ARGENTINA

ESCÁNDALO

Murió luego de ser atendido por el médico trucho

La situación de Ignacio Martín (19) se agrava día a día a medida que se van conociendo nuevos detalles sobre su incursión en el COE y la medicina. Ahora, el médico trucho se enfrenta a una posible denuncia por homicidio, luego de que un hombre muriera poco después de ser atendido por el joven. La Justicia ya investiga si le cabe alguna responsabilidad y descartaron la figura de mala praxis.

CÓRDOBA. El paso de las horas complica cada vez más a Ignacio Martín (19), el joven que fingió ser médico durante varios meses en Córdoba y llegó a tener cargos importantes dentro de la estructura sanitaria cordobesa, más concretamente en el Centro de Operaciones de Emergencia, justo cuando la pandemia demandaba una mayor cantidad de personal sanitario para atender a los pacientes graves infectados con coronavirus. Pero en los últimos días, la seriedad del caso fue tomando su peor forma, al conocerse que el médico trucho habría atendido personalmente a pacientes en estado crítico, indicando medicaciones y cambiando tratamientos, e incluso uno de ellos habría fallecido.

Desde que se conoció el caso mediante la denuncia de un legislador de Río Cuarto, ciudad en la que Martín habría ejercido ilegalmente la medicina y en la que hoy se encuentra detenido, todos los días salieron a la luz nuevos relatos de engaños y estafas que habrían sido perpetradas por el joven. En un principio, se hablaba de que Martín se había limitado a realizar hisopados y capacitaciones para ello, pero la profundidad de su incursión lo lleva a enfrentar una posible denuncia por homicidio. 

Cabe recordar que el engaño más grave del joven (habría tenido otros episodios anteriormente) comenzó a inicios del 2020, cuando se desató la pandemia. En aquella oportunidad, Martín ingresó al cuerpo de voluntarios que el Gobierno de la provincia de Córdoba había abierto de manera provisoria, para colaborar con las tareas determinadas por el COE. 

Una vez dentro del cuerpo de voluntarios, el joven fue ganándose la confianza de diferentes autoridades, con el discurso de estar cerca de recibirse de médico y mintiendo en su edad. Su actividad se fue incrementando a tal punto, que terminó siendo trasladado a Río Cuarto (es oriundo de Córdoba) para colaborar con tareas sensibles a las cuales accedió luego de presentar una documentación apócrifa que daba cuenta de su estado profesional. 

Entre las tareas que Martín ejerció, se encontraron algunas muy sensibles como derivación de ambulancias en la región sur de la provincia para pacientes con Covid-19, atención de pacientes, y asistencia domiciliaria. Incluso llegó a recibir a funcionarios públicos y les dio recorridos por las instalaciones del COE en Río Cuarto (entre ellos, el intendente Juan Manuel Llamosas). 

Luego de terminar sus tareas en el COE, y con el retiro del mismo de Río Cuarto, Martín consiguió, de algún modo, quedarse trabajando de médico para el municipio riocuartense. Y allí es donde se desató el caso más grave. 

Más de 50 personas fueron atendidas por el médico trucho en dispensarios municipales de la ciudad de Río Cuarto, entre las cuales había pacientes de riesgo, a quienes recetó medicamentos y cambió tratamientos. Pero, como se mencionó anteriormente, su participación médica no se limitó únicamente a atender en consultorios, sino que también asistió a domicilios de personas que tenían algún inconveniente de salud. 

No hay que olvidar que el joven había engañado a varias personas anteriormente diciendo que era paramédico. De este modo, Martín asistió a diferentes domicilios atendiendo pacientes. 

En uno de ellos, el falso médico habría acudido a una casa a atender a un hombre de 29 años que se había descompensado y que había pedido asistencia al COE. Al llegar al domicilio, Martín habría “atendido” al paciente, pero la descompensación no cesó. 

Ante esta situación, el joven consultó si alguien en el domicilio sabía hacer maniobras de RCP, a lo cual uno de los hermanos del hombre descompensado respondió que sí. De ese modo, comenzaron a realizarle trabajos de reanimación al paciente, aunque sin éxito aparente, lo que llevó a Martín a solicitar una ambulancia de emergencias 107, que al llegar al lugar se encontró con el hombre ya fallecido. 

Al conocerse la noticia de que el médico realmente no era un médico sino tan solo un adolescente, la familia del fallecido comenzó a trabajar junto a su abogado para iniciar acciones legales contra el presunto estafador. El letrado Mateo Abrile, que representa a la familia del fallecido, sostuvo que el accionar del joven retrasó la posible atención médica, y fue completamente necesario para la muerte del hombre de 29 años, en una entrevista con La Nueva Mañana.

Por ello, la familia del hombre que murió estaría evaluando acusar a Ignacio Martín por homicidio simple, algo por lo que, de comprobarse su accionar, sería muy posible de ser imputado. De esa manera, la situación de Martín podría dar un giro realmente complicado para el joven, que hoy se encuentra detenido en Río Cuarto, a la espera de ser indagado y con una causa cuya figura no se define.

Párrafo aparte el escándalo que generó en el mundillo político, el hecho de que un médico trucho se haya infiltrado en el sistema de salud pública. Muchos sospechan que Martín llegó a ocupar altos cargos gracias a su simpatía y su capacidad de “relaciones públicas” con altos funcionarios. 

Quedará por verse el grado de participación que los funcionarios del Gobierno cordobés tuvieron en este desastre sanitario. Por el momento, el hecho de que la denuncia haya salido a la luz un mes después de haber sido realizada, habla a las claras de que hay narices importantes involucradas que podrían verse perjudicadas.