Fernando Espinoza se transformó nuevamente en noticia en la noche de este domingo (28/08) por otra bochornosa actuación, esta vez, durante la victoria de Boca frente a Atlético Tucumán 2-1, en La Bombonera, por el partido que correspondió a la décimo sexta fecha del Torneo de la Liga Profesional de Fútbol de Primera División 2022.
ANTECEDENTES
¿Hasta cuándo va a arbitrar Fernando Espinoza?
Fernando Espinoza, árbitro designado para el Mundial Qatar 2022, se transformó en noticia por otra pésima actuación en el partido Boca-Atlético Tucumán.
28 de agosto de 2022 - 23:58
Fernando Espinoza, árbitro
designado para el Mundial Qatar 2022, se transformó en noticia por otra pésima
actuación en el partido Boca-Atlético Tucumán. (Foto: Noticias Argentinas) Noticias Argentinas
Lo cierto es que Espinoza, árbitro que representará a la Argentina en la Copa Mundial de Fútbol de Qatar 2022, volvió a estar en el foco de la polémica cuando ignoró un claro penal para el Decano que provocó Carlos Zambrano contra Ignacio Maestro Puch que mereció la expulsión y, hasta, no convalidó una clara posición adelantada de Sebastián Villa en el momento que le cedió el pase al juvenil Luca Langoni cuando convirtió el gol del empate para Boca.
Más allá de esta pésima actuación, Fernando Espinoza tiene nefastos antecedentes de polémicas decisiones y estuvo mucho tiempo suspendido tras el partido Belgrano de Córdoba-Banfield correspondiente a la novena fecha de la Superliga 2018.
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En ese partido, Espinoza cometió cuatro errores en el controvertido gol de Julián Carranza que sentenció el 1-1 para Banfield ante Belgrano en Córdoba. La situación se dio en el cuarto minuto de descuento: el juez sancionó que César Rigamonti, arquero del conjunto local, demoró más de seis segundos en reponer el juego. Darío Cvitanich apuró el cobro, Espinoza lo validó y el juvenil delantero, con el arco vacío, firmó la igualdad.
Primer error: había falta a Rigamonti en la acción en la que se quedó con el balón. Espinoza lo omitió, tal vez confiado en que el arquero tenía la pelota en su poder.
Del borbollón quedaron el arquero y Cvitanich enfrente suyo, dialogando. Segundo error: la cuenta de seis segundos no debió haber comenzado con el atacante visitante impidiendo que César Rigamonti pudiera salir.
Tercer error: El reglamento indica: “se concederá tiro libre indirecto si un jugador impide que el guardameta lance el balón con las manos, o patea o imtenta patear el balón cuando el guardameta está en el proceso de lanzar el balón con las manos”. En consecuencia, Espinoza debió haber marcado infracción de Cvitanich. Pero sancionó al revés.
Cuarto error; el menos grave en la cadena, porque tuvo otras tres oportunidades para redimirse: Rigamonti le cede la pelota a Darío Cvitanich y la pone en juego. Pero Espinoza nunca da la orden, ni se lee en sus labios un “juegue” que alerte de que el juego se reanudó, según publicó en ese entonces Infobae.
Por otro lado, en 2016, el colegiado asumió que por un error suyo se arruinó el espectáculo en Jujuy donde dio un penal inexistente a Boca y llevó al plantel de Olimpia a retirarse del campo de juego.
“Fue un error, no un robo”, subrayó Espinoza al romper el silencio al admitir que el penal que sancionó a Alexis Rolín fue un error que recién advirtió cuando lo vio por televisión.
“Fue el peor momento, porque uno se da cuenta de que todo lo ocurrido después fue por ese error”, declaró Espinoza en un diálogo telefónico por TyCSports, luego que rechazara hablar al llegar de Jujuy en el aeroparque metropolitano Jorge Newbery.
Ya los medios habían dejado en evidencia el error y la dirigencia de Olimpia cuestionó al referí, al punto que el entonces presidente, Marco Trovato, señaló: “El árbitro no estuvo a la altura de los dos equipos que jugaron el partido”. Incluso Trovato justificó que el plantel de su club dejara el campo de juego: “Había que dejar en evidencia al árbitro”.
“Lamentablemente el espectáculo se arruinó por un error mío. De todo se aprende”, reconoció Espinoza.
En 2019, en el clásico Huracán-San Lorenzo, el réferi se dirigió hacia el vestuario envuelto en reclamos de parte de los dos equipos, sobre todo los del Globo, molestos con el juez pese al 1-0 parcial con el cabezazo de Cristián Nahuel Barrios. Y ese enojo se vio reflejado en la apretada que denunció el árbitro, ocurrida durante el entretiempo.
Lo cierto es que Huracán protestó por dos penales y de la cantidad de amonestados en los primeros 45 minutos (cinco). Una de las polémicas sucedió al comienzo del partido, a los 17 segundos de juego. El Rodrigo Droopy Gómez capturó una pelota dentro del área y cayó ampulosamente ante la marca de Ezequiel Pocho Cerutti. El juez dijo siga siga ante las protestas de los locales. De acuerdo con las imágenes de TV no se aprecia un contacto del delantero de San Lorenzo capaz de provocarle esa caída a su rival. En esa jugada hay un acierto de Espinoza.
