En algún momento de nuestra vida, todos buscamos o encontramos el amor. Pero, ¿cómo identificar si la pareja es sana o no? En una primera instancia, es fundamental indicar que el respeto por uno mismo y por los demás es una característica clave de las relaciones saludables. Por el contrario, en las relaciones poco saludables, uno de los miembros de la pareja intenta ejercer control y poder sobre el otro física, sexual y/o emocionalmente.
PSICOLOGÍA POSITIVA
Amor: cuáles son las cualidades de una pareja sana
En el terreno del amor, a veces tenemos dudas acerca de las actitudes de nuestra pareja. Por eso, no hay que olvidar las características de una relación sana.
Las cualidades esenciales del amor en una buena pareja
La confianza es absoluta. La confianza en el amor implica estabilidad y consistencia. Ser digno de confianza en una pareja es sinónimo de apertura y voluntad de ser comunicativo. Las cosas son como son y no hay planes ocultos ni engaños.
El compromiso es una promesa al otro de compartir plena e íntimamente los sucesos de nuestra vida. Es una promesa de dedicar atención, tiempo y energía. El compromiso está reservado solo para aquellos que han demostrado que son capaces de quedarse a largo plazo y están listos, dispuestos y capaces de compartirse con nosotros en una pareja.
Respetar se trata del reflejo mutuo de emociones, sentimientos y creencias en el amor. El respeto en una pareja sería sinónimo de: "Lo que veo en vos lo considero tan importante como lo que veo en mí mismo".
La comunicación de la manera más saludable significa que podemos transmitir nuestras emociones, sentimientos y creencias de la manera más satisfactoria, con un propósito común en nuestra pareja. Cuando nos comunicamos libremente, nos sentimos seguros de poder expresarnos plenamente en un entorno de apoyo, aceptación y amor; uno que está en gran parte libre de juicios, críticas e ira.
Autoconfianza. Cuando cada miembro de la pareja tiene confianza en sí mismo, puede ayudar al otro. Demuestra que está lo suficientemente tranquilo y cómodo como para permitir que el otro exprese sus opiniones sin forzar sus propias opiniones sobre los demás.
Relaciones sexuales sanas. Una pareja entabla una relación sexual en la que ambos se sienten cómodos, y ninguno de los dos se siente presionado u obligado a participar en una actividad sexual que está fuera de su zona de confort o sin su consentimiento.