CÓRDOBA. El Gobierno de Córdoba, por orden de Martín Llaryora, estaría avanzando rumbo a la sanción de una Ficha Limpia propia. Con gestiones legislativas avanzadas, el oficialismo buscaría transformar en ley la normativa que impide que personas con complicaciones judiciales activas (condenas) sean candidatas políticas.
CONDENAS
Córdoba avanza con su Ficha Limpia para evitar paso en falso
El Gobierno provincial acelera las gestiones legislativas para que Ficha Limpia sea realidad a nivel local. Fastidio en la gente por lo sucedido en Nación.
La maniobra del Centro Cívico llega luego de que el proyecto nacional haya fracasado en el Congreso por la falta de apoyo de la Casa Rosada. Un hecho que generó fastidio incluso entre los propios votantes oficialistas, que en muchos casos cuestionaron el accionar libertario de mantener la puerta abierta a candidaturas de jugadores como Cristina Kirchner.
Con ese malestar sondeado, y compartiendo buena parte del electorado que votó por Javier Milei en la provincia pero que no se define como militante, el Gobierno provincial decidió avanzar en las últimas horas para intentar colocar el proyecto en tratamiento a nivel local. El encargado de hacerlo flotar será el ministro de Justicia, Julián López, quien mantiene reuniones con distintos sectores para poder llegar a un proyecto con apoyo suficiente.
Para la receta local, Llaryora tendría previsto incluir también la prohibición para el ejercicio de cargos públicos. Es decir, los condenados no podrán ser ni candidatos políticos ni tendrán lugar en la estructura interna del Estado.
Córdoba quiere limpia la “ficha”
En cualquier caso, el proyecto oficial habilitaría el regreso a la actividad política una vez cumplida la condena o revocada la sentencia. Cabe destacar que quedarían marginados los condenados en segunda instancia.
La intención del oficialismo provincial es que la norma marche en tratamiento durante las últimas sesiones de diciembre o las primeras de febrero. Claro, todo ello al calor de la demanda social por recortar espacios de poder a la “casta” política.
Además, el espacio comandado por Martín Llaryora buscaría apoyo unánime en la Unicameral. La intención es marcar el rumbo en bloque de la política cordobesa, sacando a relucir las propiedades del “partido cordobés”, que contiene actores de espacios en principio opositores dentro de la estructura del Estado.