Neymar y 17 segundos increíbles: abucheo, gol olímpico y festejo provocador

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Neymar y la magia que nunca se fue

Neymar volvió a tierras sudamericanas y Brasil sonríe. El talentoso futbolistas llegó del Al Hilal a préstamo al Santos por 6 meses, que además son los últimos 6 meses de contrato con el club de Arabia Saudita. Hasta mitad de año, el ex Barcelona y PSG forma parte de la plantilla del Peixe. Luego, el futuro ya tendrá tiempo de ubicar a Neymar en otro equipo, a la espera del Mundial 2026 de Estados Unidos, México y Canadá, en lo que será el Last Dance del futbolista con la Verdeamarelha, tal como él mismo ha dicho.

Neymar fue figura y se divierte en Santos

Mientras tanto, el fútbol de Brasil disfruta de su hijo pródigo, que volvió a su tierra natal a hacer las cosas que hacía cuando era un jovencito dando los primeros pasos en el Santos. Cosas como la que hizo este domingo, en el triunfo de su equipo por el campeonato estatal (el Brasileirao no ha comenzado todavía ya que empieza recién en marzo).

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Ney festeja junto a sus compañeros tras el gol olímpico

Un gol olímpico para el recuerdo dejó Neymar cuando, a los 27 minutos del 1T y con el partido 1 a 0 en favor del Peixe. Además del espectacular tanto, en donde el astro le pegó con dirección y fuerza para acomodarla al segundo palo, bien lejos del arquero, todo se dio en una secuencia ciertamente llamativa.

VIDEO: los 17 segundos de Neymar... ¿y los abucheos?

Fueron apenas segundos, pero en esos segundos transcurrió toda la escena que lo tuvo al ex Barcelona como villano y héroe al mismo tiempo. Córner para Santos. Neymar se acerca al banderín para enviar el tiro de esquina. Mientras camina hacia allí, escucha los abucheos que bajan desde la tribuna. Ney, provocativo, se lleva la mano a la oreja como si no escuchara y pide que aumenten la intensidad de los abucheos.

Se dispone a patear el córner. Envía ese pase a la red, con precisión tal para que el arquero rival, Santos Pereira, no tenga oportunidad alguna de desviar la trayectoria de la pelota. Un golazo, el partido 2 a 0 y Neymar sirve el plato de la venganza en frío: se da vuelta y mira a sus detractores en las gradas. Tranquilo, cruza los brazos y los mueve desafiante, como diciendo: ¿Y los abucheos?

Fueron 17 segundos imperdibles. Luego, el partido terminaría 3 a 0 ya que el Santos volvería a marcar. Los otros dos goles del Peixe tuvieron la asistencia de Neymar. Influencia absoluta.

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