bolsón de subsistencia", donde el agua de lluvia queda atrapada, aumentando el riesgo de inundaciones urbanas. "Antes, cuando el terreno era plano, el agua fluía de un lugar a otro sin problemas, pero ahora, con el suelo hundido, se queda atrapada, y eso genera grandes problemas", explica Ohenhen. Este fenómeno se puede observar en ciudades como Chicago, Portland, Indianápolis y Nashville, que también están lidiando con inundaciones más frecuentes debido al hundimiento del suelo.
Lo que más preocupa a los expertos es que 29.000 edificios en las 28 ciudades estudiadas están ubicados en áreas donde el riesgo de hundimiento es alto. Esto no quiere decir que todos estos edificios vayan a colapsar, pero sí hay una probabilidad mucho mayor de daños estructurales. En ciudades como San Antonio o Austin, por ejemplo, se estima que 1 de cada 45 edificios está en una zona de alto riesgo.
¿Qué se puede hacer?
El estudio propone algunas soluciones para mitigar el impacto del hundimiento. Una de las principales es elevar el terreno en áreas vulnerables para prevenir inundaciones, mejorar los sistemas de drenaje y crear infraestructura verde que ayude a absorber las aguas de lluvia. Además, es fundamental que las ciudades actualicen sus códigos de construcción para adaptarse a los movimientos del suelo y que se limite la construcción en las zonas más afectadas.
La clave, según Ohenhen, es que las ciudades actúen rápidamente: "En lugar de solo reconocer el problema, hay que responder, adaptarse y buscar soluciones". Es fundamental que se realicen estudios más detallados para saber con exactitud en qué zonas es más urgente intervenir y cómo se pueden aplicar medidas eficaces.
Este estudio, realizado en colaboración con instituciones como Virginia Tech, la Universidad de California en Berkeley y la Universidad de Colorado, debería servir como una alerta para todas las ciudades del mundo, no solamente las más grandes, para enfrentar este problema que afecta a la infraestructura urbana y, por supuesto, la calidad de vida de sus habitantes.
-------------------------------------------------------------------
Más contenido en Urgente24
La miniserie de 5 capítulos que anunció Netflix y ya causa sensación
La miniserie de 10 capítulos que la crítica califica como "adictiva"
Cómo comprar dólares y retirarlos por cajero automático con los nuevos límites
Aerolínea inaugura ruta al exterior sin pisar Buenos Aires
Nueva desregulación elimina requisitos para armas y avanza la "reutilización"