En una jugada financiera clave, Arcor S.A.I.C. anunció este lunes 21 de julio de 2025 el rescate total anticipado de sus Obligaciones Negociables Clase 18, con vencimiento previsto para noviembre de 2027. La operación se inscribe en una estrategia de reestructuración financiera con impacto tanto local como internacional, dado que los bonos fueron emitidos bajo ley de Nueva York.
LICITACIÓN EL 23/07
Arcor busca US$ 300 millones para reestructurar deuda mientras sube el riesgo país
Arcor lanza un rescate de bonos por USD 300 M. Busca salir del radar financiero en plena tensión por el riesgo país.
La nueva emisión de deuda será licitada mañana, miércoles 23 de julio. Se trata de una licitación de ON en dólares por US$ 300 millones, hasta US$ 400 millones. Contará con ley Nueva York y vencimiento a ocho años. El interés se pagará semestralmente y la amortización será en tres cuotas anuales.
La empresa argentina, líder en la industria alimenticia, informó que el rescate se ejecutará el próximo 31 de julio, siempre y cuando se cumpla dicha condición: concretar una o más transacciones de financiamiento de deuda que le permitan recibir ingresos netos por al menos US$ 300 millones durante la licitación del 23/07. En caso contrario, la operación será cancelada automáticamente.
Los títulos en cuestión, emitidos originalmente con una tasa fija del 8,25%, serán redimidos al 100% de su valor nominal, más los intereses devengados desde el último pago en abril hasta el día anterior al rescate. El agente de pago designado para el proceso es The Bank of New York Mellon, y los bonos deberán ser entregados conforme a los procedimientos establecidos por el sistema DTC.
Riesgo país y acceso al crédito
Esta movida ocurre en un contexto donde el riesgo país argentino se mantiene elevado —en torno a los 763 puntos básicos— y el acceso al crédito internacional para empresas locales es limitado. Sin embargo, Arcor se diferencia por su perfil financiero sólido dentro del panorama corporativo nacional y por mantener presencia activa en los mercados internacionales de capital.
Con esta operación, la compañía no solo busca mejorar su perfil de deuda, sino también reforzar su posicionamiento frente a inversores globales en un escenario de alta sensibilidad económica. Cabe destacar que esta decisión llega tras un semestre donde varias empresas argentinas recurrieron a estrategias similares para optimizar sus estructuras financieras ante la incertidumbre macroeconómica y los desafíos cambiarios.
Arcor demuestra así una voluntad de orden en la gestión de pasivos, en línea con su historial de solvencia. Aún resta ver si la condición suspensiva se cumplirá en tiempo y forma, y si el mercado interpreta esta maniobra como una señal de solidez o una advertencia frente a futuras necesidades de financiamiento.