La compañía del magnate internacional Mark Zuckerberg, Meta, podría tener entre sus manos el siguiente paso en la aplicación de la inteligencia digital a la experiencia humana con sus proyectos de desarrollo del lente inteligente definitivo. Un elemento que se presenta actualmente como un accesorio, pero con potencial de reemplazar a los teléfonos inteligentes.
DESARROLLO
Revolución digital: Meta, muy cerca del lente inteligente definitivo
Los recientes avances de la compañía de Mark Zuckerberg podrían ser una ventana al futuro de la inteligencia digital aplicada al ser humano.
En ese sentido, la industria IT estaría determinada a que dicho aparto trascienda la naturaleza de un periférico. Un lugar que ocupan en la actualidad, por ejemplo, los relojes inteligentes y otros complementos de la experiencia digital.
Es por ello que las compañías llevan años de desarrollo de gafas inteligentes, pero hasta aquí no han podido insertar masivamente sus productos como sí lo lograron con los teléfonos. Todo ello debido a múltiples factores que aún no se cumplieron, pero que estarían en vías a destrabarse.
Al respecto, un artículo del Wall Street Journal dio cuenta de esa evolución, en la que Meta habría dado algunos pasos más rápidos que el de sus competidores. Sobre todo en materia de experiencia de usuario, alcanzando la sutileza necesaria para que las gafas sean “usables”.
Meta, la actualidad y el futuro de los lentes inteligentes
Actualmente, los lentes inteligentes disponibles en el mercado no han podido romper por completo el círculo de la cultura geek. Con precios difíciles de alcanzar para los consumidores generales (3.500 dólares) y una disponibilidad de mercado acotada (principalmente al primer mundo), productos como el Apple Vision Pro no tuvieron un impacto masivo a pesar del alto grado de desarrollo alcanzado.
Por otra parte, el diseño ergonómico de los mismos ha dejado poco conformes a los consumidores. En especial por el tamaño, peso, demandas energéticas e incluso la estética poco casual, que los ponen en un lugar complejo a la hora de pensar en su uso diario.
A ello, se añadió también el cuestionamiento generalizado por la inserción de un nuevo producto que puede aportar a la “polución” digital. Se trata de “otro aparato” con el cual cargar para estar conectados.
Con todo eso a cuestas, las compañías (a nivel general) se han replanteado la producción de los lentes disponibles en la actualidad, con intención de mejorar para una próxima generación. Una cuestión en la que Meta llevaría la delantera.
Meta y Ray-Ban podrían tener la clave
En ese orden, la clave que podría darle la ventaja a la compañía de Zuckerberg estaría en su desarrollo conjunto con Ray-Ban, la conocida compañía de gafas a nivel global. Según el WSJ, los lentes Ray-Ban Meta que actualmente están en mercado habrían marcado el rumbo a seguir para la industria.
En primer lugar, y a partir de una exhaustiva prueba de usuario, el medio estadounidense remarcó el bajo coste. Con un precio de 299 dólares, las gafas quedaron en un rango accesible para el consumidor promedio.
En segundo orden, el WSJ ponderó el diseño y la “usabilidad”, que posiblemente hayan sido aportes de una empresa especializada como Ray-Ban. En ese sentido, las gafas en cuestión son difícilmente distinguibles de lentes comunes, lo que las vuelve más discretas y cómodas.
Por último, la crítica del WSJ destacó la nula invasión digital que se percibe con las Ray-Ban Meta. Claro, ello a costas de un menor nivel de complejidad, ya que las mismas solo toman fotos y otras pocas funciones digitales, sin ingresar en el plano de la realidad aumentada como sus pares más costosos.
La usabilidad on & off como centro de experiencia
Sin embargo, el aspecto más valorado fue la capacidad del producto para ser usado tanto como accesorio digital y análogo según la necesidad del usuario. Algo que el propio Meta graficó como un aparato que “cuando se queda sin batería, sigue siendo un par de anteojos hermosos”.
Desde la industria comprenden que el desafío está en lograr trasladar la complejidad de la realidad aumentada que ofrecen productos como los Apple Vision Pro a versiones más baratas y “usables”. Algo que Meta tendría proyectado lograr con sus gafas Orion, un desarrollo que está en fase de pruebas iniciales pero que ya fue mostrado a cuentagotas a un exclusivo grupo de divulgadores de la materia.
Con Orion, la compañía de Zuckerberg querría alcanzar el balance entre los dos productos que actualmente se ofrecen como lentes inteligentes: los “cascos” de realidad aumentada y las gafas digitales. Así, habría nacido un artefacto capaz de cumplir funciones complejas mediante la proyección de una “pantalla” que se acopla a la visión del usuario, y que es operada con la dirección ocular y los movimientos de la mano, todo ello bajo un marco óptico muy similar al de un lente tradicional.