La Dirección de Fiscalización del municipio informó en las últimas horas que procedió ayer a la clausura de un supermercado mayorista ubicado en avenida Alberto Pedro Cabrera 4162. Se trata de Makro, en el cual los inspectores detectaron la presencia de heces de roedores en sector de depósito y en salón de venta debajo de los pallets (infracción a Art. 18 inc 6 y 14 CAA).
PLAGAS
Clausuran el supermercado Makro por presencia de ratas
Según el Municipio, el hallazgo de heces de roedores en un sector del supermercado delató la presencia de ratas.
También se informó que fueron destruidos algunos productos que estaban vencidos en su lapso de aptitud. Por último, que al momento de la inspección no se pudo acreditar el certificado de control de plagas a cargo de una empresa especializada.
Algunas fuentes mencionaron que se trató de un procedimiento de rutina y que los productos vencidos eran pocos para la magnitud de lo que se comercializa. Desde el comercio deben subsanar las irregularidades, pedir una nueva inspección ante el Juzgado de Faltas y que los agentes constaten que está todo en orden.
La palabra de la empresa encargada del control de plagas
Sandra Sapoznik, una de las dueñas de Umplagged, la empresa con sede en Ingeniero Luiggi 1448 que está encargada del control de plagas en Makro, el mayorista clausurado este martes por la Dirección de Fiscalización del municipio por la presencia de ratas, realizó su descargo al medio La Brújula24.
la empresaria se refirió a la detección de heces de roedores en sector de depósito y en salón de venta debajo de los pallets del local sito en Avenida Cabrera al 4100.
Sapoznik afirmó que no es cierto que, al momento de la inspección, Makro no haya podido acreditar el certificado de control de plagas. “La documentación estaba, la tenían el gerente y los encargados. Se envía en forma digital y física y fue presentada a los inspectores”, afirmó la empresaria, y agregó que la misma certificación fue llevada en persona al Juzgado de Faltas.
“Está todo al día. Lo que se encontró son excrementos viejos en un área de comidas de mascotas donde había bolsones rotos. No es la zona de mercadería con alimento humano y tampoco es verdad que se haya decomisado mercadería para consumo humano. Eran dos sachet de yogurt que estaban para devolución”, agregó.
Sapoznik explicó que si bien no es infrecuente que ingresen roedores en este tipo de construcciones, aclaró que “no es por falta de limpieza del cliente o de observación de nuestra parte”. “Es un trabajo en conjunto el que se hace. Por eso salimos en defensa del trabajo que hacemos desde hace muchos años con este cliente”, finalizó.
Más noticias en Urgente24
AFIP cierra cuentas en dólares: Por qué y a quiénes afecta
Mercado Pago en alerta por comprobantes de transferencias
Aerolíneas Argentinas y el nuevo avión al que apunta