El Gobierno de Rusia inició este viernes el mayor ataque aéreo contra Ucrania desde el estallido de la guerra, en represalia por la llamada Operación Telaraña, ejecutada por Kiev contra cuatro de sus aeródromos de bombarderos. Según expertos, tal operación —considerada una hazaña por parte del frente ucraniano— no habría sido posible sin apoyo logístico internacional.
VENGANZA
"Vendetta" de Putin / Rusia: Masivo ataque aéreo en Ucrania
Rusia despliega un brutal contrataque de "ajusticiamiento" contra la infraestructura militar de Ucrania tras la Operación telaraña de Kiev que fue contra el corazón de la fuerza aérea del Kremlin.
06 de junio de 2025 - 13:38
Rusia derrama sangre en venganza
La administración de Vladímir Putin ha lanzado en esta jornada uno de los ataques más masivos desde el inicio de la guerra, con más de 400 drones y medio centenar de misiles de crucero y balísticos dirigidos a prácticamente todo el territorio ucraniano.
- Al menos tres personas murieron y 49 resultaron heridas en los ataques, según informó el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky.
- Los ataques aéreos tuvieron como objetivo Kyiv, la ciudad de Lutsk y la región de Ternópil, en el noroeste del país.
- "Hasta el momento se han confirmado tres muertes; todos eran empleados del Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania", declaró Zelensky.
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De acuerdo con el Ministerio de Defensa ruso, "en respuesta a los actos terroristas del régimen de Kiev", las Fuerzas Armadas de Rusia lanzaron "un ataque masivo" con armas aéreas, marítimas y terrestres de alta precisión y largo alcance, así como vehículos aéreos no tripulados de ataque contra "oficinas de diseño, talleres de fabricación y reparación de armas y equipos militares de Ucrania".
V de Vengaza de Rusia por el "Pearl Harbor" y por Crimea
Rusia confirmó este viernes que ha atacado la industria militar ucraniana, bombardeando instalaciones dedicadas a la producción y reparación de armas, fábricas de drones, depósitos de armamento y centros de reclutamiento. Por su parte, Kiev denuncia que los ataques han afectado zonas civiles e infraestructura energética.
"Kiev, Lutsk, Leópolis, Ternópil, Chernígov, Kremenchuk y otras ciudades. Edificios de varias plantas alcanzados. Infraestructura de energía dañada. Hay muertos y heridos en todo el país", denunció el ministro ucraniano de Asuntos Exteriores, Andrí Sibiga. " Poner a Ucrania y a Rusia en pie de igualdad es inaceptable. Rusia es el agresor y Ucrania se defiende. Los ataques ucranianos son en defensa propia, mientras que las acciones de Rusia son de agresión y terrorismo", añadió, reclamando a la comunidad internacional que eleve las sanciones a Moscú.
La ofensiva aérea rusa de este viernes no sólo es un contraataque contra los supuestos “actos terroristas” perpetrados en las últimas semanas por el frente ucraniano, que ha atentado contra puentes en Crimea —región anexada por Moscú— por donde transita artillería rusa desde territorio del Kremlin.
También se ejecutó, principalmente, en represalía de la reciente operación ucraniana contra cuatro aeródromos de bombarderos estratégicos rusos, uno de ellos ubicado a más de 4.000 kilómetros de la frontera ucraniana, en pleno corazón de Siberia, y otro en el lejano norte, cerca de Múrmansk, en el Círculo Polar Ártico. La prensa ha apodado la ofensiva ucraniana de la semana pasada como la “Operación Telaraña” o incluso “el Pearl Harbor de Moscú”.
El domingo, cerca de 150 drones ucranianos atacaron por primera vez Siberia, apuntando a la flota aérea militar rusa en la aldea de Sredniy, en la región de Irkutsk, así como a otros aeródromos en las regiones de Murmansk (Olenya), Ivánovo (Ivanovo) y Riazán (Diaguilevo). En total, se estima que los drones FPV ( de pilotaje nocturno y visión remota) destruyeron 41 aeronaves de la aviación estratégica rusa, incluidos un A-50, varios Tu-95 y Tu-22M3: una herida sangrante al corazón de la fuerza aérea del Kremlin.
Aparte de ello, Kiev dañó con explosivos la estructura del puente de Kerch en Crimea (región anexada por Rusia), un cruce estratégico utilizado por las tropas del Kremlin para transportar artillería y municiones en su ofensiva contra Kiev, así como atentó contra otros cruces estratégicos rusos:
- En el tramo ferroviario Vygonichi-Pilshino, en la región de Briansk, se derrumbó la estructura de un puente de carretera, cuyos escombros cayeron sobre un tren de pasajeros que pasaba por debajo: heridos y muertos.
- En el distrito de Zheleznogorsk, en la región de Kursk, explotó un puente ferroviario, lo que provocó que un tren en marcha cayera sobre la carretera. Como resultado del incidente, el conductor y sus 2 ayudantes resultaron heridos
"La voladura de puentes en las regiones de Kursk y Briansk son actos de terrorismo. La decisión de llevarlos a cabo se tomó al más alto nivel político. ¿Cómo podemos negociar con terroristas?", declaró el presidente ruso, Vladimir Putin, quien desde la semana pasada ya no está dispuesto a sellar la paz con Ucrania, sino decidido a vengarse por los sabotajes y el martirio de su fuerza aérea.
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