El presidente de Bolivia, Luis Arce, cumple cuatro años gobernando desde la Casa Grande del Pueblo, en medio de un convulsionado contexto social dada las presiones del sindicalismo que responde a Evo Morales, por la fractura interna del MAS y por la actual crisis económica.
LA PAZ AGITADA
Bolivia con Luis Arce: Cuatro años al poder, grieta del MAS y crisis social
Luis Arce apela a la unidad, a un año del fin de su mandato y en medio del clima de guerra en el MAS. Mientras tanto, sigue la confrontación con Evo Morales y Bolivia aún no puede despegar de la grave crisis económica.
08 de noviembre de 2024 - 16:08
Luis Arce versus Morales por el poder de Bolivia
Las presiones políticas y el fuego cruzado entre el evismo y el arcismo, que se han tirado con munición pesada (con el supuesto estupro de Evo versus con el ecocidio de Arce) evidencian la falta de unidad al interior del gobierno, pese a ser del mismo partido.
Por este clima sin retorno, el mandatario Luis Arce ha pedido este viernes por la unidad del pueblo, al menos. El jefe de Estado dio unas contundentes declaraciones en medio del panorama en pie de guerra dado los bloqueos y las protestas desde las filas de Evo Morales, su antiguo colega y ahora actual archienemigo.
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"Hermanas y hermanos bolivianos, tengan la certeza de que cada obstáculo que hemos superado y cada logro que hemos alcanzado son el resultado de la unidad y la determinación de todos y cada uno de ustedes", ha escrito en su cuenta de X.
"Nada ni nadie nos arrebatará las conquistas sociales que con tanto esfuerzo hemos logrado", dijo Arce, quien ha pedido a sus compatriotas que este último año que le queda estén "más unidos que nunca".
"La historia nos ha demostrado que la unidad es nuestra mayor fortaleza frente a aquellos que intentan socavar nuestra democracia y amenazar nuestra economía", sentenció, justo un día después de que lograra restaurar el tráfico en las avenidas que permanecían bloqueadas por los grupos afines a Evo Morales.
Bolivia: Entre Luis Arce y el 'boicot' del evismo
Luis Arce cumple cuatro años en el Ejecutivo boliviano en medio de la agudización de la crisis política y su contienda inclaudicable con Evo Morales.
El presidente boliviano, a un año de finalizar su mandato, intenta a toda costa contener la ebullición social y las presiones sindicalistas fogoneadas por el evismo ante la escasez de alimentos, dólares y combustibles y con una inflación acumulada en octubre de 7,26%.
Arce, cuando asumió la presidencia el 8 de noviembre del 2022, tuvo el beneplácito de Evo, quien respaldó su candidatura, aunque ahora ponga palos en la rueda.
En ese sentido, el actual presidente Arce llegó al poder Ejecutivo con la imagen de haber sido un gran gestor dentro del anterior gobierno, el del líder cocalero, quien gobernó del 2006 al 2019.
Ambos compartían el mismo electorado de las filas del MAS, el que ahora se ha resquebrajado por la contienda que libran en estos días.
Ahora bien, en un nuevo capítulo dentro de la disputa con Evo Morales, Arce logró esta semana que el Ejército y la Policía desbloqueara las calles de la zona central de Cochabamba, que los seguidores del líder indígena cortaron por 24 días.
Evo Morales, apoyado por los sectores populares, los obreros del campo y la comunidad indígena, hizo una huelga de hambre que duró cinco días. El jueves, la suspendió al lograr pactar una reunión con dirigentes sociales, la Defensoría del pueblo y el Gobierno.
La pulseada que juegan por estos días ambos líderes del partido de izquierda MAS, llegó a un punto sin retorno cuando Morales acusó a Arce de un intento de magnicidio.
Tal como contó Urgente24, el ex presidente de Bolivia reveló hace semanas que intentaron atentar contra su vida en el Trópico de Cochabamba.
El líder cocalero dijo haber disparado a la llanta de un vehículo de unos “agentes del Estado” que lo perseguían para intentar asesinarlo y quienes hirieron a su chofer personal cuando abrieron fuego. Sin embargo, el lunes se ‘desdijo ’ cuando afirmó que ni él ni sus acompañantes estaban armados.
Por estas contradicciones el gobierno de Luis Arce aseguró que el ataque a Evo Morales no fue más que “teatro” y que su auto no se detuvo en un control policial y atropelló a un oficial.
Mientras que, desde el evismo, acusan a Luis Arce de haber montado un autogolpe en su contra para mejor su imagen popular. En junio, hubo un levantamiento militar en Bolivia y el general Juan José Zúñiga, que lideró la revuelta, fue detenido por terrorismo y por alzamiento armado contra la seguridad y soberanía del Estado.
El mismo general habló de un “autogolpe” cuando fue arrestado. Ante los medios, afirmó que el presidente Arce le había encargado “hacer algo” para levantar su popularidad en medio crisis económica y malestar social.
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