Los médicos del Hospital Provincial de Rosario siguen conmocionados por el asesinato de Leoncio Bermúdez, ocurrido el martes (14/11) a la noche, y decidieron que a partir del miércoles el edificio permanezca cerrado hasta nuevo aviso. Como consecuencia, no reciben nuevos pacientes, salvo urgencias, y solo cuidan a los que ya están internados, mientras esperan soluciones de parte del gobierno provincial.
CRIMEN DEL POLICÍA
El Gobierno de Santa Fe cortó la atención médica a presos
El Hospital Provincial de Rosario no atenderá presos por 30 días, luego del asesinato del policía, y espera las medidas de seguridad del Gobierno de Santa Fe.
La medida adoptada por los trabajadores del nosocomio fue acordada con las autoridades del mismo, y tendrá vigencia hasta que se realicen cambios que garanticen la seguridad laboral que necesitan para desempeñar sus tareas con normalidad.
En este sentido, uno de los pedidos que hicieron los gremios de los médicos, fue que se deje de atender presos. Teresa Ghio, la directora del hospital, había informado que por día atienden a 6 o 7 reclusos, quienes deambulan por los pasillos del edificio con sus respectivas custodias.
Este pedido fue escuchado por el Gobierno de Santa Fe, y en consecuencia la ministra de Salud, Sonia Martorano, firmó una resolución que suspende por 30 días la recepción de presos en ese hospital. Además, dispuso redistribuir los turnos ya asignados a reclusos que debían atenderse en el lugar.
La interrupción por 30 días se debe al cambio de gobierno en Santa Fe que se hará efectivo el 10/12, para que Silvia Ciancio, la próxima Ministra de Salud, decida si la medida sigue o no.
El ministerio que todavía comanda Martorano se comprometió también a realizar reformas en lo inmediato para mejorar la guardia policial en el sitio. En este sentido, resolvió que la garita policial, donde estaba alojado Bermúdez, y que se encuentra afuera del edificio, pase a estar adentro del mismo.
Otra de las modificaciones previstas es aumentar la seguridad con el monitoreo de cámaras, e instalar una puerta blindada en la garita policial. Aunque esta medida se encuentra en suspenso porque no consiguen las cerraduras especiales que se utilizan para este tipo de cerramientos, por lo que su instalación está demorada.
Igualmente, el deseo del directorio de Provincial es llegar a un acuerdo con los médicos y que reanuden la atención mientras se inician las obras.
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