El mercado de vehículos eléctricos vivió el viernes (3/1) una jornada de alto voltaje. Rivian Automotive (RIVN) sorprendió al mercado con una suba del 24,45% en sus acciones tras anunciar entregas trimestrales que superaron las previsiones.
Sin embargo, el panorama no es igual para todos. Tesla (TSLA), la gran referencia del sector, arrancó 2025 con un descalabro en sus papeles, cayendo más del 6% luego de que sus entregas trimestrales no alcanzaran las expectativas. Este contraste marca un cambio de ritmo en una industria que enfrenta desafíos crecientes y un terreno competitivo más complejo.
Rivian: Señales de vida en un contexto adverso
Rivian, que llegó al mercado con bombos y platillos en 2021, atravesó una caída estrepitosa en los últimos años. Desde sus máximos históricos por encima de los 100 dólares, sus acciones se desmoronaron casi un 90%. En 2024, el balance fue poco alentador: una baja del 40% respecto al cierre del año anterior. Sin embargo, el desempeño del cuarto trimestre abre una ventana de esperanza para la empresa respaldada por Amazon.
La compañía no la tuvo fácil. A los problemas globales de escasez de chips se sumó un contexto donde el entusiasmo por los vehículos eléctricos comenzó a apagarse, justo cuando la competencia con gigantes como Tesla se intensificaba. Frente a este escenario, Rivian implementó una estrategia de ajuste agresiva: recortes de personal y rediseño de componentes para reducir costos.
Aunque los resultados financieros todavía no acompañan, las cifras de entregas parecen indicar un cambio de rumbo. Tom Narayan, analista de RBC Capital Markets, destacó que los problemas de suministro que afectaron el tercer trimestre quedaron atrás. Sin embargo, el escepticismo persiste. Narayan mantiene una postura neutral y proyecta un precio de 12 dólares para las acciones, mientras que Garrett Nelson, de CFRA, continúa recomendando la venta, con un precio objetivo de apenas 8 dólares.
Tesla: Un tropiezo que sacude al mercado
En el otro extremo del tablero, Tesla enfrenta uno de los momentos más críticos de su historia. Sus entregas del cuarto trimestre alcanzaron 495.930 unidades, un número que, aunque superior al trimestre anterior, quedó por debajo de las estimaciones de los analistas, que esperaban 510.400.
El verdadero golpe llegó con el balance anual: 1,78 millones de vehículos entregados en 2024, una cifra inferior a los 1,8 millones proyectados y marcando la primera contracción interanual en la historia de la empresa. Para una compañía que acostumbró al mercado a un crecimiento compuesto del 50% anual, este retroceso es un mazazo a la narrativa de expansión perpetua que había sostenido Elon Musk.
La reacción no se hizo esperar. Las acciones se desplomaron más del 6%, reflejando la decepción de inversores que empiezan a cuestionar la capacidad de Tesla para mantener su liderazgo en un sector cada vez más competitivo.
Un sector en transformación
Lo que sucede con Rivian y Tesla es un síntoma de un mercado que ya no es el mismo. La época de oro de los vehículos eléctricos, alimentada por incentivos fiscales, entusiasmo inversor y una demanda insaciable, parece haber quedado atrás. La competencia crece, no solo desde startups como Rivian o Lucid, sino también desde las automotrices tradicionales, que están acelerando su transición hacia la electrificación.
Por su parte, Tesla enfrenta un doble desafío. No solo debe lidiar con una caída en la demanda y mayores costos, sino también con la pérdida de confianza en su capacidad para cumplir con las expectativas que ella misma generó. Rivian, en cambio, parece haber encontrado un punto de inflexión.
----------------------
Más contenido en Urgente24
La miniserie de Netflix que está enamorando a todos con solo 10 episodios
Netflix: Cómo usar los códigos secretos para desbloquear el contenido escondido
Netflix tiene la miniserie de 6 episodios que todo el mundo recomienda
Netflix tiene la miniserie de 4 episodios que tenés que ver cuanto antes