El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, felicitó a Donald Trump por su triunfo en las elecciones de este martes en Estados Unidos y dijo que "la democracia es la voz del pueblo y siempre debe ser respetada".
NUEVO LIDERAZGO
Lula felicita a Trump, no se 'baja los pantalones': Triunfó el primo hermano de Bolsonaro
Lula Da Silva felicita al nuevo presidente electo Donald Trump y afirma que "la voz del pueblo debe ser respetada". Pese a haber apoyado a Harris, debe bajar la espuma ante el nuevo liderazgo de quien tiene puntos en común con Jair Bolsonaro.
06 de noviembre de 2024 - 11:53
Lula Da Silva Y Donald Trump
Pese a declarar su ferviente apoyo a la demócrata Kamala Harris, el gobierno de Brasil se ha reconfigurado en las últimas horas y ha optado por estar abierto al diálogo con el nuevo presidente electo Donald Trump, aunque el republicano esté en las antípodas ideológicas del Partido de los Trabalhadores (PT)
A través de su cuenta oficial de X, el mandatario brasileño twitteó que "la democracia es la voz del pueblo y siempre debe ser respetada", y agregó que "el mundo necesita diálogo y trabajo conjunto" en pos de "la paz, el desarrollo y la prosperidad".
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En la misma jornada, Jair Bolsonaro, expresidente de Brasil del ala ultraderecha, también felicitó a Donald Trump por su victoria en los comicios del martes.
"Gracias, Dios mío. Felicitaciones @realDonaldTrump", expresó en un breve mensaje en el que también cita un salmo biblíco.
"Salmo 30:5: 'El llanto puede durar una noche, pero la alegría llega a la mañana'", agregó junto a un montaje fotográfico de ambos.
Lula baja la espuma contra Donald Trump
El presidente Lula Da Silva siempre ha mostrado su predilección por el Partido Demócrata. En las últimas semanas, hasta se enlistó en la campaña de la candidata demócrata Kamala Harris, la vice de Joe Biden. Pero ahora, tras la victoria de Trump en los comicios, debe barajar de nuevo las cartas.
Hace dos días en diálogo con la televisión francesa LCI, el mandatario de Brasil respaldó abiertamente a Kamala por la "democracia" en USA.
"La democracia es la cosa más sagrada que los humanos conseguimos construir para gobernar nuestros países. Entonces obviamente hincho por Kamala para ganar las elecciones", dijo Lula sobre los comicios del martes.
Es que Lula, del Partido de los Trabalhadores (PT), ve a Donald Trump como un 'Bolsonaro de Yankilandia'.
Esto, debido a que es sospechoso de fogonear el asalto al Capitolio (6/01/21), el intento de golpe contra la asunción de Biden, tal como Jair Bolsonaro promovió el asalto a las sedes de los Tres Poderes en Brasilia (8/01/23).
Asimismo, Trump se muestra inclaudicable con su apoyo a Israel, como Jair Bolsonaro (por una cuestión ideológica-religiosa). Mientras que Lula viene condenando los delitos de lesa humanidad israelíes en medio de la guerra en Gaza y el daño colateral a civiles palestinos: "Maten al monstruo pero no a los civiles", le dijo a Netanyahu.
Bolsonaro y trump, separados al nacer, según Lula
Hay claramente varios puntos en común entre Donald Trump (R) y el expresidente brasilero Jair Bolsonaro (PN). Por ejemplo, en Estados Unidos el fiscal demócrata Alvin Bragg condenó al republicano por falsificación documental e intenta que rinda cuentas por el asalto al Capitolio.
En Brasil, el juez insignia de Lula, Alexandre de Moraes, hace lo mismo que Bragg y libra una contienda por la democracia contra el bolsonarismo al que investiga por difundir fake news en redes sociales y atentar contra el estado de Derecho.
En el marco de la investigación ‘Tempus Veritatis’, el Supremo Tribunal Federal de Brasil acusó formalmente a Jair Bolsonaro y a su entorno de intentar la abolición “violenta” del estado democrático cuando perdió en las urnas.
El año pasado, en un allanamiento a la casa del ex Ministro de Justicia de Brasil Anderson Torres, la Policía brasilera encontró el borrador de un decreto que defiende la utilización del artículo 136 de la Constitución. Ese artículo se activa sólo cuando “el orden público o la paz social” se ven “amenazados por una inestabilidad institucional grave e inminente”, lo que habría sido parte del plan para un intento de Golpe contra Lula.
Dicho esto, en cuanto a los procesos penales de Donald Trump, tal como los de Bolsonaro, enfrenta una imputación por el delito de subversión electoral presentado por el fiscal especial Jack Smith, que parte del intento del expresidente de anular los resultados electorales ante su derrota (2020) y fogonear el ataque al Capitolio:
- conspiración para defraudar a Estados Unidos,
- conspiración para obstruir un acto oficial,
- obstrucción e intento de obstruir un acto oficial
- conspiración contra los derechos de otros.
Además, Trump fue condenado por falsificación de documentos dentro de la causa del supuesto soborno a Stormy Daniels y está imputado por la presunta violación a la ley de espionaje –al retener documentos confidenciales en su mansión de Mar-a-Lago- , obstrucción a la justicia y falso testimonio.
Delirio y mesianismo en Bolsonaro y Trump
Otra superposición del bolsonarismo y el trumpismo radica en la cuestión de la religiosidad y de un líderazgo carísmatico, cuasi mesíanico.
En septiembre del 2018 Bolsonaro sobrevivió a un apuñalamiento en plena campaña en Minas Gerais, lo que lo catapultó a su presidencia. Trump hace un mes fue atentado en un mitin de Pensilvania, sobrevivió a esa bala que le rozó su oreja y ahora se coronó de gloria en las urnas.
Ambos saben muy bien usar sus infortunios para la campaña política, evidentemente.
Ahora bien, en lo que respecta a la cuestión religiosa, Bolsonaro es fielmente seguido por la comunidad evangélica brasilera que lo considera casi un mesías. Trump también genera un delirio en masa, una devoción profética hacia su persona como si fuera un enviado de Dios en la Tierra.
Es que tanto Bolsonaro como Trump tienen un electorado cristiano de ultraderecha, que extienden creencias descabelladas y fake news como que 'las vacunas causan autismo', 'existen ritos satánicos contra los niños' y 'Trump- Bolsonaro es víctima de una logia mundial'.
Por ejemplo, "fakes news" bolsonaristas habían sugerido que Lula Da Silva cerraría iglesias y templos cristianos si asumía. Ello porque el 6 de agosto del 2021, Lula Da Silva fue visto en un ritual umbanda: el líder del PT ha sido apoyado por movimientos religiosos afrikanistas y umbandistas, a lo que los bolsonarostas catalogan como maliciosos. " No puede hablar de Dios", afirmó Michele Bolsonaro ante una publicación de un concejal que compartía un reel del clip de Lula en una ceremonia afrikanista.
A modo de conclusión, la insania mental o el fanatismo irracional, según distintos puntos de vista, claramente trasciende las fronteras. Y tanto los partidarios de Trump como los de Bolsonaro tienen puntos en común: son providas, creen en ‘enemigos satánicos’ (Lula y Clinton/Biden) e ingnoran la institucionalidad como se vio en el asalto al Capitolio y a la sedes de los tres poderes en Brasilia.
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