El uso obligatorio de la abaya –túnica larga y negra que cubre a las féminas de la cabeza a los pies, con solo sus ojos al descubierto–, la segregación del género femenino en los espacios públicos y el sistema legal de tutelaje masculino que impide a las saudíes su autonomía en lo que respecta a la toma de decisiones, exhibe que dichas mujeres no tienen los mismos derechos humanos que sus conciudadanos varones.
REVOLUCIÓN FEMENINA
MDL Beast Soundstorm, música electrónica "sin velo" en Oriente
El multitudinario festival de música MDL Beast Soundstorm en Arabia Saudita, tiene como protagonistas a las mujeres árabes despojadas del velo.
Las leyes islámicas en Arabia Saudita han venido siendo paulatinamente flexibilizadas por la mentalidad más abierta del príncipe heredero a la corona saudí y primer ministro, Mohamed bin Salman, quien ha sido el impulsor de “Visión 2030 de Arabia Saudita” –serie de reformas político económicas que vienen transformando lentamente a la sociedad saudí para dar una apertura al turismo, generar inversiones extranjeras y cambiar la imagen conservadora del Reino– además de haber promovido grandes eventos multitudinarios de música como la MDL Beast Soundstorm en donde las mujeres árabes se codean con los hombres y gozan de la libertad de prescindir del velo, con sus pelos al viento.
Este festival de música, el MDL Beast Soundstorm -cuarta edición- , aconteció el 1, 2 y 3 de diciembre del 2022 en el desierto de Riyadh durante tres días, con grandes nombres internacionales como Bruno Mars, David Ghetta, Mashmello, Post Malone y Dj Khaleb; y más de 200.000 espectadores diarios, superando al gran festival de música electrónica belga Tomorrowland, el cual necesitó nueve días para conseguir las 730.000 personas del público que el MDL Beast Soundstorm alcanzó solo en tres días.
Como una gota que orada la piedra, las árabes y algunos políticos vanguardistas saudíes están forjando poco a poco varias micro revoluciones femeninas, dejando atrás la falaz visión retrógrada de que el Islam pregona por mujeres tapadas y obedientes. Así, un grupo de chicas que se van acercando a la puerta de ingreso del MDL Beast Soundstorm, se liberan de los velos y hiyab para ser una más del montón, al ritmo de la música electrónica y rodeadas fraternalmente de hombres (de los que habitualmente están separadas en las mezquitas y piscinas), con los que eufóricamente hacen el pogo, inaugurándose una zona liberada de los mandatos sociales. Tal como la pionera DJ saudí Cosmicat, quien desechó el torno de dentista para pinchar discos.
Un granito de arena
Unos 200 artistas se presentaron en los siete escenarios repartidos en los 5.533.985 metros cuadrados del desierto de Riyadh, en vísperas de los tres días de dicha Creamfield árabe, con más de 100 vendedores de alimentos y bebidas no alcohólicas a disposición del público multicultural. No se comercializa alcohol debido a que la cultura musulmana tiene prohibido el consumo del mismo en base al Corán.
"Tenemos que pensar dónde estamos, en Arabia Saudí, y que solo el hecho de que haya un festival así en este país es un gran avance. Hay que repasar que hay, al menos, una DJ por escenario", destacó una de las Dj, la treintañera española, Beatriz Martínez, que junto a Brian Cross son los únicos performers de España en MDL Beast Soundstorm. También, en dicho festival de música en Oriente estuvo la actriz española de la serie La Casa de Papel y Élite, María Pedraza, entre otros famosos que se regocijaron con los sonidos eclécticos en sus palcos VIB (Very Important Beasts) y suites VIB con vallet parking incluido.
El derecho al voto femenino (2015), a que las saudíes conduzcan automóviles (2018), la posibilidad de crear una empresa sin tutela masculina y que puedan salir del país sin requerir autorización de un varón -una vez cumplidos los 21- (2019), van cerrando la brecha desigual entre los pocos derechos de las féminas con respecto a los hombres, aunque ellas aún siguen continuamente vigiladas por la policía religiosa (mutawa).
Es claro que existe un cierto avance político-social con respecto a los DD.HH. en Arabia Saudita, como una máscara ilusoria avizorando un futuro de apertura turística al Occidente, comparándolo con el ejemplo catarí del Mundial 2022. Aunque, el arduo camino popular para lograr la meta de la igualdad real ante la ley entre las y los saudíes tiene momentos de victoria que pasan mundialmente desapercibidos: en la última función de Bruno Mars en MDL Beast Soundstorm, una de las pantallas gigantes mostraron los colores de la bandera LGGTB en una nación en donde ser gay tiene la pena capital.
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