Huracán y San Lorenzo se fueron al descanso con reclamos al árbitro, que no le dio un penal al Globo y no expulsó a Carlos Araujo por un codazo a Héctor Fértoli. Sobre el final, debió haber echado a Fernando Coniglio.
En medio de sus muy cuestionadas actuaciones, Fernando Espinoza protagonizó un apriete a un reconocido periodista de la provincia de Mendoza a través de una llamada telefónica.
El presidente de la Asociación Civil de Árbitros Mendocinos Asociados y árbitro del fútbol argentino realizó un apriete al periodista Juan Esteban Suraci.
El conductor lo contó en vivo en un diálogo en el programa radial Dos de Punta en Radio Andina.
Según relató el periodista, Espinoza lo amenazó a través de una llamada telefónica en el que lo acusaba con mostrar causas implicadas.
El enojo por parte del juez se habría dado luego de que en un programa saliera en una nota el ex árbitro Javier Castrilli.
El juez que incursionó en la política en la CISD (Comisión de Investigación de Seguridad en el Deporte) durante el 2001, habló acerca del manejo de Fernando Espinoza en Mendoza.
Tras varios mensaje increpando al periodista, desde el programa radial invitaron a los micrófonos al árbitro y este decidió rechazar la solicitud pero si realizó una llamada telefónica dónde amenazó al conductor Juan Estaban Suraci.
Tras este episodio, a Espinoza le tocó dirigir un partido caliente en el que se sacaron chispas Vélez y San Lorenzo por la 20° fecha de la Liga Profesional 2021 que terminó en victoria del equipo que dirigía Mauricio Pellegrino por 2-1, por los goles de Lucas Janson (en dos oportunidades) para el Fortín y Francisco Ortega, en contra de su arco, para el Ciclón.
En Liniers, tuvo gestos positivos, como cuando advirtió a Gerónimo Poblete, mediocampista central de Vélez, tras una falta que le pudo haber costado la expulsión: “¡Tené cuidado! Estás amonestado. ¡Estás amonestado!”. Pero en líneas generales se lo vió desbordado, potenciando climas que -de por sí- suelen ser extremistas en un fútbol argentino histérico y lleno de urgencias.
Las cámaras del programa Paso a Paso, por TyC Sports, lo dejaron expuesto en Liniers. Una vez más. El clima estaba caldeado en la cancha de Vélez cerca del final del primer tiempo. Vélez se sintió perjudicado por el fallo de las jugadas divididas que -entendían- eran cobradas en favor del Ciclón. Y porque entendían, además, que finalizó el partido antes de tiempo.
En la reanudación de la segunda etapa, todo el estadio insultó a Espinoza porque (incluso 15 minutos después) seguían enojados con el juez del encuentro. “Espinoza botón, Espinoza botón, sos un h... de p...” fue la canción que tronó en Liniers.
Fernando Espinoza respondió primero riéndose. Y no bien dio comienzo al segundo tiempo, mientras Federico Mancuello, mediocampista zurdo de Vélez, buscaba con un pase de apertura hacia la izquierda para Lucas Janson, las cámaras tomaron a Espinoza tirándole besos a la platea que está opuesta a los bancos de suplentes.
En Liniers hubo tumultos, protestas, reclamos, tensión, fútbol argentino en su máxima expresión. En un momento, en el área de Vélez, hasta volaron trompadas entre los futbolistas (algunas terminaron en el aire y otras no), entre los que estuvieron involucrados el arquero Lucas Hoyos, Ezequiel Cerutti y varios jugadores más.
El tumulto generó la aparición de casi todos los protagonistas y hasta de Fernando Echenique, el cuarto árbitro. Fue el propio Echenique el que debió calmar a Espinoza en un momento de tanta confusión que involucró charlas con los jueces de línea. La acción finalizó con cuatro amonestados pero sin tarjetas rojas. Y el juego siguió.
Al hacerse viral sus reacciones, el árbitro sostuvo: “Bueno... pero está bien. Es un mimo para nosotros. Que nos insulten a los árbitros lo extrañamos en la pandemia. Y que todo el estadio haya coreado mi apellido después de un año y medio es lindo... Era algo que extrañábamos en la pandemia”, manifestó en una entrevista con ESPN. Y hasta entregó el nombre de su mamá (Nelly) y le mandó un saludo, la víctima de los insultos de los simpatizantes de Vélez.
En Liniers, Espinoza sancionó 29 infracciones (13 de Vélez y 16 de San Lorenzo) y amonestó a 10 jugadores, cinco por lado: en el local vieron la amarilla Lucas Hoyos, Gerónimo Poblete, Federico Mancuello, Juan Lucero y Luca Orellano, mientras que en el Ciclón sancionó a Alexis Flores, Cristian Zapata, Yeison Gordillo, Néstor Ortigoza y Franco Di Santo.
En consecuencia, Fernando Espinoza es una verdadera máquina de acumular fallos vergonzosos y, lo peor de todo, es que representará a la Argentina en Qatar. En otras palabras, Espinoza es una vergüenza nacional.
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