La península de Crimea, anexada por la Federación Rusa en el 2014 tras una guerra civil interna entre rusófonos y nacionalistas ucranianos, es sabido que es un punto estratégico geopolítico para Vladimir Putin al tener salida directa al Mar Negro y por sus grandes reservorios de gas natural. Según lo revela Washington Post, ejecutivos de empresas rusas y chinas estarían dialogando en secreto para la construcción de un túnel subfluvial que conecte Crimea con Rusia como salvaguardo ante los actuales ataques con drones de la fuerza aérea enemiga.
DICE WASHINGTON POST
Putin 'cranea' el túnel Crimea-Rusia con China detrás
El presidente Vladimir Putin discute en secreto con ejecutivos de empresas chinas para construir un túnel subfluvial que conecte la penincula de Crimea con jurisdicción del Kremlin.
Es que el existente Puente de Kerch/Puente de Crimea que conecta tal región con Rusia continental, ha estado en la mira de la fuerza aérea ucraniana que la ha bombardeado con drones en varias ocasiones en pos de desabastecer de municiones a las tropas rusas.
Tales tropas y la flota rusa tienen una base en el principal puerto de Crimea, el de Sebastopol hasta 2042, tras un polémico convenio firmado en el 95 con el gobierno ucraniano que desató una gran escándalo social porque parte de la ciudadanía lo consideró como una entrega de su soberanía.
Ahora bien, según información exclusiva de Washington Post, ciertas empresas de Rusia y sus homólogas chinas estarían negociando off the recorddesde octubre la construcción del primer túnel subfluvial Crimea-Rusia.
Justamente, el plan del túnel subfluvial se debe a las crecientes preocupaciones de Rusia ante la vulnerabilidad del Puente Kerch que ya ha sido bombardeado 2 veces desde el estallido del conflicto, y el cual es la única conexión logística terrestre del Ejército con su propio territorio.
En las negociaciones para la construcción del túnel subterráneo bajo el estrecho de Kerch, según WP, participó la empresa estatal China Railway Construction Corporation (CRCC) que expresó estar dispuesta a "garantizar la construcción de vías férreas y carreteras de cualquier complejidad en la región de Crimea".
La empresa china CRCC, una de las involucradas en el proyecto del túnel Crimea-Rusia según los emails interceptados por Inteligencia ucrania, solicitó como condición para formar parte que este bajo anonimato, incluso reemplazando el nombre real de la compañía por otro en todos los contratos.
No es un dato menor que la empresa china estatal CRCC ejecutó proyectos con Rusia que incluyen una extensión del sistema de metro de Moscú que se completó en 2021.
Es más, la Inteligencia ucraniana accedió a archivos de registro corporativo que muestran que recientemente se formó en Crimea un consorcio ruso-chino que involucra a personas nombradas en los correos electrónicos.
Vladimir Kalyuzhny, un empresario ruso identificado en documentos como el director general del consorcio, que fue consultado por Washington Post habló del asunto como “mucha palabrería” y dijo que no brindaría información a “los medios enemigos”
Kalyuzhny, aparece en los emails cuando le escribe a un funcionario ruso de Crimea de "una carta de nuestros socios chinos sobre la disposición de una de las empresas más grandes de China, CRCC, a participar como contratista general en la construcción de un túnel bajo el estrecho de Kerch”.
Puntualmente, el correo electrónico estaba dirigido a Georgiy Muradov, representante permanente de la República de Crimea y exembajador de Rusia en Chipre, así lo informó el WP. Otro correo electrónico menciona a un banco chino dispuesto a “convertir sus fondos en dólares en rublos para transferirlos a Crimea y financiar proyectos [del consorcio]”.
La construcción del túnel Crimea-Rusia involucraría además a empresas asociadas con Arkady Rotenberg, un amigo de la infancia de Putin de abultado patrimonio gracias a licitaciones de obras públicas fogoneadas por el Kremlin, según el WP.
El oligarca de 71 años goza de varias propiedades en Crimea y ha sido sancionado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos debido a ello. Su constructora, Stroygazmontazh, también actuó como contratista principal en el puente de Kerch.
El proyecto del túnel subfluvial entre empresas rusas y chinas, de hacerse público oficialmente, representaría un gran problema para la administración de Xi Jinping, que nunca reconoció abiertamente la legitimidad de la anexión de Crimea a Rusia, pero que podría verse implicado en sanciones económicas de parte de la UE y OTAN que podría menoscabar su comercio bilateral mundial.
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