Córdoba se encamina a una lluvia de vencimientos en dólares

A pesar de la sequía provocada por la ruptura de la cadena coparticipativa, en las últimas horas la administración de Llaryora honró un nuevo vencimiento de poco menos de 11 millones de dólares correspondiente al servicio número 32 de renta y del 24 de amortización del CO26. Se trata de un bono emitido durante la gestión de Juan Schiaretti por un total de 300 millones de dólares.

Mientras tanto, en lo que resta del año se aproximan al menos dos vencimientos correspondientes al CO24D y el CO21D, según informó el medio cordobés La Voz. Ambos suman un total de 158 millones de dólares que deberán ser depositados con tan solo días de diferencia.

De ellos, el más pesado sería el CO21D, por el cual están comprometidos 140 millones de dólares. Comprendería el servicio número 8 de intereses y el cuarto de amortización del bono emitido en 2016, también por Schiaretti.

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Córdoba y sus vencimientos en dólares.

Córdoba: el “bypass” en pesos y un desafiante 2025

La provincia mediterránea es una de las pocas en el país con capacidad de acceso al crédito internacional. En ese orden, más del 90% de su deuda pública está nominada en dólares, con acceso a precio oficial en pesos a la cotización del día de cambio.

Con la caída de la recaudación y el cierre de los circuitos coparticipativos nacionales, la dificultad para honrar dicha deuda se ha elevado. Mucho más aún teniendo en cuenta la política de devaluación lenta que lleva adelante el Ministerio de Economía respecto al tipo de cambio.

Para poder sortear esos factores, y ante la imposibilidad de generar mayores reestructuraciones de deuda internacional, el Gobierno de Córdoba ha recurrido a un “bypass” que permite trasladar a pesos lo que alguna vez fue pasivo en dólares. Así, la emisión reciente de bonos en moneda nacional proporcionaría el flujo de dinero para afrontar los compromisos externos, cuya viabilidad depende exclusivamente de la capacidad de cumplimiento.

Por otra parte, el 2025 se presentará aún más desafiante. Con el posible sostenimiento de la sequía coparticipativa, el Gobierno provincial deberá afrontar pagos importantes de los bonos CO24D y CO21D, mientras que en lo que resta de la gestión Llaryora abonaría poco menos que 1,53 billones (millones de millones) de pesos sobre un total de deuda que asciende a los 1,93 billones.