'La Purga Por Siempre' es una nueva entrega de la saga a la que por una u otra razón, siempre acabas regresando.
SAGA DE THRILLERS
La Purga Por Siempre, a la frontera entre México y USA
'La Purga Por Siempre' puede ser el estreno menos esperado del año: más de lo mismo, con más estereotipos pero un nuevo atractivo de anarquismo.
La premisa siempre es la misma: una realidad ficticia en la que en Estados Unidos es posible y legal cometer crímenes de todo tipo durante 12 horas. Y siempre un condimento social agregado, más que predecible. Esta vez le tocó a la inmigración mexicana y al supremacismo blanco, que insiste en crear una “América real” llevando adelante una masacre a todo aquel que no comparta sus ideales. Una purga eterna que nace en el estado de Texas.
La primera entrega de esta saga llegó en 2013, con una propuesta que en ese entonces parecía atrevida e interesante, sobre todo en el contexto que presentaba Estados Unidos, donde el derecho a portar armas siempre es tema de debate.
En la historia no solo se le permite a las personas portar calibres de todo tipo, sino que también 1 día al año se libera al salvajismo y después de que suene una alarma a nivel nacional, comienza la famosa purga.
Los portones de las casas de familia se comienzan a cerrar con sistemas de seguridad muy sofisticados, mientras las minorías y la parte más baja de la sociedad queda a merced de su suerte.
¿Por qué interesa?
Resultaría racional preguntar: ¿Cuántas películas se pueden hacer con la misma premisa?
Pero la realidad es que la saga sigue llenando salas de cine y eso se debe, estrictamente, a que el componente agregado en esta ocasión no es una noche más, sino que la ocasión creada para que las personas puedan descargar su ira siendo descarados y brutales por única vez, ahora se vuelve en contra de las autoridades y se promueve una revolución de extrema derecha y sin piedad alguna.
Es cierto que el producto es de USA, donde existe Proud Boys, QAnon, Donald Trump, supremacistas blancos, derecho a portar armas y hasta una suerte de milicia en Texas que promueve la independencia. Para un estudio sociológico queda cómo, en ese contexto, a la vez reclama el statu-quo de 'Tierra de Libertad'.
En cuanto a la revolución 'blanca' -¿acaso no existió en enero un intento de ocupación violenta del Capitolio en Washington DC? ¿De qué ficción estamos hablando?-, ese grupo se siente con la libertad suficiente de hacer todo lo que sea necesario para "limpiar" su país.
Algo similar a lo que sucede cada vez que, con impunidad, los grupos extremistas atentan contra una minoría, ya sea verbal o físicamente. Gente, #BlacksLivesMatter no es una casualidad.
- Con 'La Purga 2014: Anarchy', fue la guerra de clases,
- en 'The Purge: Election Year', fueron los partidos políticos, y
- ahora es anarquía. 'The New Founding Fathers of America' (NFFA tal como lo escuchamos en la película) ahora son víctimas de lo que crearon.
Story
La película empieza con un matrimonio mexicano viviendo en Texas, preparándose para enfrentar su primera Purga.
En lugar de mostrarnos costumbres latinas solamente escuchamos la pronunciación estereotipada, insultos en español y la desesperación por esconderse frente a los supremacistas.
Juan (Tenoch Huerta) es un peón indocumentado que trabaja en la estancia de la familia Tucker: todos blancos que no eligen participar en la Purga.
Durante los primeros 5 minutos ya sabemos quién es la víctima en este grupo. Le podemos agradecer a los prejuicios que nos enseñó Hollywood y por supuesto al guion básico que ofrece la cinta.
Uno atina a pensar que la familia blanca será la asesina, sobre todo luego que Dylan Tucker (Josh Lucas) discrimine a sus empleados.
Sin embargo la escena cambia cuando acaba la Purga y los asesinatos siguen atacando a la familia Tucker y son los mexicanos los que salvan el día.
Desde ese momento se desencadenan unas secuencias de persecución, escapismo y suspenso que son bastante interesantes.
No les voy a decir que fue la mejor película de terror que vi, ni por lejos, pero lograron hacerme saltar de la silla con un buen balance de tono. Sin embargo hay escenas donde como latino te querés esconder debajo del asiento del cine y pedir por favor que paren con los estereotipos.
En especial hacia el final de la película, cuando los estadounidenses intentan hablar español.
¿Por qué si?
Una de las cosas a destacar de la película es la elección del estado de Texas como escenario, teniendo en cuenta que en las anteriores entregas de la saga era una metrópoli la que acaba destruida.
Por otro lado, Texas tiene lo mejor/peor de los dos mundos:
- supremacistas estadounidenses que eligen votar a Donald Trump, e
- inmigrantes mexicanos que lucharon contra la construcción del muro trumpista y la falta de derechos.
No es una película imperdible, pero sí logra que la audiencia se cuestione algunas cosas sobre el futuro, el concepto de la libertad y sus límites.