Las Fuerzas Armadas admitieron recientemente interés en un avión particular: el Basler BT-67. Esta antigua configuración basada en los DC-3 fue mencionada en la reciente presentación de dos aviones para la Fuerza Aérea y llamó la atención, ya que sería una aeronave destinada únicamente a tareas en la Antártida Argentina.
Actualmente, las Fuerzas Armadas operan en territorio extra continental con un avión clásico como el Hércules C-130. Sin embargo, la incorporación de un nuevo avión sería necesario para reducir costos operativos.
El interés por los BT-67 fue admitido por el Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas Argentinas, el teniente general Juan Martín Paleo y el Jefe de la Fuerza Aérea, el brigadier Xavier Isaac. Ambos hicieron referencia a la necesidad de incorporar este tipo de aparatos para incrementar las operaciones argentinas en territorio antártico.
La intención sería incorporar dos ejemplares del avión señalado. La financiación para los mismos sería tomada a través de la FONDEF, el mismo fondo que posibilitó la incorporación de los últimos aviones ingresados.
En cuanto al Basler BT-67, se trata de un avión modificado en base a un diseño de 1935. El mismo cuenta con ventajas de costo y mantenimiento, como así también de capacidades operativas por su robustez, algo que le permite aterrizar incluso en glaciares.
Sus configuraciones más extremas permiten al BT-67 alcanzar un rango de vuelo de casi 4.000 kilómetros. Además puede transportar hasta 35 pasajeros y alcanzar unos 390 kilómetros por hora.
Las tareas principales a las cuales sería destinado este avión son la lucha contra el fuego, búsqueda y salvamento (SAR) e incluso misiones de inteligencia, mediante la integración de equipos electrónicos y ópticos de vigilancia. Cabe destacar que dicha aeronave es empleada por casi todos los países con presencia en la Antártida, como así también en zonas heladas del mundo como Alaska y buena parte de Canadá.
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